la hermana de dam ; ecko

10

—Antes de que me pegues, dejame disfrutar un rato aunque sea—se acerco a mí.

—¿Qué?—pregunté confundida. Nada más terminar la frase sentí los labios carnosos de Nacho encima de los míos.

Me quedé en shock un par de segundos para después reaccionar y apartarlo.

—¿Qué haces?—lo miré con el ceño fruncido y acto seguido cruzandome de brazos.

—¿No me dijiste que te demostrará con hechos en vez de palabras?—hizo una pausa—Yo te estoy demostrando que te quiero con un beso—levantó los hombros sonriendo y yo me limité a mirarlo.

—No me refería a este tipo de hechos—solté después de unos segundos.

—No te lo esperabas, por eso reaccionas así—me miró soltando una risita.

—Deja de decir pavadas querés—hice un gesto y le reste importancia.

—Admití que te gustó—me miró con una sonrisa.

—No.

—¿Ah no te gustó?—preguntó con una ceja levantada.

—No.

Sentí las manos de Nacho en mi cintura y empujandome contra el, cortando la distancia nuevamente.

Era un beso tierno, lento y suave. Cuando estaba dispuesta a separarme las manos de Nacho se posaron en mis cachetes para intensificar el beso y para que no me alejara ni un milímetro de sus labios.

Con todo el valor y autocontrol del mundo lo volví a separar de mi y lo miré a los ojos fijamente. Estaba con la respiración agitada y la boca hinchada y roja de tantos besos.

—No Nacho—dije aún con mis manos en sus hombros.

—¿No que?—preguntó confundido.

—Me estas confundiendo y yo no quiero eso—hice una pausa—No quiero volver a caer en lo mismo, ya te dije que si queres podemos ser amigos.

—¿Con qué te confundo? ¿No es bastante claro que quiero volver a estar con vos?—soltó un suspiro—Yo no quiero ser tu amigo y lo sabes, quiero ser tu novio.

—¿Podes irte de mi casa?—cambié de tema.

—Bueno—contestó con la mirada en el piso.

Antes de irse dejo un beso suave en mi frente y me deseo las buenas noches.                                 

❀ ❀ ❀

Estaba en mi casa con todas las luces apagadas porque Thiago quería sentirse como si estuviera en el cine, sí, estamos viendo películas y para ser específicos la de Coco.

Hoy me tocó cuidarlo desde las ocho y media de la mañana ya que sus papás tenían que hacer unos papeles importantes y después tenían que ir a trabajar y para no aburrirme, acepté aparte que de que me encanta cuidar a Thiago porque es un amor de nene y no da problemas.

—Belén—llamo Thiago mi atención.

—¿Que paso Thiagui?—pregunté desviando la mirada al nene de 3 años que tenía a mi lado.

—¿Y tú novio?—preguntó curioso.

—Acá—lo señalé a él y sonreí.

—No, yo digo el glande—hizo un gesto con su manito.

—No es mi novio Thiagui, es un amigo no más—respondí con un intento de sonrisa.

—¿Y entonces polque se dielon un beso acá?—señaló su boca.

—Porque porque...¿Queres tomar la mema?—cambié de tema el asintió con una sonrisita para después ponerse a mirar la película de nuevo.

Me levanté del sillón y me dirigí a la cocina nada más entrar Thiago me empezo a llamar para que volviera al living. Al entrar en el living veo a Thiago en brazos de Ignacio.

—Hola—lo saludé sin ninguna expresión.

Este me hizo un movimiento con la cabeza en forma de saludo y desvío su mirada hacia Thiago.

—¿Cómo estas enano? ¿Hoy te cuida la linda de Belén?—preguntó con una sonrisa, esa que me encanta desde siempre.

—Viste Belén—habló con una sonrisa mientras que yo lo miraba sin entender—Te dijo linda.

—¿No te parece linda?—saltó Ignacio sonriendo.

—Si es muy linda—contestó con una sonrisa también y me miro.

—Te voy preparar la mema—hablé mirando a Thiago y seguidamente a Ignacio—¿Lo cuidas un momento?

—Si anda—contestó el morocho.

Entre en la cocina y empece a sacar las cosas para hacer la mema y a escuchar la conversación que tenían Ignacio y Thiago.

—Nacho—lo llamo el pequeño de 3 años.

—¿Qué pasó campeón?—preguntó este con voz tierna.

—¿Pol que con Belén se dan besos acá?—preguntó levantando los hombros.

—Porque ella es mi novia.

—Ella dijo que son amigos.

—¿Ah si? ¿Te dijo eso?—preguntó Nacho divertido y Thiago solo asintió—Somos novios lo que pasa es que ella no lo sabe.

—¿Pol que?—susurró el bebé.

—Porque todavía no se puede saber—hizo una pausa—Es un secreto—susurró Ignacio acto seguido Thiago se llevó las manos a la boca en símbolo de sorpresa—¿Vos me podes guardar ese secreto?—preguntó un par de segundos después, el pequeño asintió un par de veces.

—¿Qué hacían?—pregunté entrando en el living con la mamadera en el mano.

—Nada, hablando de cosas de chicos—saltó Ignacio.

—¿De chicos? Pero si Thiago es un bebé todavia—reí.

—Yo soy glande—me retó y se cruzó de brazos.

—Bueno bueno, no te enojés. Toma—le alcance la mema, este la agarró y se acostó para mirar la película.

—¿Y vos? ¿Venis a buscar a Damián?—pregunté levantando una ceja—El esta con Camila ahora, sí queres le aviso que estas acá—expliqué mientras agarraba el celu de mi bolsillo trasero.

—No, no vine por Dam—hizo una pausa—Vine por vos.

—¿Por mi?—pregunté confundida—¿Qué pasó?

—Necesito que me hagas un favor.

—Depende de que favor—rodé los ojos.

—Dale Be, te necesito en serio.

—Bueno bueno, ¿Qué favor?—levanté un ceja.

—¿Podes venir el viernes a mi casa?