El escarabajo de la Villa de la Hoja

06

Naruto llevó a Fuu hasta el Ichiraku.
Cuando los dos se sentaron, el dueño se acercó a la barra.
-¡Vaya vaya! ¡Veo que te has conseguido una novia, Naruto!
Los dos se pusieron rojos al instante.
-¡No es mi novia!
-¡No es mi novio!
-¡Ja, ja, ja, ja! ¡No hace falta que os pongáis así, sólo era una broma! Entonces, ¿qué queréis tomar? Bueno, a ti no te hace falta decirlo, Naruto. Lo de siempre, ¿no?
Naruto asintió.
-¿Y tú qué quieres, querida?
-No lo sé, nunca he tomado ramen...
-¡Eso hay que solucionarlo ahora mismo! ¡Te pondré un cuenco de ramen de Bacon (Esa variante existe, por cierto)!
Tras esperar unos minutos, la hija del dueño apareció y les sirvió a cada uno su plato.
-¡Buen provecho!
Los dos se pusieron a comer.
-¡Esto está delicioso!
-¿Ves? ¡Te lo dije!
Los dos siguieron comiendo hasta que a Naruro se le ocurrió algo.
-¿Cómo es la villa de la Cascada?
-Pues es muy bonita. Está envuelta en la naturaleza. Hay un gran árbol que hace de centro y que conecta toda la villa.
Los dos siguieron hablando durante mucho rato.
******
Al día siguiente, el equipo 7 comenzó a hacer misiones sencillas.
Tras rescatar a un gato, Naruto estaba hasta el gorro.
-¡Estoy harto de estas misones tan birrias!
El Maestro Iruka le respondió.
-¡No digas estupideces! ¡No eres más que un novato! ¡Todos hemos empezado así! ¡Tienes que progresar poco a poco hasta que puedas hacer misiones más difíciles!
-¡Ninguna de las misiones que hemos hecho valía nada!
-Escúchame bien, Naruto. Cada día llegan misiones a nuestra villa. Desde hacer de niñera hasta encargos de asesinato. En el registro de encargos aparecen misiones de diversa índole. Se clasifican según la dificultad de estos en: A, B C y D, de mayor a menor rango. Nosotros, los ninjas de mayor rango somos los encargados de adjuntar las misiones dependiendo del rango del ninja en cuestión. Si la misión ha tenido éxito, entonces el cliente nos entrega el dinero de la recompensa. Acabáis de convertiros en genin, así que con misiones de rango D tenéis más que suficiente.
Naruto estaba de espaldas a él.
-... yer comí ramen con sabor a cerdo, ¿hoy como los de soya?
-¡Escúchame cuando te hablo!
Entonces se giró y le contestó
-¡Ya lo sé! ¡Te pasas la vida dándome sermones! ¡He cambiado, ya no soy el de antes!
Iruka sonrió ante esa afirmación. El Maestro Hokage se quedó pensando unos segundos con una sonrisa.
-Bueno, si te pones así... No me queda más remedio de darte una misión de rango C. Es un encargo de protección.
-¿¡ Y a quién tenemos que proteger!? ¿A alguien importante?
-Ahora le conoceréis. ¿Puede entrar un momento?
En ese momento se abrió la puerta.
-¿Qué ocurre ahora? Esto no es más que un grupo de niñatos. Sobretodo el enano con cara de tonto.
El grupo se quedó en silencio unos instantes.
-¡Yo lo mato!
Kakashi sujetó a Naruto por el cuello de la chaqueta.
-Este es el cliente al que debes proteger, ¿como lo vas a matar, imbécil?