Narra Tom
-Hazlo despacio, por favor- pedí en un lamento, cerrando fuertemente mis ojos como si eso fuera a desvanecer el dolor.
-Lo lamento, intentare que no te duela tanto.
-¡No lo entierres tanto!
-¡Deja de gritarme!
-¡Agh! ¡Duele, maldición!
-Tom, si te sigues moviendo de esa manera el tatuaje quedara feo- aclaro alejando sus manos con la maquina tortuosa.
-Dijiste que eras buen tatuador- me queje mirando mi rojo hombro con unas cuantas lineas negras.
-Y lo soy, pero tienes que colaborar un poco- respondio Harry ya impaciente por terminar el tatuaje.
-Es que es mi primera vez- hice un puchero mientras jugaba con uno de mis pezones para provocarlo un poco.
-Te dije que iba a doler, pero aún así quisiste.
-Porque confié en ti.
-¿Quieres parar un poco? Podemos terminarlo otro día.
-¡No! Termina ahora- pedí volviendo a acostarme sobre la silla de color negro, esperando que se volviera a acercar.
-¿Ya no vas a llorar?- pregunto burlón volviendo a remojar la punta de la maquina en la tinta.
-Ño- y finalmente acerco su rostro hacia mi hombro, dejándome una hermosa imagen de su perfil libre de imperfecciones, fijándome en su lindo lunar en forma de corazón.
-Lindo lunar- comente picando su mejilla en donde se encontraba dicha mancha.
-Gracias. Es igual al que tenia mi madre.
-¿Dónde está ella?
-En el cielo- respondio como un niñito, soltando una pequeña risa de lamento- Si viera ahora a lo que me dedico de seguro me jalaria las orejas. Jamás le gustaron los tatuajes, a diferencia de mi padre.
-Dímelo a mi, mi madre me mataría si viera este- reí al imaginarme su reacción, señalando mi nuevo tatuaje.
-De seguro le encantara, digo, se trata de su nombre.
-Eso a ella no le importa ¡Mierda!- ¿por qué nadie me dijo que tatuarse dolería tanto? ¿O acaso yo soy muy niñita?
-¡Terminamos!- grito alegre, limpiando la zona con un pañuelo.
-¿En serio?- animado me levante de la silla, dirigiéndome hacia el espejo encontrándome con un bello chico, y yo- Quedo perfecto- sonreí satisfecho, sonrojado por su mirada penetrante.
Tan solo espero que mi madre no me asesine, aún soy muy joven para morir en sus manos.
-Me alegra que te guste- sonrió orgulloso por su trabajo, escondiendo sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón.
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Tutor de un mujeriego (Gay/Yaoi)
Teen FictionNo se como sucedió, no entiendo desde que momento comencé a sentir esto. Tan solo paso... ¿Él? Es el chico más mujeriego e idiota de la escuela. Tiene a todos a su disposición y no le importa lastimar a los demás. ¿Yo? Soy el nerd, sabelotodo de l...