64. Ramen

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En el original, tardaban todo el dia y la noche en ganar a Kakashi. He decidido darles un día de relax antes de la misión de Gaara.

Sakura seguía impresionada.
"Se han hecho increíblemente fuertes durante estos dos años. Además, están más coordinados que antes..."
Naruto estaba emocionado.
-¡Vámonos al Ichiraku!
Fuu arqueó una ceja.
-Eeeh, Naruto... ¿No deberíamos hacer algo con el maestro Kakashi?
-Nah, tranquila. Cuando se despierte estará bien.
Fuu asintió y se dirigió a su compañera.
-Bueno, Sakura... Nosotros nos vamos.
-De acuerdo.
-¡Vamos! Ya casi huelo ese ramen de cerdo...
******
Mientras volvían a la villa, Chōmei se quedó pensando.
-Ahora que lo pienso, nunca he probado el ramen.
-Si quieres, te doy un poco del mío.
Cuando llegaron al puente dentro del pueblo, un encapuchado con gafas se giró hacia ellos.
-Cuanto tiempo, chicos...
-¿?
"Me suena de algo, pero no sé de qué..."
Fuu entrecerró los ojos.
-¿Tú no eras aquel ninja de los bichos?
-Por lo menos uno de los dos se acuerda de mí...
-¡Shino! ¡No te había reconocido!
-En fin...
Entonces, él se fijó en la larva que llevaba Fuu al hombro.
"Qué extraño, noto algo emanando de esa cría..."
Mandó a sus insectos rastreadores que la inspeccionaran.
"¡No puede ser! ¡Ese chakra no es normal!"
-Shino, ¿pasa algo?
-No, nada...
-¡Shiiinooo! ¿¡Por qué tardas tanto!?
Apareció un chico con marcas rojas en la cara y un perro enorme al lado.
-¡Kiba! ¡Cuanto tiempo!
-¿¡Naruto!?
Fuu entrecerró los ojos.
-Tu...
-Veo que el brote de césped ha crecido.
-Mira quien habla, el saco de pulgas con perro.
-¿Qué has dicho?
-Lo que has oído.
Comenzaron a saltar chispas mientras Fuu se crujía los nudillos.
Naruto se apartó ligeramente.
"Aquí se va a derramar mucha sangre..."
-¿Quieres que te enseñe los frutos de mi entrenamiento?
-Me muero por verlo. Ya es la hora de dar de comer a mi jaguar.
-Akamaru se merienda a gatitos como esos.
-¿Ah, si? ¿Estás seguro? Creo que sera ella quien se meriende a tu chucho.
-Chicos, parad ya...
Los dos le miraron a la vez.
-Tú a callar.
-Tú a callar.
Naruto retrocedió.
-Vale...
Una voz femenina apareció detrás suya.
-Kiba, ¿no irás a pelearte en mitad del pueblo?
-¡Maestra Kurenai! ¡No, sólo iba a...!
-Nada de excusas. ¿Dónde está Hinata?
-Cuando fuí a buscarla, me dijo que tenía algo importante que hacer, que no podía venir.
-Entiendo...
"Se sorprenderá al oír que Naruto ha vuelto a la Villa..."
-Bueno, si ya estáis listos, vamos a entrenar.
Fuu y Kiba se miraron con odio hasta que se perdieron de vista.
-¿Podemos ir ya al Ichiraku?
-Vale...
Cuando llegaron al Ichiraku, se encontraron a dos personas sentadas. Una de ellas se giró.
-¡Maestro Iruka! ¡Cuanto tiempo!
-¿¡Naruto!? ¡Cuanto has cambiado! Anda, sentáos.
Los dos se sentaron en los otros dos sitios libres. La hija del dueño de la tienda se alegró de verle.
-¡Naruto, has vuelto! ¡Ahora te preparamos tu plato de siempre!
Iruka se giró hacia su antiguo alumno.
-Naruto, te presento a Tsubaki.
-Encantada de conocerte. Iruka me ha hablado mucho de vosotros.
******
Tras comer ramen los cuatro, Naruto y Fuu se despidieron de Iruka y Tsubaki.
-Seguro que esos dos están saliendo...
-¿Segura?
-Fijo. ¿No has visto cómo se miraban entre sí?
-Tenemos algo de tiempo libre...
A Fuu se le iluminaron los ojos.
-¿Y si hacemos un combate de entrenamiento? Hace mucho tiempo que no hacemos uno...
-Vale, pero que no sea muy largo...
Comenzaron a saltar por los tejados a toda prisa. Cuando salieron de la villa, los dos se detuvieron.
-¿Y si hacemos un reto?
-¿Qué propones?
Fuu levantó un dedo.
-Pasemos a una cola. Prohibido salir del manto o subir el número de colas. El primero que vuelva a su estado normal, pierde.
-Me gusta la idea, pero alejémonos más de la aldea. No quiero llamar la atención de nadie.
-Me parece justo.
Mientras volvían a moverse, Kakashi les siguió.
"Han mejorado mucho, pero será mejor que les vigile por si acaso. Podrían descontrolarse..."

Este episodio es más corto, pero estoy muy ocupado con un trabajo.

El escarabajo de la Villa de la HojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora