Cap. 61

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Hela:

Escucho un sonido proveniente del pasillo, supongo que Ivy se habrá despertado ya. Me seco las lágrimas para que no pueda ver que estaba llorando (como siempre) y la veo entrar en el comedor mientras se quita el antifaz y los tapones con los que duerme desde que Tara vino al mundo.

_ Hela, ¿has dormido algo?

Levanto la vista y veo a mi amiga, esta despeinada y con los ojos medio cerrados por el sueño.

_ No, se ve que le duelen los oídos y no para de llorar, lleva toda la noche así.

_ Acuéstate un rato, ya me quedo yo con ella, son las cuatro de la mañana y llevas ya tres días sin dormir.

_ Tú tienes que ir al trabajo.

_ No te preocupes, es domingo, no trabajo.

_ Ya me encargo yo, tú duerme...

_ Hela, vete a la cama, ponte unos tapones y duerme aunque sea una noche, así jamás se te irán ni las migrañas ni la tendiditis de las muñecas.

Me voy a dormir mientras Ivy se queda con Tara, la niña tiene otitis y lleva tres días y sus tres largas noches sin dejar de llorar, casi no duerme y mientras lo hace tiene que estar en brazos en todo momento mientras la mecemos, sino se despierta de nuevo.

Veo a mi amiga como la mece y canta una nana con cariño, la verdad, no sé qué haría sin ella, sino fuera por Ivy ni Tara ni yo estaríamos aquí. Sé que puedo sonar catastrofista, pero estoy segura de que sin ella habría perdido a Tara, y eso no lo hubiera podido superar, ellas dos son lo único que tengo en este mundo, no habría podido seguir adelante con otro golpe en mi camino, pero bueno, tampoco es tan extraño, creo que llevo ya demasiados golpes a lo largo de mi vida.

Me tumbo en mi cama y me tapo con las sábanas, como todas las noches no puedo evitar volver a echarme a llorar, estoy agotada y me siento completamente sola, esta claro que tengo a mi amiga y a mi hija, pero me gustaría compartir el momento con él.

Además, hoy era un día especial, hoy sería nuestro aniversario, hoy haríamos 3 años juntos. Eso quiere decir que hace casi un año que me dejó, llevo un año llorando por la pérdida de una persona que ya ni se acordará de que existo. Inspiro con fuerza, ya está bien de autocompadecerse, ya está bien de llorar por alguien que seguramente ya ni se acuerda de mí. No puedo seguir así, tengo que salir de una vez de esta depresión en la que llevo sumida un año.

Me duele pero debo olvidarle, ha pasado ya un año, no puedo seguir esperando que cruce por esa puerta diciéndome que me ama y que todo ha sido un error, suplicándome que le perdone. Eso jamás va a pasar, él nunca volverá. Jared me ha olvidado, estuve todo este tiempo engañada pensando que me amaba, pero no era así, simplemente era una novia más en su larga lista, debo aceptarlo de una maldita vez.

Ahora tengo una hija, tengo una personita que depende de mí para todo, no le puedo defraudar, ella ahora es mi única familia, es todo lo que necesito. Ivy, Tara y yo somos una familia, y no debo necesitar nada más, ya es hora de dejar los fantasmas atrás y olvidarme de una vez por todas ese hombre al que amé más que nada y me olvidó.

***

_Hela, dices que de un tiempo a esta parte estás soñando recuerdos -me dice mi psicóloga seria-. ¿Todas son de la misma época?

_ Suelen serlo, el rango de tiempo va desde el embarazo a cuando Tara era bebé.

_ ¿Por qué piensas que sueñas con eso? Es algo que ya habías superado.

Bright Lights (Luces brillantes) -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora