Casa de Alquiler

Capítulo 19

¿Te Gusta Vero?

BEATRIZ

Los chicos se fueron de paseo junto a Verónica, mi niña está empezando a ser agradable con ellos y eso es algo bueno, pero vamos a paso de tortuga, no veo ningún avance por parte de ninguno y eso me preocupa.

Ahora ella le gusta un chico fuera de mi plan y no me agrada, tengo miedo de que no sea tauro o capricornio y ella se enamore, se case con él y termine muriendo por no librarla de la maldición.

En fin, debo hacer algo más drástico. Quizás llame a Telma a ver si me da alguna idea.

Después de esperar tanto volví a llamar al plomero para que arreglara las tuberías.

—¿Funcionó su plan? —pregunta una vez que termina de arreglarlo.

—Lastimosamente no —le pago—gracias por venir.

—De nada —se retira con una sonrisa viendo el dinero.

Claro como no va a sonreír, si yo soy la que gasté mucho dinero por una idea que no funcionó para nada.

No sé qué más hacer, creo que hablaré con cada uno de los chicos sutilmente a ver que piensan de Vero.

Aprovecho que no hay nadie y prendo mis inciensos para la buena suerte, a ver si la suerte llega a esa niña y se enamora rápido de alguno de ellos.

Hice todo y como tengo tiempo de sobra fui a ver al adivino.

—Señora Beatriz, tiempo sin verla por acá —me siento con una sonrisa.

—He estado ocupada con lo de mi nieta, usted sabe y vengo por eso también... no sé si estoy en buen camino o debo hacer algo más drástico.

—¡Mmm! Vamos a ver —saca el mazo de cartas, distribuyéndolo en toda la mesa de izquierda a derecha—saque tres cartas —eso hice.

El adivino observa las tres y frunce el ceño.

—Primero lo que usted ha hecho hasta ahora ha funcionado bien y lo demás los chicos lo hacen por su cuenta... la primera carta refleja que en la casa hay mucho amor, pero ese amor trae problemas entre los involucrados. Ellos mismos lo resolverán no se preocupe mucho por eso.

Me alivia escuchar que mi trabajo no ha sido en vano.

—Ahora, además de esa casa hay un amor afuera que causará más problemas con los de adentro y si su nieta no sigue su corazón podrá cometer un grave error, aunque los chicos de la casa están igual que su nieta de confundidos.

—Ese amor de afuera ¿Es bueno?

—Si es bueno, pero no para ella —lo sabía, debo alejarlo de ella—la tercera carta, el tiempo se agota, pero usted no podrá hacer nada eso queda en manos de su nieta y esa persona, lo que usted ha hecho hasta ahora ha ayudado mucho.

—Gracias, de verdad... ¿Cuánto le debo? —saco mi cartera, mientras él me dice la cantidad.

Salgo y me dirijo a casa. No me importa gastar tanto en mi nieta con tal de que sea feliz y tenga un buen futuro porque ella es una bella persona y no quiero que su vida sea cortada por una persona que ha querido hacernos daño.

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Es muy tarde ya y los chicos llegaron, Saith había llegado hace unas horas y estaba algo decaído, triste. No le pregunté nada porque pensé que quería su espacio y no ha salido desde que llegó.