Casados Por Accidente [Pablo Alboran] [TERMINADA]

100. Seras una Gran Madre

-Rubio, ¿Nos vamos por favor?- Me pide repentinamente luego de que llevamos alrededor de una hora en la inauguración.

La observo cuidadosamente y no tiene buena cara -¿Qué te sucede cariño?- Le pregunto preocupado.

Se sujeta de mi brazo –Me siento mal. Vamos a la habitación, quiero descansar.-

Sabía que el día de hoy tendría sus consecuencias, ha estado de aquí para allá todo el día.

-Vamos.- Digo sin dudas y comienzo a caminar por el salón sosteniéndola porque realmente tengo pánico que se desmaye o algo.

-Pablo, discúlpame.- Dice una periodista cuando ya estamos caminando por el pasillo. –Solo un minuto.- Insiste y mi esposa me mira como diciéndome "habla con ella."

-Hola, no tengo mucho tiempo, pero dime.- Digo amablemente.

-¿Cómo ha ido la promoción por Latinoamérica y por aquí por Miami?- Me pregunta acercando el micrófono.

-Muy bien, gracias. La gente ha recibido las nuevas canciones de una manera increíble.- Respondo y no puedo dejar de estar preocupado por mi esposa.

-Te vemos muy bien acompañado, sabemos que se han casado hace varios meses y tu esposa luce increíble, pero esta noche se ha rumoreado que está embarazada, ¿es cierto?- Me pregunta tomándome por sorpresa.

¿Se supone que tengo que afirmar la noticia o tengo que negarla?

La miro a ella y además de que se siente mal; me lanza una mirada de "disculpas", se que todo esto la hace sentir mal e incómoda, pero yo no pretendo ocultar a mis hijos.

-Sí, está embarazada. Ahora, si me disculpas se siente un poco mal.- Digo para dar por finalizada la entrevista y sin tener muy claro las consecuencias que esto puede traerle a mi carrera ni a nuestras vidas; continuo el camino hacia la habitación con ella.

-Esperanza, Mariola, Rondene, y toda la discográfica nos mataran cuando esto salga a la luz.- Dice afligida mientras se abraza a mí. –Lo siento rubio, debí usar otro tipo de ropa... he sido una tonta.-

-Ya lo hemos hablado. No me tienes que pedir perdón por nada. Ahora solo preocúpate por sentirte bien.- Le aclaro.

-Estoy mareada.- Me explica.

-Ya llegamos a la habitación y te recuestas.- Le digo sin soltarla.

Las puertas del elevador finalmente se abren y la ayudo a llegar a la puerta de nuestra suite para luego tomarla entre mis brazos y recostarla sobre la cama. –No es necesario que me cargaras.- Me dice una vez que la deposito sobre la cama.

-Solo quiero cuidarte amor.- Le aclaro y me siento a los pies de la cama para ayudarle a quitar los zapatos.

Los dejo sobre el suelo y voy en busca de su camisón, pero cuando estoy por regresar con ella; la veo ponerse de pie e ir corriendo hacia el baño.

Sin dudarlo la sigo y le ayudo a sostener su cabello. –Aléjate.- Me pide aun arrodillada en el suelo mientras intenta recomponerse.

-Ya deberías saber que no lo hare. Esto no me da asco.- Le explico mientras que la tomo de las manos para ayudarle a ponerse de pie.

-Debería...-

-Debo apoyarte en todo, también es un poco mi culpa que estés así.- Digo con una media sonrisa mientras la observo cepillarse los dientes.

-¿Cómo así?- Pregunta confundida mientras deja el cepillo en su lugar.

-Bueno... son mis hijos; he sido yo quien te ha embarazado...- Comento y a pesar de que aun está bastante pálida ríe de mi mal chiste.

-Eso sí.- Replica sin dejar de mirarme.

-Tengo tantas ganas de conocerlos o conocerlas... ¿tú crees que serán niños o niñas?- Le pregunto enredando mis brazos en su cintura.

-No lo sé... por hacerte la vida imposible, sería bueno que fueran niña y así seriamos cuatro contra uno.- Bromea y por lo que se ve ya se siente mejor.

-Estoy acostumbrado a estar rodeado de mujeres; te lo aclaro.- Digo haciéndome el superado y ella ríe.

-Pero ¿has vivido con cuatro mujeres juntas? ¿Dos bebes, una niña, mas tu esposa? ¿Sabes lo que será eso? Cuando vayamos de compras... cuando crezcan y aparezcan los novios, en fin... toda una aventura.- Me dice y sé que quiere volverme loco.

-Me estoy comenzando a preocupar.- Digo entre risas.

-Y yo... Pienso en que de golpe criaremos a tres hijos juntos y me da un ataque de nervios.- Comenta seria.

-Serás una gran madre.-

-¿Tú crees?- Me pregunta preocupada.

¿Cómo puede dudarlo?

-Claro que sí. No solo te amo porque eres preciosa, inteligente, tierna, y todo eso... te amo por lo especial que eres y porque tengo la certeza de que serás una madre increíble y que lucharas por la felicidad de nuestros hijos como una leona.- Le explica mientras juego con su cabello.

-Ay rubio... siempre que yo estoy en mi mar de dudas, vienes tu y me dices unas cosas tan bonitas que hacen que me sienta la heroína del cuento.- Dice sonriente.

-Lo eres. Tú no te das cuenta mi vida, pero eres la mujer más fuerte que he conocido. Tu vida no ha sido fácil, te han herido y así todo le has dado una oportunidad al amor que llego por sorpresa a tu vida. Tu padre dejo una gran responsabilidad entre tus manos y ahí vas tú haciéndote cargo de todo como si nada, y ahora... ahora llevas a estos dos pequeños dentro de ti y así todo estás conmigo en la promoción, ¿Cómo no voy a creer que serás la mejor madre del mundo?- Le digo con toda mi honestidad y sus ojos se cristalizan.

-Pablo...- Me dice emocionada y se abraza a mí. –Te amo tanto rubio mío... gracias por cada minuto que estamos juntos y me haces feliz.-

No sé cómo puede agradecerme, si es ella realmente quien hace que cada minuto a su lado sea uno que quiera recordar para siempre.

***

100 capítulos ya!? No se a ustedes, pero a mi se me han pasado rápido.

¿Ya les aburrio la historia? (Sean honestas/os jeje)

Ahora enserio, mil gracias por leerla, votar y comentar! 🙏🙏🙏🙏