Narra Paul
-1, 2, 3.
-¡Ja! ¡la tijera corta el papel! ¡gané otra vez!
-Will, solo es un juego de niños, ¿Por qué estamos jugando a esto?
-La idea la diste tú, a parte, lo que te pasa es que eres un mal perdedor y...
-¡Calla!
-Oh venga ya, Paul. No te humi...
-¡shh! ¡He oído algo!
Presté atención para escuchar el sonido de nuevo, pero no se podía oir nada.
-Tio... Creo que Noah te distrae demasiado -dijo Will, riéndose-.
Aún así, no creía que fuese mi imaginación. Había oído algo, de eso estaba seguro. Iba a enfrascarme de nuevo en el juego, cuando algo me placó y me tumbó, desconcertandome. Will sacó su espada y combatió contra mi atacante. Todo pasó tan deprisa, que no me dí cuenta de lo que me había atacado. Era agua, agua con forma de humano. No tenía ningún sentido, quiero decir, ¿el agua atacar a un hijo de Poseidón? Es más, ¿el agua atacar a alguien? Observé a Will. Él también tenía problemas. Cuando el humanoide le dejaba unos instantes de paz, mi amigo se agarraba la cabeza con gesto de dolor, y gimiendo, pero luego tenía que regresar a la batalla. Saqué mi espada y lancé mandobles al agua (Di Inmortales, nunca pensé que diría eso), pero esta se regeneraba.
-¡Paul! -gimió mi amigo- ¡Agua!
Tardé varios segundos en caer en la respuesta. Eso era, agua contra agua, combatir el fuego con fuego. Invoqué el agua con mis poderes, aunque el lago mas cercano estaba lejos de nosotros, estaba tardando demasiado, ¿Por qué mis poderes fallaban? Con un gran esfuerzo, formé otra figura con agua.
-Acaba con él-ordené, señalando a la otra figura, que tardaría poco en acabar con Will-. Mándale al Tártaro.
Las figuras peleaban, y yo ayudaba a mi amigo a, levantarse. Cuando lo conseguí, todo a mi alrededor daba vueltas y mi vista se estaba nublando.
-¿Paul? Paul, tío, ¿estás bien?
Me desmayé en el acto, cayendo al suelo. Lo último que recuerdo es a Will arrodillado gritando.
-¡Quirón! ¡Quirón! ¡Ven, rápido!
*****
-¡Pero no lo entiendo! -gritaba Will- ¡Y no me gusta no entender las cosas!
-Yo tampoco lo entiendo, Quirón-decía Aurora, sujetándose la cabeza-. Sencillamente, no puede estar pasando.
-Tenéis que tranquilizaros, chicos -les calmó Noah-. Es cierto que esto es muy extraño, pero solo hemos tenido, si contamos la de Will, tres incidencias.
-Cuatro -ahora la que hablaba era Sey-. Los cultivos no crecen, eso solo puede significar una cosa.
-Deméter -susurró Noah-. Es decir, tenemos cuatro dioses cuyos poderes fallan. Zeus, Poseidón, Deméter y PUEDE que Atenea.
-Lo de nuestra madre no es un PUEDE -dijo Will-. Nuestros conocimentos fallan, eso nunca ha pasado.
-Vamos a ver -se aclaró Quirón-. Van cuatro, pero la situación puede empeorar. De momento hay que permanecer atentos, todavía no ha pasado esto con todos los dioses. Tal vez solo sea una crisis, o algo parecido.
Acto seguido, yo murmuré algo del tipo inteligente, seguramente un "¿aagghhh?" Noah se levantó y empezó a hablar. Tenía aspecto cansado, y los ojos enrojecidos de llorar.
-Dioses, Paul. ¿Cómo se te ocurre darme estos sustos? ¡¿Me quieres matar?!
-Tío, creíamos que no saldrías de esta -dijo Will-.
-¿alguien me va a explicar que está pasando? -pregunté-
-Verás, Paul -Quirón, se veía preocupado-. Tenemos razones para pensar, que los poderes de algunos dioses están fallando. Los de Atenea, Poseidón, Zeus y Deméter.
-Y Afrodita -saltó Sey-. Annie intentó utilizarla con los hijos de Ares antes de lo de Noah.
-¿Qué? ¿Qué intentó con Noah?
-Oh, no fue nada -sonrió Sey-. Solo un intento de asesinato. No sé lo que haría sin mi. Es obvio que soy su salvadora. Pero no te acostumbres, no pienso repetirlo.
-¿Dónde está? -dije furioso-
Me incorporé, pero mis cinco amigos me tumbaron otra vez en la cama.
-De eso nada, jovencito -me reprendió Quirón-. Hasta nueva orden te quedarás en la enfermería.
-¡¿Qué habéis hecho con Annie?!
-La hemos expulsado del campamento. Consultamos a Afrodita, y para nuestra sorpresa, accedió.
Yo me tranquilicé, e hice otra de mis preguntas inteligentes y útiles.
-¿Quién ha ganado?
-Después del ataque, suspendimos el juego -me explicó Aurora-. De los dos ataques, en realidad. Siné grabó el ataque de Annie, y después de lo del agua... es muy extraño que el hijo de Poseidón sea atacado por su elemento.
-Pasó otra vez -respondí-. En la playa, ¿No lo recuerdas, Noah?
-Si -replicó Noah-, con demasiada claridad, tal vez.
-El caso -nos interrumpió Quirón-, es que hay que hacer algo.
En ese momento, Sey jadeó, y empezó a expulsar neblina verde. Iba a pronunciar una nueva profecía.
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Huuolaas lector@s!! Me paso por aquí (bueno, no me estoy paseando como Pedro por su casa, pero ya me entendéis). En fin, que me voy del tema. Ya sabéis que si os está gustando la novela podéis darle a la estrellita y comentar! abrazos psicológicos!! ♥♥
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Semidiosa no deseada (TERMINADA)
FantastikNoah se creía una persona normal, al menos hasta que conoció a Paul. Él es un semidiós griego que decidió pasar el último verano con su madre, antes de continuar con sus estudios en el campamento mestizo. A petición de su padre, Paul deberá cuidar d...