28. ¿Acabas de tocarme el culo?

2.8K 221 69
                                    

No me equivocaba. El disco sigue batiendo récords incluso unas semanas después de su lanzamiento. Ahora vamos de plató en plató, de fansign en fansign, sin tener tiempo a descansar casi nada. Verónica y yo estamos hasta arriba de trabajo, buscando ropa para cada una de las actuaciones y estudiando para lograr looks mejores. Ya entiendo a Jun cuando decía que no íbamos a parar durante todo el mes.

Ahora es el último fansign de Wings, en el que estamos ultimando todos los detalles. Verónica y yo nos pasemos por el backstage, asegurándonos de que no haya ni un desperfecto en los trajes, camisas y chaquetas que llevan los chicos. Les dan un aire bastante sensual, que ya es bastante teniendo en cuenta que tienen cara de niños. Meto el peine en el pelo de Taehyung por décima vez, y él me coge de las muñecas con una sonrisa.

-Estás histérica, y es una afirmación -me coge de los hombros, infundándome un poco de calma. Sus ojos me resultan hipnotizantes -No te preocupes. Si se me desordena un pelo vendré para que me lo arregles.

-Más te vale no despeinarte -le advierto, después de poner los ojos en blanco y soltar una risa.

-Mira mi hoyuelo, ¿a que tengo uno?

Gira un poco la cara y sonríe exageradamente hasta que se forma un minimísimo hoyuelo en su mejilla. Me resulta adorable, pero es la quinta vez que me lo enseña. En vez de decírselo le pongo el dedo encima del hoyuelo y presiono un poco, como dándole la razón. Da unas palmaditas como un niño pequeño y yo le imito unos segundos. Se ríe y me da un apretón cariñoso en el hombro antes de irse a hablar con Kookie. Me doy la vuelta y voy a revisar a Suga, que es el único que me queda por ver.

-Te queda bien ese traje -le digo con sinceridad, mientras le coloco el cuello de la camisa.

Murmura un "gracias", bajando la mirada. Le sonrío levemente y analizo su pelo perfectamente peinado hacia abajo. Hago una mueca y pongo una mano en él para revolvérselo y que se quede ligeramente desordenado.

-Mucho mejor -asiento con conformidad y me alejo un poco para dar el visto bueno a mi trabajo -Si no fueses en traje te pondría una gorra para quitarte el flequillo de la frente.

-Ni se te ocurra -me advierte, levantando un dedo en mi dirección.

-¡Si estás guapo! -le subo el pelo con una mano, dejando ver su frente. Él se revuelve e intenta apartarse, pero yo le cojo de un brazo para frenarle -Pero no te apartes.

-Para quieta, pesada.

Me empiezo a reír a carcajada limpia y aprovechando que estoy distraída me coge los antebrazos con sus manos, alejándolas todo lo posible de su frente. Me revuelvo todo lo que puedo, pero la risa me impide hacer mucho y él se une a mí aunque sin soltarme.

-Si no dejas de moverte, vas a salir hecho un Cristo -le amenazo, por fin logrando liberarme.

-Será culpa tuya, y te despedirán.

Pongo los ojos en blanco y le coloco bien la chaqueta antes de darme la vuelta para ir con Verónica. Él me revuelve el pelo y consigue un bufido por mi parte, pero le sonrío igualmente. Estos días no hemos podido vernos fuera de lo profesional, pero me gusta cómo nos vacilamos en el backstage y hacemos bromas. Aunque no ha habido ningún roce, como debería ser, no puedo evitar pensar que me gustaría que pasase.

Se oyen muchos gritos de las decenas de chicas que están esperando a su grupo favorito. Estos aún no van a salir, así que se me ocurre asomar un poco la cabeza para ver el panorama. Hay una mesa en la que se sentarán, delante de una pantalla enorme, y muchos asientos ocupados  por las chicas. Me alejo, esperando que ninguna haya reparado en mí, y me dejo caer en un sofá para aliviar mi dolor de piernas.

"The sugar in my coffee" [Min Yoongi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora