Cap. 57

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Miro mis manos temblar y me centro en ellas, intento que dejen de temblarme, debo concentrarme en otra cosa que no sea el inmenso dolor que siento.

Escucho la puerta del quirófano abrirse y levanto la vista corriendo

_ Hela.

_ ¿Charlie, qué haces aquí?

_ Soy uno de los doctores que está atendiendo a Ivy. Tranquila, ha llegado grave pero hemos conseguido estabilizarla. Quería haber salido en cuanto la he reconocido, pero hasta no estar estable no he podido salir del quirófano, se ha quedado mi compañero.

_ ¿Cómo está?

_ Ha sufrido golpes muy graves y se a roto varios huesos, algunos importantes. Desgraciadamente el golpe más fuerte ha sido en la cabeza, hasta que no despierte no podemos saber las consecuencias que ha ocasionado el traumatismo. Pero por suerte llevaba puesto el cinturón y el airbag funcionó, le ha salvado la vida, de no llevarlos no habría tenido la más mínima oportunidad. Además llevaba gafas de sol y vaqueros, gracias a eso los cristales no le han dañado los ojos ni las piernas cuando el coche ha dado vueltas de campana.

Escucho lo que me dice y noto como mis piernas fallan, no sabia que el coche había dado vueltas de campana.

Charlie nota que me voy a caer y me sujeta. Me lleva a las sillas de nuevo y me acaricia la espalda para ver si así se me pasa el pequeño ataque de ansiedad que me está entrando.

_ Tranquila Hela, intenta inspirar y expirar calmado.

_ ¿Cuándo saldrá de quirófano? -le pregunto cuando por fin consigo relajarme un poco-.

_ Queda aún un rato. Va a tener que estar una temporada en Cuidados intensivos, pero saldrá de esta, estoy seguro. ¿Con quién estas?

_ No ha venido nadie aún, sus padres viven lejos y Ray estaba fuera, todos están de camino. Jared ha venido, pero se ha ido un momento para llamar a su hermano e ir al baño.

_ Me quedó contigo.

_ No te preocupes.

_ Tengo un descanso, lo que están haciendo ahora no precisa de cirujano y necesito despejar mi mente y descansar.

Charlie se queda sentado a mi lado y ambos nos quedamos en silencio. Sé que suena extraño, pero agradezco que esté aquí, aunque me haya traicionado y hecho mucho daño sé que es un buen médico y me está haciendo compañía, algo que agradezco.

_ Hela, yo...  -me dice tras un rato en silencio, noto que le cuesta hablar-. Lo siento, no me porté bien.

_ Sinceramente, eso ahora me da igual.

_ Te debo una disculpa. Me gustabas mucho, pero aunque creía que estaba preparado para lo que significaba estar contigo con el tiempo me di cuenta de que no era así, no soy suficientemente maduro para ello supongo. Me siento mal por eso, Tara es una niña encantadora, cualquier hombre estaría encantado de tenerla como hija, pero a mí me pudo la presión al pensar que en un tiempo podría ser padrastro. Siempre he querido tener hijos, incluso dejé a mi ex porque ella no quería, pero no sé por qué me sentí saturado. Debí habértelo dicho en su momento, pero me gustabas mucho y aunque sabía que no era posible quería que funcionara. Luego conocí a Chloe y comencé a sentir cosas por ella, sé que debí haber cortado la relación, pero no me atrevía.

_ Lo que hiciste estuvo mal, muy mal. Si conociste a otra persona deberías de habérmelo dicho, nos hiciste daño a ambas, Chloe estaba muy ilusionada.

_ Lo siento de veras. No quiero seguir con el tema porque entiendo que no es el momento, pero necesitaba disculparme, lo que hice no tiene nombre.

Bright Lights (Luces brillantes) -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora