CASADA CON PARK JIMIN | JIMIN | saga #1

~27~

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Al despertar, lo primero que busque fueron los brazos de Jimin, o siquiera ser yo quien lo abrazara, pero al buscarlo con mis manos y no encontrarlo me tomo por sorpresa.

No estaba..

Y me entristeció, porque se fue así como así, ayer fue como nuestra reconciliación y ahora se va a trabajar muy temprano, sin avisarme y en día libre. 

- ¿Es enserio? 

Cubrí mi cuerpo con la sabana para después levantarme y caminar al cuarto de baño. Una ducha me haría relajarme. Cerré la puerta tras mis pasos, abrí la llave para llenar la tina, deje caer la sabana al suelo y entre a la tina. Lave mi cuerpo, dándome una ducha muy rápida y después salí. Me pare frente al espejo, viendo mi cuerpo completamente, no pude evitar llevar mi vista a mi vientre. Aun no crecía ni un poco, ya moría por tener a mi bebe en brazos.

Salí del baño y me acosté nuevamente en la cama, con esto del embarazo, estoy agotada y eso que tengo poco tiempo.

Cuando estaba logrando dormir siento como alguien me habla, estaba entre sueños, pero podía escuchar. Abrí un poco mis ojos y vi a Jimin.

- Jimin.. 

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Estaba abrazado a _____. Ya era de mañana, y como últimamente estoy muy distante con ella, quiero volver a estar bien, porque la amo. Y le recompensare todo, y lo que no. Hoy quería hacer el desayuno para ella. 

Me levante con mucho cuidado de no despertarla, no sin antes besar su frente con delicadeza. Entre al cuarto de baño y solamente entre al agua rápido y salí. 

- Que no se despierte, que no se despierte. -dije apresurado poniéndome el pantalón-

Y gracias a Dios que no fue así, salí de la habitación, como normalmente en los domingos, despertamos hasta tarde. Camine a la cocina, no soy el mejor hombre del mundo cocinando como lo es Jin, pero se hacer una que otra cosa.

- Buenos días señor Park. ¿Quiere el desayuno? -pregunto la cocinera-

- No, hoy cocinare yo. Quiero darle una sorpresa a mi esposa. Gracias -sonreí-

- Esta bien señor. Estaré aquí si necesita algo.  -sonrió y se retiro- 

Tome un delantal para hombres, obvio tenia el mio. Y me puse a preparar lo que sabia hacer. Quería llevarle el desayuno a mi princesa.

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Había terminado, tarde un poco, ya que unas cosas no me salían del todo bien. Pero con todo listo, subí a la habitación, aparte de comprar un ramo de rosas para ____. Abrí la puerta, asomándome un poco para ver si ella estaba despierta. Pero seguía dormida. Entre a la habitación y deje las cosas en la mesa de noche. Lo raro es que _____ estaba cambiada y tenia su cabello mojado. Quizá se levanto y de dio una ducha, bueno es lo mas lógico. 

- ____.. Cariño.. -la moví un poco- ¿Amor?

- Jimin... -me miro confundida-

-Lamento despertarte.. -se incorporo en la cama-

- ¿Que haces aquí? ¿No estabas en el trabajo? 

-fruncí el ceño- ¿Trabajo? Si es domingo, hoy no tengo trabajo amor. -acaricie su mejilla mirándola con ternura- No desperdiciaría un día libre yendo al trabajo.  

- Oh. Pensé que te habías ido.. -bajo su cabeza- Estaba incluso molesta.

- reí un poco- Linda, porque te dejaría sola hoy. Después de lo de anoche, no te dejaría así porque si. Aparte ya te dije es domingo.