Obsesión Peligrosa

Capítulo 12

Estaba horrizada por lo que acaba de escuchar aun estaba mirando por la ventana cuando una voz detrás de mi me sobresalto.

­–¿Qué pasa? – Escuche la voz de Becky voltee y vi su cara de terror.

– Na...nada no pasa nada – dije yendo hacia mi closet y buscando mi pijama.

­– Por Dios te escuche gritarle a alguien, ¿Quién llamo Lyana? – se acerco a mi un poco alterada.

­–No es nada, vamos a dormir que mañana debo trabajar – dije dándole la espalda y entre al baño a cambiarme solo esperaba controlarme un poco.

Cuando salí vi a Becky aun sentada esperándome, no dije nada solo fui me acosté dándole la espalda, sentí como ella hacia lo mismo pero estaba segura que ninguna de las dos podía dormir después lo de lo sucedido esa noche.

­–Lyana – me dijo Becky un poco tímida ­­– ¿estas dormida?.

Había dudado a contestar pero al final lo hice ­­–¿Sí?.

­–Sabes que te amo ¿verdad, Qué puedes tener la confianza de contarme lo que sea? ­­– me abrazo de lado.

­–Lo sé – dije seria – solo que hay cosas que no puedo contar.

­–¿Por qué? soy yo amiga – me tomo de mi hombro para darme la vuelta y que la viera – lo que sea, sé que te está haciendo mucho daño y eso no está bien.

­–Becky es que tú no entiendes – dije llorosa – mataron a un buen hombre por mi culpa, no lo puedo soportar.

­–No fue tu culpa, no lo fue – dijo abrazándome.

­–Si lo fue Becky – dije llorando sobre su pecho.

­–¿Dime porque?, para poder entenderte – me dijo seria acariciando mi cabello.

­Me le quede viendo por un segundo, ellos eran mis amigos y si estaban en peligro debían saber me senté y ella me imitó – Becky es que... – el teléfono sonó nuevamente.

­–¿Quién puede ser a las 4 de la mañana?— me dijo sorprendida.

El teléfono insistía y corazón parecía que se me quería salir del pecho, lo tomé con mi mano temblando ­–Bueno – me tembló la voz al contestar.

­–Si le cuentas a Becky, la matare – escuche su maldita voz molesta.

Abrí los ojos como plato, ¿me estaba escuchando, acaso me podía ver?, colgué e inmediatamente me pare de la cama y empecé a dar vueltas en la cama, no podía ser esto me volvería loca, estaba más haya de mí.

Becky se paró asustada tratando de entender lo que pasaba, pero yo solo daba vueltas tratando de responder las preguntas que saltaban en mi cabeza.

¿Me escuchaba?, ¿desde cuándo?, ¿también me observaba? Esto era demasiado empecé a dar vuelta a todo lo que estaba en la recamara buscando algo, pero no lo encontraba, tiraba libros, movía cuadros , pero no lo encontraba.

­–­Lyana tranquila, por Dios – decía Becky tratando de tranquilizarme, quería impedir que siguiera con mi tarea.

­–No, no suéltame Dios, no – decía llorando, me estaba alterando mucho, la sola idea que mis amigos murieran por mi culpa me estaba volviendo loca.

­–¿Qué pasa? – entraron Alex y Mark asustados

­–No se recibió una llamada y se puso así – dijo Becky tratando de controlarme, yo quería que me soltará, que me dejara seguir con mi tarea de buscar de donde me observaba, estaba segura que había cámaras en mi recamara de otra manera no entendía.