Theodosia
Subí de nuevo a mi habitación, volví a llorar como lo había hecho.
Pensé que era una persona débil, ni siquiera podía darle la razón a Philip, tome las cartas destruidas de Philip, tantas veces había dicho que sería la última pero no paraban de llegar, la mayoría fueron maltratadas por Eaker pero aún así no dejaba de leerlas hasta cansarme.
Philip se irá a Inglaterra... Debes dejarlo ir...
Estaba hecha un ovillo en mi cama, no quería ir de nuevo al hospital, pues cada vez que llegaba, las palabras de el Señor Hamilton resonaban en mi cabeza.
Tenía razón, jamás sería parte de esa familia...
Pero y si hay una razón por la cual estoy a su lado, cuando tantas han tratado, entonces estoy dispuesto a esperar por el...
¡Voy a esperar por el!
Limpié mis lágrimas y fuí a la oficina de mi padre, toque la puerta con más de la fuerza que me hubiera gustado.
- Adelante...
Entre a la oficina y pude notar como mi padre observaba un pequeño cuadro de mi madre.
- ¿La extrañas mucho?
- Cada día desde que se marchó...
El talló su cara.
- Papá... Tenemos que hablar.- El espero a que empezará a hablar en completo silencio, respiré profundo.- Estaré con Philip aunque no te agrade la idea... Siempre dijiste que había dos cosas que no discriminaba entre los santos y los pecadores...
Mi padre se pusó tenso como si se hubiera arrepentido de haberme dicho esa idiologia desde que era pequeña.
- Theo...
- ¡Escúchame por favor!¡Yo lo amo!¡Y se que es complicado!¡Pero las cosas contigo y mamá también lo eran al principio!¡Estaba casada con un general británico cuando estaban en guerra con Inglaterra!
Mi padre tragó saliva.
- La enamoré con cartas...
Pude ver un destello en sus ojos, también una sonrisa fugaz apareció en sus labios.
- Papá... Por favor...
Fruncí el ceño, el estaba ignorando me y por el contrario cambio de tema lo cual me enojó más.
- Deberás de conocer a un hombre que viene de Inglaterra, su nombre es Joseph Alson, es Norte Americano pero acaba de terminar sus estudios en Inglaterra, no saldrás con el solo quiero que lo ayudes a reintegrarse en América.
- ¿Qué hay de Philip?
- No hablaré de ese tema contigo.
- ¿¡Y con quién si!?
- No es de tu incumbencia Theodosia.
- ¡Claro que lo es!¡Es mi vida!¡Lo que tenías con mamá era imposible!, Pero incluso me tuvieron a mí.
- También a otros tres...- El susurró.
- ¿Qué quieres decir?
- Que tú fuiste la única superviviente de 4 hijos... Theo hay presedentes, no quiero que te hagan daño.
- ¡No soy una maldita copa de cristal!
Salí de la oficina de mi padre, Johnny estaba sentado cerca de la puerta de la oficina y corrió a abrazarme, el estaba tan feliz, supongo que no escucho la plática que había tenido con mi padre, pero incluso entonces empecé a llorar.
Johnny por el contrario dejó de mostrarme una sonrisa y empezó a limpiar mis lágrimas.
- No sabía que había tenido otros hermanos...
El me apegó más a su pecho, yo pensé en todas las veces que había jugado sola, después de la muerte de mi madre me había sentido tan sola, y pensar que mi vida pudo haber sido tan diferente, tal vez si mis hermanos aún estuvieran con vida, mi padre no sería tan protector conmigo y podría haber estado con Philip.
Impresionaba como mis pensamientos, ideas y sueños empezaban a girar alrededor de Philip, y seguía sin entender porque.
Si iba a esperar por él porque tenía la necesidad de querer luchar.
Philip
Cada hora, cada minuto y cada segundo pensaba en que pasaría al irme a Inglaterra.
No sabía si la idea seguía en pie, pero como hace apenas unos meses, la familia estaba pasando por una situación tensa.
Y todo por mi culpa, ¿Por qué no podía controlar mis sentimientos?
Aún tenía las cartas de Theodosia en mi pecho, pensé en escribirle más y eso hice, pero empecé a escribir para cada ocasión que pudiera pasar entre nosotros, así ya sabría qué decir si algo sucedía.
Alguien tocó la puerta y en vez de dejar que un mayordomo la abriera, fuí yo quien lo hizo.
Era el hermano de Theo, usaba ropa muy formal como siempre, pero tenía una carta el hizó señas para que no hiciera ruido, empareje la puerta detrás mío saliendo de la casa.
- Aún no se lo digo... Pero Theodosia estará ahí...
Sin más me entregó la carta la cual yo abrí, era la invitación de la boda de John Pierre con Melissa Coulant.
Tendría que ir solo, mis padres no debían enterarse de que iría a esa boda, ni siquiera sabía si podría decirle a Theodosia.
Pensé en lo que Angie me dijo.
¿Casarme a escondidas con Theodosia podría ser la solución?¿Huir con ella lo era?
Pero sabía que ella no podría dejar solo a su padre, y yo sabía que aunque odiara admitirlo, me importaba mi padre, y no quería dejar a mi madre sola con tantos niños cuando mi padre ya ni siquiera puede ayudarla.
Cuando volví a entrar a casa tuve que esconder la carta al escuchar a mi madre bajando las escaleras junto a mi hermano James.
- ¡Mira!¡El abuelo esta en el periodico! "Heroe de la guerra Philip Schuyler pierde puesto de senador por el joven arribista Aaron Burr"... ¡El abuelo acaba de perder su asiento en el senado!
- Aveces eso es lo que pasa
- Papá lo va averiguar en cualquier momento
- Estoy segura de que ya lo sabe
Ni siquiera se percataron de que estaba cerca.
¿¡Burr le quitó el puesto a mi abuelo en el senado!?
Tenía que verme con Theodosia en cuanto antes. No sé con qué magnitud esto podría afectarnos, afectarnos incluso más de lo que ya nos encontramos.
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Cartas para Theodosia (Phildosia)#1
Romance¿Tienen un final feliz?, Eso depende a lo que tu definas como felicidad. Nacer con ese apellido no fue su culpa finalmente. PRIMER LIBRO DE LA SAGA "Los hijos de Hamilton"