HOLA HERMOSAS! disculpen la demora, pero aquí les traigo nuevo capitulo :) espero con ansias sus votos y comentarios :)
LAS AMO❤️
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Selena se enjuagó las lágrimas y salió del baño al escuchar la puerta. Buscó a Zayn con la mirada, solo para comprobar que efectivamente se había marchado. Se sentó en el sofá hecha un ovillo y pensó en todo lo ocurrido.
¡Él no tenía derecho a enfadarse con ella! Ella no le había dañado. Él no podía decir lo mismo. Pero el pasado era mejor dejarlo donde estaba. Él le había confesado que la amaba y eso era lo único que debería importarle.
Lo esperó durante toda la tarde pero no llegó. Ya entrada la noche, llamaron a la puerta. Esperando que fuese él, sin pensar en que él podía entrar con su llave, abrió sin preguntar. Se congeló al ver a Sebastián al otro lado. Su decepción se vio reflejada en su rostro y por pura educación le dejó entrar.
- No son horas de hacer visitas -condenó Selena, sin preocuparse por cómo la había encontrado.
-Tu novio me pidió que viniese -anunció Sebastián dejándola estupefacta- No se cómo me encontró, pero hace como veinte minutos apareció en mi hotel y me dijo que me esperabas.
Selena no sabía qué decir. Nada podría haberla sorprendido más que eso ¿Para qué habría ido Zayn a buscarlo? No era lógico. Aunque si él pensaba que ella tenía un trauma por lo que ese tipo le había hecho, podía creer también que se "curaría" hablando con él ¡Que equivocado estaba!
Sonrió ante la ternura de su novio y lo erróneo de sus deducciones.
- Te ama muchísimo -afirmó Sebastián bajando la mirada, llegando a las mismas conjeturas que ella.
- ¡Lo sé! -exclamó Selena hundiéndose en el sofá.
- Me alegro de que hayas podido enamorarte al fin. Pensé que nunca olvidarías a ese tipo del que me contabas cuando éramos jóvenes -se interrumpió al ver reír a Selena - ¿Qué dije?
- Zayn es ese tipo - aclaró ella con una sonrisa irónica.
- ¡Oh! ¿Volvió? -preguntó extrañado.
- Sí. Poco después de que tú te fueses. Se puede decir que se han ido sustituyendo el uno al otro - bromeó Selena sin restos de humor.
- ¡Vaya! No sé si decirte en hora buena por recuperarlo o darme el pésame -comentó Sebastián ceñudo mientras prestaba toda su atención a sus nudillos.
- ¿Por qué lo hiciste? -preguntó sin rodeos Selena, viendo que él iba a confesarle sus intenciones de recuperarla.
- ¡No pensé! Solo sabía que me iría y no volvería a verte. Te quería Sel, necesitaba demostrártelo al menos una vez - explicó él con tristeza.
- Y dejarme después -lo acusó ella, enfrentándolo.
- Había pensado en hacerlo mucho antes. Pero tú no me amabas Selena. Me habrías aceptado porque era lo único que tenías. Te aferrabas a mí. Pero después de que te entregases a mi sabrías que no me amabas y me dejarías. Pero cuando supe que de todas formas te perdería, no aguanté más. Quise explicarte que te amaba de verdad y que si querías seguir con una relación, yo te esperaría pero no me cogías el teléfono -le aseguró Sebastián, acariciándole la mejilla.
- No fue fácil que desaparecieses después de tal intimidad, de un momento tan importante para mi -replicó Selena, más calmada.
- Yo no quería hacerlo. Ojalá me hubiese podido quedar a tu lado. Hice muchos planes. Pensé en regresar para verte cuando tuviese libre e ir a la misma universidad cuando terminases la prepa. Pero... - se interrumpió, ensombreciéndose con los recuerdos.
- ¿Qué? -preguntó sorprendida por el cambio de actitud.
- No me cogías el teléfono, así que en cuanto tuve algo de dinero y tiempo libre volví para hablarte -explicó Sebastián con una mirada triste.
- Nunca te vi -reprochó Selena.
- Llegué hasta tu casa. Tú ibas saliendo con un chico. Estabas muy sonriente. Y te veías más feliz de lo que nunca te había visto. Aún así me acerqué. Pero tú corriste de nuevo para la casa a por algo y me encontré con el chico. Ahora si lo pienso bien creo que era Zayn, tu novio. Hace muchos años y todos hemos cambiado, pero estoy casi seguro que era él.
- ¿Qué pasó? -quiso saber ansiosa.
- Cuando iba a llamar a la puerta, él me paró y me preguntó qué quería. Le dije que venía a buscarte, que necesitaba hablar contigo - comenzó a contar Sebastián.
- ¿No te dejo pasar? -dedujo Selena, al pensar en lo posesivo que había sido siempre Zayn.
- No, pero la verdad es que se me quitaron las ganas de hablarte cuando se presentó como tu novio.
Selena se quedó boquiabierta ¿Zayn había hecho eso? ¿Por qué? Cuando lo viese le armaría tal pleito que desearía estar muerto. Él no tenía derecho a hacer algo así ¿A cuantos más habría espantado? ¡Quería matarlo! Y a la vez no podía estar más feliz. Eso había pasado cuando solo tenía dieciséis años ¿Era posible que la amase desde entonces? ¡Oh, sí, lo mataría, pero a besos!
- Veo que a ti no te afectó tanto como a mí -dijo Sebastián , al verla sonreír.
- ¡Perdón! Lo que hizo Zayn estuvo muy mal. Te mintió y no tiene excusa -lo reprobó Selena, intentando arrugar el ceño.
- ¡Claro que la tiene! Te quería solo para él. Puedo entenderlo -afirmó en un suspiro - Pero el pensar que pudiese estar con otro me afectó mucho. Estuve intentando olvidarte. De formas poco adecuadas, hasta que hubo una consecuencia.
- ¡Tu hija! -concluyó ella.
- Sí. Y yo la amo. Pero no era como deseaba que pasase todo. Su madre quiso que nos casáramos y al principio accedí. Pero me arrepentí. Recordé cuantas veces habíamos hablado tú y yo de que a veces lo que creemos es lo adecuado solo crea infelicidad. Y ese era un caso claro. Ninguno habríamos sido felices.
- Lo siento mucho -susurró Selena de corazón.
- Aún te echo de menos Sel -confesó él sin mirarla.
- Estoy enamorada de Zayn -repuso ella.
- Nada ha cambiado ¿eh? - intentó bromear Sebastián - Siempre supe que lo amabas y por eso nunca intenté nada hasta que supe que me iría.
- Creo que tienes razón y que me habría alejado de ti, si no te hubieses ido tú antes. Cuando te marchaste estaba más enojada por la idea de que te hubieses ido como había hecho Zayn, que por la idea de no volver a verte -confesó apenada Selena - Creo que esos días desahogué todo el despecho que sentía por el abandono de él y no tanto por el tuyo. Quise engañarme diciéndome que solo lo echaba de menos porque estaba mal y quería un amigo pero la realidad era que estaba enamorada y él me había abandonado.
- Me alegro de que al fin puedas ser feliz -afirmó Sebastián, mientras caminaba hacía la puerta, no soportando más verla.
- Sebastián -lo llamó antes de que saliese por la puerta que ya había abierto- Yo siempre he negado el amor que sentía ¡no lo hagas tú!
Iba a continuar diciéndole que encontraría a alguien a quien amar y que no debía cerrarse a esa oportunidad. Pero cualquier palabra desapareció de su garganta al ver el rostro duro y ensombrecido por la ira de Zayn. Antes de que ella se pudiese acercar a él, él ya se había marchado.
Había estado todo el tiempo al otro lado de la puerta. Pero por desgracia para Selena solo había escuchado la última frase, ya que Sebastián había abierto dejándole acceso a escuchar lo que él había malinterpretado como un ruego de amor.
Selena quería gritar y llorar. Estaba furiosa por verlo huir y no pedir una explicación. Ella no le estaba declarando su amor y pidiendo que la correspondiese, le estaba deseando lo mejor ¿Por qué Zayn tenía que pensar así? ¿Por qué tenía que haber huido sin dejarla explicarse?
Ella lo amaba. Siempre lo había amado. Él era el motivo por el que no se dejaba amar por ningún otro. Lo había esperado toda su vida. Y si no se lo había confesado antes era porque él ya la había abandonado antes, haciéndola miserable. No quería volver a sufrir ¿Por qué todo tenía que salirle tan mal?
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Amigos Desconocidos |z.m • s.g|
FanfictionZayn Malik era un chico guapo, seductor e inteligente. El hombre perfecto, que toda mujer desearía. Y lo sabía. Se había encargado personalmente de que todas ellas se lo confirmarán. No había fémina que se le resistiese. Aunque dulce y atento con el...