Obsesión Peligrosa

CAPITULO 32

Narra Taylor

Cuando salimos de la sala de interrogatorios de verdad me sentía exhausta, el interrogatorio con Karla no había salido como había planeado y eso me frustraba demasiado.

Ahí estaba, Karla y su maldito abogado hablando con el capitán, todos realmente nos pusimos histéricos, sabíamos que si el capitán creía la maldita historia de que Héctor estaba muerto iba a cerrar el caso de inmediato y eso no lo podía permitir.

Cuando salieron, nos vieron y la maldita Karla no dejaba de sonreírnos como si hubiera hecho una gracia.

—Muchas gracias señorita Landeros. — dijo el capitán despidiéndole con la mano al igual que a sus abogados. Y me hizo una señal con el dedo para que me acercará a él, David empezó a seguirme — Solo Spencer. — le dijo serio a David y mi compañero se quedó parado mientras yo seguía caminando, sabía que esto no era bueno — pasa. — di 2 pasos  y después cerró la puerta — siéntate Taylor. — me señalo la silla y le obedecí, él haciendo lo mismo.

—¿Qué le dijo esa mujer capitán?. — solté al fin

—Sabes que si Héctor Manríquez está muerto el caso queda cerrado ¿no es así?. — se recargo en la silla.

—Esa mujer mintió capitán, Héctor Manríquez no está muerto. — le dije seria.

—Taylor dos personas reconocieron al sujeto muerto, ¡por Dios!, sabes que está muerto, por lo tanto este caso está cerrado. — dijo serio

—¿Qué?. — Dije levantándome de mi silla como si tuviera un resorte — usted no puede hacer eso capitán, aunque el sujeto este muerto cosa que dudo mucho. — dije dando vueltas en la oficina como si fuera un león enjaulado — la doctora Grace aun esta recibiendo amenazas y su vida aun corre peligro al igual que sus amigos debemos llegar hasta el final de esto señor. — le dije seria parándome enfrente de él.

—Debería ser abogada detective. — sonrió mi jefe y yo fruncí el ceño.

—Vamos capitán, este caso aún no se termina y hay cosas que no me cuadran en la declaración de la doctora Landeros. — suspire cansada.

—¿Cómo cuales detective?. — mi jefe puso su cabeza en sus manos, sus codos estaban recargados en el escritorio y me miro serio.

—Bueno, si se supone que ese hombre está muerto, ¿Cómo es posible que se siga comunicando con la doctora Grace? yo misma hable con él, capitán créame que ese maldito no está muerto o Héctor Manríquez no es el acosador o ese hombre sigue vivo. — dije seria.

—Bueno detective no tienes mucho tiempo, así que apresúrate con este caso. — me dijo serio el capitán, además no podemos darle mucha protección a los amigos de esa muchacha ¿me entiendes?, solo les daré un poco de tiempo en protección a los testigos.

—Gracias capitán, solo necesitamos un poco de tiempo capitán solo eso. — lo mire seria parándome de la silla para salir de ahí lo más pronto posible.

—Y en un mes detective se cierra el caso, un mes solo eso. — me dijo y yo me pare en seco. volteándolo a ver asombrada.

—Capitán, ¡por Dios! Necesito más tiempo que eso. — dije seria

—Es todo lo que tienes el hombre ya está muerto y según sé esas llamadas son de estados unidos, así que sospecho que lo que dice el abogado de la señorita Landeros es verdad, ese hombre es el socio depravado que solo quiere molestar así que si en un mes no me demuestras que la doctora Grace está en peligro este caso se cierra. — dijo serio.

—Se lo demostrare capitán. — suspire molesta.

—Ha otra cosa — Me  dijo cuando estaba a punto de abrir la puerta — no es bueno que te involucres tanto con las víctimas de los casos quitan tu objetividad lo estamos viendo. — me señalo.