Cap. 65

129 13 46
                                    


Vuelvo a casa de Jared, como cada día. Me sorprende darme cuenta de que ya he creado una rutina, me he acostumbrado a salir de trabajar y venir a esta casa, a cenar en familia, ver la tele por las noches, contarle un cuento de dormir a Tara los dos juntos...

Hoy es diferente, es sábado, por lo que solo me he tenido que acercar a mi despacho a aclarar una cosa, apenas he tardado unos minutos ahí, por lo que voy a tener todo el fin de semana libre para disfrutar en familia. Mañana vamos con Ivy y Ray a comer por ahí, quieren que Tara sea la niña de las flores en su boda, por lo que le voy a enseñar algunos vestidos a mi amiga para que elija cuál le gusta más y así además acabo los últimos detalles del suyo.

La verdad es que es que estoy muy ilusionada, me hace muy feliz haber diseñado yo su vestido de novia. Según Ivy nadie la conoce mejor que yo, así que era la persona perfecta para hacerlo. En realidad supongo que lleva razón, conozco su cuerpo, lo que le sienta bien y he escuchado mil veces su vestido soñado mientras fantaseábamos juntas con su boda.

Avanzo por la casa, no se escucha a casi nadie, aunque oigo algún ruido en el cuarto de Jared, por lo que me dirijo hacia allá. Cuando por fin llego entro a la habitación y no me creo lo que estoy viendo.

_ ¿Jared?

Jared se gira y se queda blanco al verme, supongo que no esperaba que llegara tan pronto.

_ No es lo que parece.

_ ¿Que no es lo que parece?

_ Déjame explicártelo.

_ ¿Dónde está Tara? -le pregunto intentado contenerme la risa mientras disimuladamente saco el móvil de mi bolsillo-.

_ Ha ido a por más pintalabios -dice con cara y voz de resignación-.

En ese momento consigo hacerle una foto aprovechando que estaba despistado, miro la pantalla, aparece Jared con los labios pintados de rosa chicle, las mejillas con fucsia y los ojos con verde lima.

De repente aparece la niña con una diadema en el pelo, una falda de bailarina de tul de colorines y unos zapatos de tacón de juguete. Vuelve con su padre y empieza a querer pintarle los labios de nuevo, a lo que él se resiste un poco ya que le da vergüenza porque estoy yo.

_ Te dije que tenía una explicación -se encoge de hombros-, Estrellita, ¿por qué no pintas a la mamá en vez de al papá?

_ No, la mami ya está pintada.

Se pone delante de él y vuelve a pintarle los labios, pero esta vez de rojo, Jared se da por vencido y pone los labios para que se los maquille, aunque casi le pinta más la cara que los labios. Aprovecho y sin que me vean les hago un par de fotos.

Me siento a su lado mientras sonrío al mirar la escena, sé que Jared lo está pasando mal, que le da vergüenza que este aquí a su lado, pero yo ahora mismo lo único que veo es un padre increíble que hace lo que sea para que su hija sea feliz.

_ Mami.

Tara se acerca a mí y comienza a pintarme los labios con rojo, Jared ve la escena y sonríe al verme con los labios haciendo morritos mientras la niña me los pinta concentrada, veo que saca el móvil y nos hace una foto él también.

_ ¿Peinamos al papi? -le pregunto contenta, a lo que la niña asiente-.

Tara y yo empezamos a peinar a Jared, bueno, yo le voy haciendo trenzas y Tara me ayuda como puede, cuando acabamos le vuelve a poner la tiara de princesa y por fin hemos acabado. La chiquilla se va a buscar a su abuela para que vea el resultado, puedo notar que Jared cada vez está más y más nervioso.

Bright Lights (Luces brillantes) -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora