—Hija, ¿estás bien? —Pregunta mamá con precaución.
—De maravilla. —Digo sonriendo —. Lamento lo de la puerta, no medí mi fuerza. —Corro hacia mi habitación.
Apenas llego me arrojo a la cama y ahogo un grito entre las almohadas por sentir el pecho demasiado apretado. Fui una idiota por bajar la guardia con él. Nunca debí dejarlo acercarse, así evitaría que mi corazón sufriera por culpa de ese idiota. Pero no, a él tenía que gustarle ella. Si hubiera mantenido la boca cerrada entonces él no hubiera tenido el valor de declararse, y yo aún tendría una oportunidad. Alboroto mi cabello mientras sigo gritando y golpeo las almohadas.
—Sami, —Llama mamá desde la puerta mientras camina hasta sentarse en la cama — ¿tanto te gustaba ese chico?
—No, ese idiota solo me atraía. Se suponía que solo era mi "amigo" ¡Soy una tonta! —Digo con la voz ahogada.
— ¿Entonces por qué lloras y gritas? —Dice acariciando mi cabello.
— ¡No sé! Es tan injusto, fui retirada del juego sin siquiera intentarlo.
—No es injusto si al principio decidiste no jugar. Además, esto es algo no puedes evitar.
Levanto un poco la mirada y suspiro. Mamá tiene razón.
—Ya lo sé, pero eso no evita que tenga celos. —Murmuro con molestia.
—Nada lo evitará, solo tienes que saber reaccionar en los justos momentos. —Finaliza besando mi frente —. ¿Quieres ir a comer con tu padre?
—Sí. Estar con él me hace sentir mejor. —Digo haciendo un puchero.
—Entonces arréglate. Lo llamé y me dijo que nos esperaría. —Dice sonriéndome.
— ¿Nos?
—Así es, no te voy a quitar la vista de encima. —Se levanta a tomar algo del closet —. Me gusta, chaqueta ligera está bien. —Me lo alcanza.
Mamá siempre fue fácil de leer, además de que nadie la conoce como yo. Veo que está feliz de llevarse bien con Blake, aunque eso le incomode un poco, y no pierdo esperanza de que algún día estén juntos. Una vez estamos listas, Margaret nos alcanza unas viandas con el almuerzo y se despide de nosotras en la puerta mientras caminamos para buscar un taxi y dirigirnos a la empresa.
***
—Podríamos ver alguna película mientras comemos. —Digo mientras subimos por el ascensor.
—Claro, sería grandioso. —Dice mamá sonriendo.
Detallo un poco más como se arregla el cabello, sus manos anormalmente alegre y el cambio de ropa que se hizo; es definitivo, está felizmente incomoda.
—Estás muy bonita. —Suelto de forma disimulada.
—Gracias hija.
Ruedo los ojos y suelto un soplido. Se siente incómoda pero le gusta verlo, ¿quién la entiende? Es cierto, ni ella misma se entiende.
Las puertas se abren en el piso de presidencia y salgo rápido para encontrar a mi padre, cuando una escena capta mi atención. Grant está siendo sujetado por el para que no golpee a la persona frente a él, quién está siendo sujetado por seguridad para que no valla contra Grant.
— ¡Grant debes calmarte! —Dice papá con firmeza mientras lo lleva hacia su oficina.
— ¡No me digas que me calme! —Dice airado —. ¡Voy a romperle todos los huesos!
Mamá me da las cosas y se dirige a ellos mientras el hombre grita insultos y palabras inapropiadas.
—Sáquenlo de aquí. —Ordena papá soltando a Grant.
Este trata de salir de la oficina para golpear al hombre, pero mi madre se pone en su camino.
—Debes calmarte. —Dice mamá empujándolo de vuelta a la oficina.
Me quedo en shock por un segundo, hasta que escucho una risilla no muy lejos de mí.
—por eso los niño no deben hacer el trabajo de un hombre. —Dice el señor Flint con gesto satisfactorio, y antes de retirarse, su mirada se encuentra con la mía —. Con permiso señorita.
Me aparto a un lado y él se retira hacia su oficina. Lo sigo unos pasos para confirmar su ubicación y me dirijo a la oficina de Blake. Grant se encuentra más tranquilo mientras habla con mamá, acostado y apoyando la cabeza en las piernas de ella. Sonrío al notar los celos de papá, pero sigo mi camino hasta su computadora de escritorio.
—Sam, ¿qué haces? —Pregunta mamá.
—Necesito entrar un momento en el equipo del señor Flint para saber el secreto detrás de su satisfacción a los dos últimos altercados. —Digo sin apartar la mirada de la pantalla mientras tecleo con rapidez.
—Solo está feliz porque no le gusta pensar que ya está viejo y que Blake y yo hacemos un mejor trabajo que él. —Dice Grant desde su cómoda posición.
—No ha sido fácil lidiar con él. —Dice papá sentándose junto a mamá —. Y tú ya levántate.
—No quiero, estoy cómodo. —Dice Grant molestando a papá.
Mamá rueda los ojos mientras ríe divertida.
—Entré. —Anuncio satisfecha.
—Perfecto, ahora apártate de la computadora y deja que tu padre se encargue. —Ordena mamá con seriedad.
Mientras me aparto, esbozo una sonrisa cómplice al ver que a ella le gusta decir eso muchas veces. ¿En serio las cosas están a mi favor? Creo que sí. Papá se sienta en su escritorio y pone un gesto extrañado mientras lee lo que he encontrado.
—Grant, ven a ver esto. —Dice sin apartar la mirada.
Este obedece y se levanta para ver lo mismo que mi padre.
— ¿Ese no es el contrato para adquirir el barco? —Pregunta extrañado.
—Si lo es, pero hay muchas cosas que no cuadran con el plan original. —Dice y desvía la mirada hacia mí —. ¿Cómo conseguiste esto?
—Entré en el sistema enternet de la empresa y piratee el computador del hombre gallina. —Explico.
—Samantha, te he dicho que eso es ilegal y que no lo hagas. —Reprende mamá.
—Bien hecho hija, con esto podemos confrontar a los clientes fuertes que fueron engañados. —Alaga papá haciéndome reír ante la cara sorprendida de mamá —. Pero es ilegal, así que no lo vuelvas a hacer. —Guiña el ojo y mi risa aumenta.
—Haqid bayisa (Consentidor desgraciado). —Murmura mamá en árabe, aumentando mi risa.
—Sí Val, tienes toda la razón. —Dice papá sin prestar a tención.
Mamá y yo rompemos a reír, seguras de que papá no sabe árabe.
—"Consentidor desgraciado", fue lo que dije. —Explica mamá.
—Y tienes razón. —Dice él guiñándole el ojo —. Grant, encárgate de esto y revisa cuantas personas recibieron este contrato. Cuando termine de comer con Val y Sam, vuelvo para trabajar.
—Socio, por favor. Entiendo que quieras llevarte a ese bello ángel, pero déjame a Valerie. —Se queja Grant.
—Grant, en estos días te acompaño a un bar y nos ponemos al día. Pero si te vas con alguna chica mientras estás conmigo, Schitayte sebya kastrirovannym (considérate castrado). —Amenaza mamá en ruso mientras sale.
Papá y yo nos vemos las caras con la boca abierta para dramatizar y salimos de la oficina escuchando los gritos de Grant por saber qué fue lo que dijo. Una vez fuera de su alcance visual, soltamos a reír divertidos mientras entramos a la sala de proyecciones. Encuentro una buena película para ver y me siento en el mueble entre los dos. Papá pasa su brazo por mis hombros mientras que mamá sirve la comida. Cuando termino de comer, me acomodo mejor entre los brazos de él, y sin darme cuenta, termino dormida.
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Mi Padre es un Casanova
Short StoryÉl pestañea y yo también. Tiene una gran mueca de sorpresa en su rostro, y yo no. Solo nos vemos fijamente procesando la información que acabo de soltarle... Toda niña tiene su propio padre. Y yo quería conocer al mío.