Día 52 (continuación/2)

1.1K 212 110
                                    

Él encarnaba cada parte de mi vida que valía la pena vivir y hacía que todo lo que estaba delante de nosotros pareciera brillante, incluso si todavía había pedazos de tiempo llenos de tanta oscuridad.
(J.A.)

* * *

[Día 52]

POV ALEC

Casa.

Ir a casa.

Magnus sólo hace un sonido afirmativo, mientras toma mi mano. -Claro, mi amor.

Ese "Mi amor", ¿podré acostumbrarme alguna vez a la revolución que se crea en mi cuerpo y mi corazón con sólo dos palabras?

Su mano encaja perfectamente en la mía, sus dedos y los míos como si hubieran sido hechos para mantenerse así, su pulgar acaricia mi piel. Y un escalofrío me recorre, millones de chispas de electricidad hormiguean y suben por mi piel, en mi sangre, corren por mi brazo hasta expandirse a cada rincón de mi cuerpo.

Mi cuerpo se siente encendido como nunca. Ardiendo. Y, por un breve momento, me pregunto si es magia. Porque sólo algo como la magia real explicaría lo que estoy sintiendo ahora, ¿cómo puede ser normal algo tan intenso sólo por estar enamorado?

Magnus está hablando, de una y otra cosa, nada muy importante, parece que sólo quiere romper el silencio. Como si yo fuera un niño al que debe tranquilizar, pero yo no estoy asustado por él o por esta situación. Aunque sí, descubrir que alguien me ama desde hace un siglo, que tengo un hijo, que tuve dos hijos, ha sido un shock, lo que realmente me asusta es no ser suficiente.

Sé que Magnus me ama, me ama a mí ahora, porque lo siento. Y sería capaz de conformarse con mi corazón, con que mi corazón lo sienta, con envolverme en sus brazos y llenarme de besos, volverme loco a besos, y nunca voy a poder verlo, ver su cuerpo, no sin la ayuda de su magia, pero ¿me dejaría sentirlo? ¿Quiere él sentirme en esta vida?

Mi corazón se acelera al rememorar estos sueños. Al pensar en la sensación -segurante intensificada- que sus caricias me provocan. Cómo fue sentir sus manos sobre mi piel desnuda, el quedarse sin aire, pero, a la vez, respirar sólo por estos toques. No tengo experiencia alguna, pero no creo que sea sólo deseo lo que me llena. Ahora pienso y supongo que tienen razón, con la persona amada nunca es sólo sexo.

Ni siquiera sé qué es lo que yo quiero con Magnus. Quiero hacer magia con él. Sentir esto que con sólo su mano en la mía ya siento. Quiero saber que no es la magia de un brujo, confirmar que así como mi corazón lo siente, mi cuerpo lo anhela porque tal vez, sólo tal vez, también lo recuerda. O es sólo mi alma, la parte inmortal, deseando una caricia. Y alma sólo puede llegarse a través del cuerpo.

O quizá estoy enloqueciendo y nada de esto es real. Nada es tan fantástico y cursi como yo lo imagino.


POV MAGNUS

Cuando repito por tercera vez la frase y no obtengo respuesta es que me doy cuenta que Alexander no me está escuchando.

¿Alexander?

Él camina a mi lado, muy pegado a mí, como si no quisiera alejarse ni un poco, pero sus pensamientos parecen a kilómetros de distancia.

Me preocupa haber forzado las cosas al contarle todo, ¿y si lo hace sentir mal no recordar? ¿si lo abruma la situación con Max? ¿o si el evento en la playa fue demasiado?

Aunque es un hombre nuevo, tiene mucho de antes, del hombre que conocí, y sé que presionarlo no va a servir, él va a hablar cuando esté listo. Lo que sea que tanto está pensando, me lo dirá cuando quiera hacerlo.

Así que termino por guardar silencio. Hasta que llegamos a su casa. -Ya estamos aquí, Alexander.

Él parpadea y gira su rostro hacia mí. Supongo que estará feliz ya que estamos aquí y tal vez, aunque dijo que no, él necesita espacio, aunque sea el resto del día. Pero entonces, después de un silencio, su ceño se fruncé. -Estamos en mi casa.

-Tú dijiste...

Ah. Me detengo cuando lo entiendo. Él no quiere espacio ni tiempo, quería estar conmigo, en casa.

Debo estar sonriendo como tonto y agradezco un poco que no pueda verlo porque me asusta incluso a mí. Estoy sonriendo tanto que duele.

-Eso puede arreglarse -susurro en su oído, mientras lo envuelvo en mis brazos-, ¿está Izzy en casa?

Él niega, mientras se estremece contra mí. -N-no...

-Perfecto -arrastro mis labios por su mejilla, mientras abro sin necesidad de llaves y hago un portal, apenas entramos a su casa, un par de pasos torpes por no soltarnos nos hacen cruzar hasta el loft-. Ahora estamos de verdad en casa.

Siento a Alexander sonreír contra mi cuello, cuando me abraza más fuerte, su voz, ya de por sí en un susurro, amortiguada contra mi piel. -¿C-crees que...p-podría d-dormir aquí?



CONTINUARÁ...

Sean pacientes con mi pobre Alec, ya de por sí es tímido y más con un tema así, no es cualquier cosa, él está decidido a intentarlo, más que por sexo, es esta curiosidad, la necesidad del otro y de ti mismo, de conocerse más... No es fácil para él decirlo 🙈

Tu corazón me siente (malec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora