Capítulo 15 - Tú otra vez no

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Naruto

Salí del local y miré hacia todas partes. ¿Cómo podía Sasuke ser tan rápido? Un golpe a mi derecha captó mi atención. Era él, golpeando un cubo de basura.

Corrí hacia allí, tratando de impedir que hiciese alguna de las suyas. Cuando llegué a su lado se dio la vuelta y comenzó a caminar. Vi su coche aparcado más adelante e imaginé que se dirigía hacia él. En esas condiciones no se encontraba capacitado para conducir y mucho menos si de verdad había ido a la fiesta de Kimimaro. Cuando llegamos junto a su coche, le quité las llaves.

-Creo que hoy vas a tener chófer.

-Hmp.

Aun así obedeció y se subió al asiento del copiloto. Yo monté después.

-¿Qué te apetece hacer?

No contestó. Estaba demasiado ocupado mirando el salpicadero.

Entendía su reacción perfectamente, Sasuke no quería volver a saber nada de Sakura y ahora la había vuelto a ver. Aunque sonase egoísta, agradecía esta situación: lo que había pasado con Shion había quedado en un segundo plano. Bueno, y también era bueno para Sasuke. Llevaba más emo de la cuenta desde que discutió con Sakura y esperaba que este nuevo encuentro le hiciera reaccionar. En realidad no sabía muy bien que había sucedido entre ellos, Sasuke no era una persona muy expresiva.

-Vamonos de fiesta -sugirió.

-Ni de coña te llevo donde Kimimaro.

-Hay alcohol y es lo único que necesito ahora -repuso. A pesar de eso yo no estaba muy convencido-. Prometo alejarme de Tayuya si se acerca -añadió.

Rodé los ojos y arranqué el coche. Quizás algo fuerte nos vendría bien. Pasamos junto a mi coche, aparcado cerca del café, y maldije a Sasuke. Mañana me tocaría venir a por él. Si al menos el theme invitaba a las copas tal vez no le matase.

-¿Dónde se supone que es la fiesta? -pregunté, dándome cuenta de que debía haberlo hecho antes de salir del aparcamiento.

-¿Recuerdas dónde recogimos a Itachi la última vez?

-Sí -respondí un tanto asqueado. No había sido una de mis mejores experiencias.

Hacía unos meses, durante el verano, Sasuke había recibido una llamada de uno de los amigos de su hermano, un tal Kisame. Decía que Itachi había bebido más de la cuenta y si podía ir a por él. Los dos habíamos quedado, asi que me ofrecí a acompañarle. Cuando llegamos al sitio eso estaba infectado de chavales drogados y borrachos. No es que yo fuese un santo, pero es que aquello era un desfase considerable. Buscando a Itachi me encontré con algunos de mis amigos del instituto, no entendía muy bien qué hacían allí, pero les saludé. No iban tan mal como el resto. Mientras Sasuke seguía buscando a su hermano, no sé bien cómo, acabé peleándome contra un tío del que no recordaba ni su cara. Por suerte me defendí bien y Sasuke llegó a tiempo, diciendo que ya había metido a Itachi en el coche. Los dos nos fuimos de allí y llevamos a Itachi a casa. Los dos vivían solos, sus padres habían fallecido hacía varios años, asi que entramos en la casa sin más, dejando a Itachi en la cama con un cubo cerca por si vomitaba.

Sasuke y su hermano apenas se hablaban, vivían juntos porque no les quedaba otra. Desde que murieron sus padres empezaron a distanciarse. Itachi conducía el coche en el que iban y solo él sobrevivió. Sasuke estaba de campamento conmigo, por eso a él no le afectó el accidente. Me resultaba extraño que Kisame le hubiera llamado para hacerse cargo de Itachi, pero era cierto que solo se tenían el uno al otro.

-Hemos llegado -anuncié cuando encontré un aparcamiento en el campo cerca de la casa. Era un chalé que estaba a las afueras, muy grande y bastante apartado del resto. Un lugar perfecto para dar fiestas legendarias sin molestar a los vecinos.

Libertad (Naruhina AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora