21. Exámen escrito

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Cuando entraron en la sala, se sorprendieron por la cantidad de gente.
"Cuantas personas..."
-¿Tanta genta ha venido a hacer el exámen?
-¡Sasukeeee♡!
Una chica rubia vino corriendo y saltó hacia Sasuke, casi tirándole al suelo.
-¡Has tardado mucho♡! No sabes las ganas que tenía de verte por fin, estaba impaciente por abrazarte...
-¡Ino! ¡Aléjate de él, maldita guarra!
-Anda, Sakura, si estás ahí. No te había visto, es que la frente te tapa la cara por completo♡.
-¡Repite eso!
En ese momento, aparecieron dos caras conocidas.
-¿Pero qué hacéis en este rollo de exámen? No váis ni a durar dos segundos.
-Anda, el resto del trío de idiotas.
-¡Deja de llamarnos así!
Mientras Sakura e Ino seguían discutiendo, vinieron otros ninjas de la Hoja.
-Veo que estamos todos aquí. ¡Los nueve novatos de las escuela reunidos! ¡No creo que tengáis posibilidad!
-Ju, ¿te crees invencible, Kiba?
-Hemos asistido a las mismas clases, no pienso perder contra vosotros.
Fuu se acercó a Naruto y le preguntó en voz baja.
-¿Quién es el del perro?
-Es Kiba, era un compañero nuestro en la escuela. ¡Es más escandaloso que yo e intenta mandar sobre los demás!
En ese momento, Kiba se fijó en ella.
-¿Y quién es esa morenita enana?
Fuu no se podía creer lo que acababa de oír. ¿Enserio?
-¿Perdona? ¿"Morenita enana"? ¿Es alguna clase de insulto extraño que usáis los retrasados como tú o algo así?
-¿¡Qué has dicho, tabla de planchar!?
-¡Lo que has oído, saco de pulgas!
-¡Pelo de hierba!
-¡Escoba andante!
-¡Cabeza de árbol!
Mientras esos dos se insultaban, el resto del equipo 7 hablaba con un Gēnin llamado Kabuto. Shino miraba de reojo a Fuu.
"Mis insectos notan algo extraño viniendo de ella, será mejor que la vigile por si acaso..."
De repente, Naruto se puso a gritar.
-¡Escuchadme todos, me llamo Naruto Uzumaki-!
Tras eso, Kiba se sorprendió y dejó de discutir con Fuu, pero ella no le prestaba atención, porque tuvo una sensación familiar. Notó cómo alguien la miraba con odio y asco. Comenzó a mirar a todos, vió a tres ninjas mirándola con rencor. Las dos llevaban una cinta en la y el cuello respectivamente, con el sello de la villa de la cascada, y el chico la tenía colgada al cuello también
"Me miran igual que cuando vivía allí, con odio y asco hacia mí..."
******
Mientras los Gēnin hacían la primera prueba, los maestros de los 9 novatos estaban reunidos.
-Sin eso cuatro por aquí, voy a tener mucho tiempo libre...
-No te quejes, verás como enseguida tendrás trabajo.
-¿Por qué lo dices?
-Al parecer, el encargado de la primera prueba es Ibiki Morino.
-... ¿Ese sádico? (La primera pruena también se las trae.)
-¿Sádico?
-Es normal que no le conozcas, Kurenai, ya que acabas de ser ascendida a grado superior.
-¿De quién se trata?
-Es un profesional.
-¿De qué?
Asuma se sonrió ligeramente.
-¡De interrogatorios y torturas!
-¿¡Cómo!?
-¡Está al mando del cuerpo secreto de interrogatorios y torturaciones de nuestra villa! Ibiki Morino es un ninja muy especial.
******
-Si decidís no responder a la décima pregunta, suspenderéis inmediatamente vosotros y vuestros compañeros de equipo. Y si la contestáis mal, seréis ninjas inferiores para siempre.
Tras decir eso, muchas personas comenzaron a levantar la mano, indicando que se retiraban, llevándose a sus compañeros con ellos.
Fuu y Sakura estaban preocupadas.
"Si respondo mal, seremos Gēnin toda la vida, pero si no contesto, ¡me llevaré por delante a Sasuke, Naruto y a Fuu!"
"¿Qué puedo hacer? ¡No quiero pasarme todos la vida siendo de nivel inferior, pero tampoco quiero arruinar a mis compañeros!"
"Lo siento, Naruto, pero no quiero que tu sueño imposible quede destrozado para siempre."
Sakura estuvo a punto de rendirse, pero Naruto levantó la mano.
-¡!
En ese momento, dió un golpe en la mesa.
-¡No te atrevas a subestimarme! ¡No voy a huir con el rabo entre las piernas! ¡Voy a intentarlo! ¡Y me da igual que sea un ninja inferior toda la vida! ¡Llegaré a ser Hokage, aunque sea a base de fuerza de voluntad! ¡No tengo ningún miedo!
Sus compañeros suspiraron de alivio. Sasuke negó con la cabeza.
"No se ha preocupado por nosotros ni por un momento. He de reconocer que tiene valor..."
Fuu asintió con determinación.
"¡Tienes toda la razón, Naruto! ¡Tampoco pienso rendirme! ¡Voy a superar esta prueba!"
"Naruto, eres un idiota, pero un idiota especial..."
-Lo preguntaré una vez más. Os jugáis vuestro futuro en esta elección. Aún estáis a tiempo de echaros atrás.
-No pienso retirar lo que he dicho... ¡Ese es el camino que ho elijo!
El instructor sonrió brevemenre.
"Este chico es divertido. En un momento, ha hecho desaparecer todas las dudas que albergaban los demás. Quedan 79 personas, más de las que creía... Aunque intente presionarles ahora, no conseguiré ningún resultado."
-¡Muy bien, la suerte está echada! Debo anunciaros a todos que... ¡Habéis superado la primera prueba!
"¿¡Qué!?"
-Los 79 que estáis en este aula, ¡habéis superado la primera prueba!
-¡Espere un momento! ¿¡Quiere decir que estamos aprobados de golpe!? ¿¡Y la décima pregunta!?
-La décima pregunta nunca ha existido. Consistía la elección que habéis hecho.
-¿¡Cómo!?
-¿¡Y qué pasa con todas las preguntas que hemos contestado!? ¿¡No han servido para nada!?
-Sí que han servido. Han cumplido el objetivo para el cual estaban planeadas.
-¿Qué?
-Su objetivo era probar vuestra capacidad de obtener información solapadamente.
-¿La capacidad para obtener información?
-Esta prueba se basaba en la primera de las normas: "la totalidad de la misión depende de la totalidad del grupo". Al hacerlo así, pretendía que os sintiérais una carga para vuestros compañeros presionándoos sicológicamente.
Naruto asintió.
-¡Ya sabía yo que ese era el objetivo!
Hinata se rió discretamente, pero Fuu soltó una carcajada por el comentario*.
-Sin embargo, las preguntas eran muy superiores a vuestro nivel de conocimientos actual. Era lo que yo esperaba. Imagino que la gran mayoría de vosotros llegó a la conclusión de que la única forma de mantener los puntos, era haciendo trampas. O lo que es lo mismo, este exámen estaba hecho para copiar. En esta sala habíamos infiltrado a dos ninjas de grado medio que conocían todas las respuestas para que pudiéseis copiaros de ellos.
En ese momento, Ibiki comenzó a desatarse el pañuelo ninja de su cabeza.
-Pero aquellos idiotas que no lograron disimular sus acciones fueron expulsados, claro.
Cuando se quitó su cinta, mostró su cráneo. Estaba lleno de cicatrices, quemaduras y marcas de tortura.
-En ocasiones, la información es más valiosa que la propia vida. Muchos se juegan el tipo en misiones y enfrentamientos para hacerse con ella.
Se volvió a colocar el pañuelo.
-Pero la información que podéis conseguir de un enemigo u otra cosa, si el enemigo se da cuenta de vuestras intenciones, no tiene por qué ser necesáriamente correcta. ¡Quiero que tengáis esto muy presente! Confiar en una información errónea puede significar la ruina para vuestros compañeros o vuestra villa! Por ellos hemos seleccionado a los que habéis sido capaces de obtenerla sin que nadie se entere, y así hemos eliminado a los que se les daba peor.
-Sigue sin convencerme la décima pregunta...
-Esa la única que verdaderamente importaba. Os lo explicaré. Esa décima pregunta consistía en saber si lo intentábais o no. No hace falta que os diga que es una decisión difícil, no intentarlo significaba el fracaso instantáneo. Pero intentarlo, arriesgándose a no saber responderla, y así perder para siempre el derecho a no poder presentarse a la prueba de grado medio. Era una decisión espinosa.
Como vió que nadie hablaba, cambió el rumbo de la conversación.
-Pongamos otro ejemplo. Pongamos que os convertís en ninjas de grado medio. Os encomiendan una misión cuyos detalles son secretos. No sabéis qué clase de enemigos hay, cuántos habrá, qué habilidades tienen o si están armados o no. ¿Qué haréis entonces? Porque os puede costar la vida, porque ponéis en riesgo a vuestros compañeros, ¿váis a rechazar la misión porque os parece demasiado peligrosa? ¡La respuesta es no! Las personas que se echan atrás, los que se arrepienten porque creen en un futuro incierto al pensar que habrá una próxima vez. ¡Esos imbéciles que son incapaces de manterse firmes en su decisión no tienen las cualidades necesarias para convertirse en ninjas de grado medio! Vosotros habéis elegido intentarlo, ¡y esa es la respuesta correcta a la famosa pregunta diez! A partir de ahora os enfrentaréis a retos aún mayores, no cejéis en vuestro empeño y seguid adelante. Pero ahora habéis superado el primer obstáculo, la primera prueba del exámen ha terminado. Os deseo buena suerte.
De repente, una chica saltó desde la ventana con una pancarta negra.
-¡Todavía es pronto para relajarse! ¡Soy la instructora de la siguiente prueba! ¡Me llamo Anko Mitarashi! ¡Vamos, ¿a qué estáis esperando!? ¡Seguidme todos!
Ibiki salió de detrás de la pancarta.
-Oye, que todavía sigo aquí...
Anko se avergonzó, sonrojándose. En ese momento, se fijó en la cantidad de personas.
-¿¡79 personas!? ¿¡Has dejado pasar a 26 equipos!? ¡Has sido demasiado blando!
-Este año hay personas con mucho talento.
-¡Bah! ¡Ya me encargaré yo de que no queden ni la mitad de personas cuando acabe la siguiente prueba!
"¿¡Menos de la mitad!? ¿¡Habla en serio!?"
Anko disfrutó con la cara de muchos de los alumnos.
-Je... Lo vamos a pasar muy bien. Os explicaré los detalles de la próxima prueba en la próxima zona en la que se celebra.

Creo que este capítulo se me ha alargado un poco demasiado...
*Quería señalar la diferencia entre ellas dos con este detalle.

El escarabajo de la Villa de la HojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora