Capítulo 73

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Narra Peter

Apenas pusimos un pie dentro de la guaridad de los licántropos, Joaquín, Stefano y yo nos dirigimos hacia a la sala de enfermeria, donde Máximo estaba siendo monitoreado por su grave estado de salud.

-¿Por qué esta dormido?-pregunto Joaquín frunciendo ceño a Emilia-. Él no puede dormir. Es imposible.
-Máximo despertara en unas horas, logramos estabilizarlo, solo que tuvimos que sedarlo porque él dijo que ya no soportaba el dolor.-nos informo Emilia-. Se pondra bien...
-¿Descubrieron qué es lo qué tiene?-pregunto esta vez Stefano.
-Sí.-afirmo y todos la miramos con atención-. Estuvimos revisandolo y haciendole algunos exámenes con mis médicos y los del otro lado para evaluar que es lo que tiene y nos dimos cuenta de algo.
-¿No podra luchar?-pregunte sintiendo como mi garganta dolía por el simple pensamiento de aquello y porque lo que le paso a Máximo era todo por mi culpa.
-Lamentablemente, no. Así Máximo quiera participar en la gran batalla, él no podra hacerlo. Es riesgoso.-dijo Emilia jugando con unos papeles en sus manos nerviosa-. Los secuaces de Victorio no solo lo atacaron...ellos aún no sabemos cómo....consiguieron una muestra de la "cura" y se la inyectaron a Máximo.
-¡Qué!-exclamamos al uníso Joaquín, Stefano y yo-. No puede ser.-susurre sin creerlo-. ¿Cómo lograron...?
-No lo sabemos aún.-dijo Carlos interrumpiendonos entrando por la puerta-. Pero tal vez, ellos no son tan estúpidos como creemos, revisamos y contamos las muestras que habia en el laboratorio del otro lado, y sí como pensamos; falta una.
-Esto es todo culpa de los
humanos.-alzo la voz Joaquín con sus ojos llenos de furia-. Es obvio que uno de ustedes nos traiciono, nadie de los vampiros sabe de la existencia de la cura aparte de Máximo, Peter y yo.
-No te adelantes, Joaquincito.-refuto Carlos-. El laboratorio estaba destrozado cuando fuimos a ver las muestras así que no los traicionamos, nos robaron que es una cosa muy diferente.
-Entonces, deberian tener más cuidado y poner más seguridad.-le sugerí a Carlos que me fulmino con la mirada-. Para que estos percances no vuelvan a pasar.
-¿Máximo va a morir?-pregunto Joaquín a Emilia cambiando de tema.
-No.-nego de inmediato Emilia y estuve más tranquilo-. No sabemos con exactitud cuánto tardara en hacer total efecto la "cura", pero al menos ahora sabemos que funciona y que es posible revertir la "transformación". Por eso sus heridas no sanan por si solas, esta poco a poco volviendo a ser mortal, pero tan lento que aún sigue siendo vampiro así que sus heridas y su salud mejorarán, pero no con la misma rápidez de antes. Pero él se pondra bien. No hay nada de qué preocuparse, su amigo despertara dentro de unas horas, así que ustedes tres a entrenar.

Narra Lali

-Te he estado buscando por todos lados, Euge. Tengo que pedirte perdón.-dijo Gas con la cabeza gacha y nervioso-. Lo que dije estuvo mal...muy...mal...y...y...no debí tratarte de esa forma. Perdón.

Ambas reímos por su intento de disculpa.

-¡Lali!-exclamo él rubio con sus ojos abiertos por la sorpresa-. Regresaste más rápido de lo que esperaba.
-No te preocupes ya me voy otra vez. Necesitan hablar a solas.-me levante de la cama y camine hacia la puerta.
-Ehm...¿te lo conto, no?
-Sep.-asentí con la cabeza-. Más les vale no volver a discutir tratando de arreglar las cosas. Estaré afuera y si llego a escuchar alguna grosería o si alguno de los dos eleva su tono de voz aunque sea solo un poco. Regresare enseguida y los golpeare para que así dejen de comportarse como dos niñitos y empiecen a actuar como los adultos maduros que deberían ser.
-Okey, mamá. Nos comportaremos bien puedes irte.-se burlo Euge.

Salí y para mi muy mala suerte; el mejor amigo y uno de los pocos guardias en los que más confia Carlos estaba afuera esperandome.

-Buenos días, Srt. Lali .-me saludo y yo le sonreí tímidamente, no era nada bueno que mi padre mandara a un guardia por mí.
-Buenos días, ¿pasó algo?-le pregunte.
-Su padre me pidio que venga hasta aquí para llevarla al otro lado porque tiene algo muy importante que discutir con usted.-me informo y yo frunci el ceño, ¿por qué a ese viejo testarudo no le entra en la cabeza que no deseo verlo?-. ¿La espero abajo?
-Dígale que no quiero verlo, de ningún modo iré al otro lado.-apoye mi espalda contra la puerta cruzada de brazos-. No quiero ni verlo de lejos y mucho menos quiero hablar con él.
-La conozco desde que era pequeña, Srt. Lali. No creo que su pelea, no tenga solución. Son muy unidos y...
-Erámos muy unidos, Camilo.-lo corte y él me miro sorprendido-. Ahora yo crecí y él se ha vuelto bastante idiota con el pasar de los años.
-Concuerdo con usted, Srt. Lali. Pero su padre antes que mi mejor amigo es mi jefe y tengo órdenes que cumplir, por favor acompañame.

Suspire con resignación.

-Bien, iré con usted.-acepte-. Pero va a tener que esperarme unos minutos.
-La espero abajo en el estacionamiento, haga lo que tenga que hacer y que sea rápido por favor.

Se fue caminando hasta el ascensor y lo perdi de vista. Me aseguré de que Euge y Gas no estuvieran discutiendo y como solo oí el llanto de Rufina acompañado de sus risas baje tranquila hasta el estacionamiento.

Me subí al auto de Camilo y todo el camino hasta nuestro destino hablamos de cosas al azar y agradecía que no me haya preguntado sobre la pelea entre mi padre y yo. No nos habíamos visto desde que me gradue del colegio porque él como mi padre vivia por y para el trabajo ya que se mantenía soltero y tampoco tenía una relación cercana con su familia. Realmente pienso que mi padre y Camilo solo son amigos por su mutua adicción al trabajo, porque Camilo no era un imbécil o mala persona como los demás guardias amigos de Carlos e incluso llego felicitarme por elegir estudiar arte y no seguir los pasos de mi padre.

Llegamos y observe todo con atención, nunca habia estado en esta parte del bosque con nadie ni siquiera con Peter. Este lugar era nuevo para mí. Y era bastante bonito a decir verdad, donde antes habia estado, los árboles si no estaban cortados, estaban secos y ni hablar de las flores que estaban todas marchitas y ninguna con vida. 

-Por tu cara, creo que nunca habias venido acá. ¿O me equivoco?-cuestiono Camilo y asentí-. Esta parte es la única que se rescato luego de que unos vampiros jóvenes hace años incendieran por error casi todo el bosque por eso esta tan consevada y llena de árboles y flores, los licántropos se encargaron de eso después del incidente.
-¿Estamos en la guarida de los licántropos?-pregunte con curiosidad, Peter me habia mencionado que allí era donde pasaba la mayoría de su tiempo estando de este lado.
-Correcto, ahora sigueme.

Caminamos por unos minutos hasta que nos topamos con lo que parecia un túnel secreto cubierto por varias ramas y plantas para que no sea fácil de ver. Nos adentramos al túnel y seguimos nuestra caminata por unos minutos más hasta dar con la verdadera guarida de los licántropos que no era nada parecida a la de los vampiros, estaba bien cuidada y no era una total pocilga.

-Lali.-me llamó una voz que ahora consideraba irritante e insoportable.
-Carlos, ¿qué es lo qué quieres?-pregunte. 

En serio, mil disculpas por haberme tartado tanto en actualizar, pero este es mi regalo de navidad para ustedes que con sus votos y comentarios me ponen muy feliz.

¡Feliz navidad! De nuevo, disfruten y coman mucho. No creo subir un capítulo más en lo poco que resta el año así que también espero que despidan el año de la mejor manera y que su 2018 sea mejor que su 2017.

Les deseo lo mejor de lo mejor.

Espero les guste
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Mil gracias por leer 🌈

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