La persona que lo puede salvar es una humana; la unica que pudo tocar tanto su corazón para vincularse.
Sesshomaru no queria, deseaba no estar cerca de ella pero su cuerpo sólo pedía a gritos su cercanía.
-Escuche tu grito de ayuda.
Ella sonrió.
-¿E...
Al entrar a la cabaña, lo primero que visualice fue a los dos cachorros en la sala viendo la tele. Note los ojos rojos de ambos y me preocupe, de inmediato camine hasta ellos, abrí mis brazos para corresponder a los abrazos de los hermanos.
-Pensé que los cuidaba Miroku.--Acaricie con cariño la cabeza de los pequeños.--No lo veo.
De inmediato mi mejor amigo salio de la cocina y levanto sus brazos, atrás de él venia Bankotsu bostezando. Me explico que el chico llego a la cabaña como si fuera su casa y no sabia que hacer, lo único que se le ocurrió fue ponerles la televisión a los niños para poder hablar con el extraño que reclamaba atención. Sin embargo, la película hizo llorar a los cachorros y mi mejor amigo corrió a la cocina para prepararles un poco de comida, así calmar los sollozos de los hermanos y no morir en las manos de Sesshomaru. Mire al peli plateado y fruncí el ceño, claramente toda era su culpa por dejar solos a sus hermanos menores y mandar a Bankotsu sin avisarle a miroku.
-¡Hermano!--Inuyasha se separo de mi y alzo sus brazos para ser cargado por el mayor. Escondió su cabeza en el cuello de su hermano.
Sonreí al ver esa escena.
-Miroku, llévate a los niños arriba.--Alzo el pulgar.--Y Bankotsu, ve...A otro lado. Necesito hablar con Kagome a solas.
Los dos hombres obedecieron de inmediato, Inuyasha bajo de los brazos de su hermano mayor y siguio a Miroku, quien cargo a Rin para que se despegara de mi.
-¿Entonces?--Me sente en el sillón café de la sala y espere que Sesshomaru tomara asiento.
El lobo suspiro, se sentó a mi lado y escondió su rostro en mi cuello. Pude sentir su nariz acariciendome.
-Esto sera largo.
-Tengo todo el día.-- Acaricie con suavidad su cabello.
-Bien.--Se aparto y me miro.
<<Mi familia pertenece a los lobos grises, unas de las manadas más fuertes de Japón. Mi padre trataba que la mayoria de los clanes estuvieran en paz y asi continuar con nuestro linaje>>
Se mordió el labio inferior.
-¿La guerra entre clanes...?
Negó de inmediato.--No, aun con peleas entre los clanes, nos protegíamos como una gran familia.
Incline mi cabeza confundida, ¿entonces que paso para que Sesshomaru comenzara a huir con sus dos hermanos?
-Los cazadores.--Como si hubiera leído mi pensamientos lo dijo.--Ellos empezaron a cazarnos.
Quiso abrazarlo, decirle que todo estaba bien ahora pero, él se mantuvo con y expresión neutra.
<<Llegaron un día a la aldea y empezaron la masacre. Mis papás trataron de proteger a la manada y a nosotros, pero mi deber era pelear al frente por ser el hijo mayor de los Taisho. Deje solos a mis hermanos>>
Loa abrace al notar lágrimas bajar por sus mejillas. No quería que recordara ese día, no era lo suficiente fuerte para sostenerlo y juntar cada una de las piezas faltantes.
-Los deje solos.-- Murmuro.--Cuando llegue mis papás estaban muertos y mis hermanos escondidos en el armario llorando. Rin tiene pesadillas todas las noches.--Sujeto con fuera mi camisa.--E Inuyasha se culpa ¡Un niño de diez años se culpa de la muerte de su clan!
-Sesshomaru.--Acaricie lentamente su espalda.--Ahora están bien, los has protegido muy bien.
-No puedo protegerlos de sus pesadillas.
Negué.--No, al menos no solo. Ahora estoy contigo ¿cierto?
El lobo escondió su rostro en mi cuello y lo olio.--Sí. Ya te encontré.--Levanto su rostro y sonrió.-- Esta bien.-- Susurro. Su mano acaricio con cuidado mi mejilla, sonriendo me dijo.--Mi alma te eligió.
Juntamos nuestras frentes, los dos sonreímos con las mejillas sonrojadas y nuestros corazones acelerados. Sesshomaru dejo mi mejilla, agarro mi barbilla y me hizo verlo.
-Por siempre.--Con un movimiento lento, unió nuestros labios.
Es cálido. Como un atardecer en el mar, cuando sientes que el mundo se esta cayendo en pedazos pero, sólo un poco de esa calidez, hacen que sonrías, que tu corazón se tranquilice y la voz en tu cabeza susurra: "Todo esta bien, sigue luchando" El beso de Sesshomaru me transmitió esa tranquilidad. Sus manos agarro con fuerza mi cadera, aferrándose en su esperanza, mientras que mis manos rodeaban su cuello y trataba de acercarlo aun más. Tanto físicamente como emocionalmente.
Nos separamos después de unos segundos. Seguía con la cosquillas en mis labios, una sonrisa tonta se formo en mi rostro.
-Sí.--Agarro mi mano, la levanto y beso mis nudillos.-- Eres mi salvación.
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Nota 13 Marzo 2019
Siempre me gustara su primer beso :3
Gracias por leer de nuevo JAJJA, ya prometo acabar esta historia esta año. <3
