Cartas para Theodosia (Phildosia)#1

Capítulo 47

Philip

- ¿Dónde está mi hijo?

- Señor Hamilton, pase adelante. Lo trajeron hace media hora, perdió mucha sangre en el camino.

- ¿Está vivo?

 - Sí, pero debe entender, la bala entró justo sobre su cadera y se incrustó en su brazo derecho.

- ¿Puedo verlo por favor?

- Estoy haciendo todo lo que puedo pero la herida ya estaba infectada cuando llegó...

 - Philip.

-Pa' Hice exactamente lo que me dijiste pa'  Sostuve mi cabeza en alto.

- Lo sé, lo sé shhh, lo sé, lo se shhh, sé que hiciste todo bien.

- Incluso antes que llegáramos a diez...

 - Shh.

- Estaba apuntando al cielo.

- Lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, guarda tus fuerzas y mantente con vida...

Mi madre entró a la habitación llorando, Theodosia estaba detrás de ella.

- ¡No!

Mi madre grito en un sollozo, apenas podía ver la cara de Theodosia, sus manos cubrían su cara.

- Eliza...

- ¿Está respirando? ¿Va a sobrevivir ésto? ¿Quién hizo ésto, Alexander, lo sabías?

- Mamá lamento mucho haber olvidado lo que me enseñaste.

- Mi hijo...

- Tocábamos piano.

Pensé en el momento vivido con Theodosia y mi madre, los tres pudimos tocar piezas hermosas.

- Te enseñé a tocar piano.

- Ponías tus manos sobre las mías.

- Siempre cambiabas la melodía.

- Ha... Siempre cambiaba la melodía.

- Shh. Lo sé, lo sé.
 
- Un, deux, trois, quatre, cinq, six, sept, huit, neuf...

- Un, deux, trois, quatre, cinq, six, sept, huit, neuf...

- Bien...

Theodosia se incó a mi lado, y empezó a acariciar mi mejilla, mi madre se levantó y se giró a abrazar a mi padre, ambos se darían consuelo, ¿Pero y Theodosia?¿Quién la consolaría por mí?

Ella no decía nada, solo sollozaba en voz baja pasando sus manos por mi cabello y rostro.

- ¿Por qué no me dijiste que el duelo era tuyo?

Me rompía en mil pedazos verla así, era el dolor combinado de la bala con mi mente al verla... Un dolor que hundía mi pecho.

- Sentemonos amor mío, a ver cómo muere el amanecer junto a mí...

- Philip por favor no te apagues... Intenta seguir, tú puedes hacerlo, recuerda entre más oscuro es el cielo... Más pronto será la madrugada, no te rindas.

- Si pudiera regresar el tiempo, hubiera regresado justo al momento donde nos conocimos, así podría amarte infinitamente como lo he hecho hasta hoy...

Theodosia ahogó un sollozo.

- Ya no llores...

¿Cuándo la sangre empezó a correr por mi boca?¿Cuándo la herida volvió a sangrar tanto que la venda ya manchaba de nuevo mi ropa?