¿No les pasa que se ponen los audífonos dispuestos a escuchar música y entre una cosa y otra terminan olvidando dar play la lista de reproducción y están ahí sin escuchar nada? Pues a mi si y ahora mismo me arrepentía de eso.
—Madison— volví a escuchar que me llamaban, sin embargo seguí fingiendo que no lo escuchaba.
—Maddie espera— corrió a mi lado y me tomo del brazo. Quite mi audífono derecho y lo mire confundida.
—¿Que sucede?— soy buena en actuación.
——Llevo gritándote desde hace rato— en su voz notaba su agitación.
—¿Para que?— lo mire sin expresión.
—Quería saber que te sucedía hoy— habló serio —Te ví rara y hasta podría decir que triste.
—No me sucedía nada— mentí —Y tampoco estaba triste.
—Sabes que no te creo— me miro aún mas serio Logan.
—Saque una baja nota en una materia es todo— no pensaba decirle que era lo que me tenía mal.
—Te creo tan poco— parecía divertido.
—Es tu problema no el mío— me volví a poner mis audífonos y comencé a caminar.
—¿Por que eres tan reservada?— lo dijo despacio, supongo que pensaba que no podía escucharlo. Ahora agradezco no estar escuchando música.
Viva ser bipolar.
Seguí caminando sin importarme nada, sentía la mirada clavada en mi espalda pero intentaba ignorarlo.
En un momento todo se movió violentamente, paré en seco y me quedé inmóvil. Un gusto amargo recorrió mi garganta y todo parecía nublarse y oscurecer poco a poco. Mi oído derecho me comenzó a doler y me saqué de mala manera mis audífonos. Mis piernas ya no tenían fuerzas para sostener mi cuerpo, sentí susurros detrás mío pero no reconocía el mensaje ni quien era él que hablaba. Mi cuerpo me venció y todo se terminó de oscurecer.
Logan Pov's
—Es tu problema no el mío— su tono de voz era frío, tomo su audífono y siguió caminando.
Agh ¿Porque siempre es así?
—¿Por que eres tan reservada?—susurre aunque sabía que no podía escucharme.
Hay momentos que quisiera saber más de ella, conocerla de otra manera, estar tranquilos hablando como esa noche, mirarla mientras me habla de lo que le gusta y notar su emoción que demuestra ante eso. Quisiera escuchar mil historias que le gusten, sus creencias de sus libros favoritos y las críticas a lo que le desagrada.
Estoy jodido hasta las manos con ella.
La seguía mirando, era hermosa cuando caminaba aunque se detuvo de golpe. La mire curioso hasta que se arrebato los audífonos sin cuidado de romperlos.
Algo andaba mal, era obvio.
Empezó a tambalearse y mirar a todos lados.
—Madison— la llamé acercándome a ella pero no parecía oírme, su cuerpo empezó a caer y corri para sujetarlo.
Se había desmayado. La cargue en mis brazos como una princesa.
¿Por que se habrá desmayado? Debía llevarla urgente a un hospital. Ignorando la mirada de todos los que estaban en el campus corrí a mi auto. La recosté en el asiendo trasero y comencé a conducir rápidamente.
—Resiste Maddie— susurraba más para mí que para ella.
Al poco tiempo llegamos al hospital más cercano, baje corriendo y abrí la puerta trasera. Cuidadosamente la saque y volví a cargar.
—Necesito ayuda por favor— grite a las enfermeras. Ellas se acercaron con una camilla y la llevaron a dentro.
—Esta desmayada— me informó una.
Como si no me hubiera dado cuenta.
Cálmate.
—La llevaremos a la guardia, puede venir con nosotros si lo desea, ella estará bien— fue lo más lindo que pronuncio. Asentí con la cabeza y la seguí.
[...]
Maddie se encontraba aún dormida, le habían puesto una mascarilla de oxígeno y conectado a su brazo suero.
—¿Usted es pariente de la señorita Cooper?— un doctor entró a la habitación.
—Logan Morgan, soy su novio— dije inconscientemente.
No eres su novio, ya te gustaría serlo.
Tú callate.
—Bien señor Morgan— comenzó amable —Su novia tuvo una recaída— lo mire sin entender, él pareció darse cuenta de eso —Veo que no lo sabía, ella tiene problemas de con su peso, hace meses ella vino con el mismo problema, no se quiso hacer ningún análisis así que la doctora que la atendió me informó y me tome el atrevimiento de contactar con su doctor de Los Ángeles y según los informes sus glóbulos rojos están muy bajos, creemos que tiene serios problemas de anemia. Esto provoca que tenga bajas de azúcar y desmayos.
Estaba impactado, no sabía eso, siempre la veía tan bien. Bueno, a veces parecía muy pálida pero era algo tan común que no pensé que fuera un problema. Además ella siempre salía de la casa sin desayunar, rara vez la veía comiendo.
—Entiendo— dije mirando a Maddie.
Maddie Pov's
Abrí los ojos de a poco acostumbrandome a la luz. Efectivamente no conocía el lugar donde me encontraba pero por lo que estaba usando podía descubrirlo. Tenía una mascarilla de oxígeno puesta y en mi brazo izquierdo suero. Intente quitarme la mascarilla pero una voz me dejó helada.
—No te saques— lo mire y estaba sentado a mi lado y detrás de él estaba parado un doctor.
—Puedo respirar por mi cuenta— mire al último y este asintió dándome permiso a quitarme el objeto de mi cara.
—¿Se siente mejor?— pregunto de manera educada.
—Si— respondí despacio.
—¿Sabe lo que le ocurrió?— inconscientemente mire a Logan quien tenía un semblante serio.
—Si— dije despacio.
—Voy a hacer el alta y podrá retirarse con su novio— iba a negar lo último pero él no me dió tiempo y se fue.
—¿Le dijiste que eras mi novio?— pregunté confundida.
—Eso no es lo importante— su semblante no cambiaba —¿Por que lo haces?
—¿Hacer que?
—No comer.
—Si lo hago— mentí —Esto fue porque no desayuné hoy, no es nada grave y no creo que me vuelva a pas...
—El doctor ya me informó todo, no te gastes— me interrumpió.
Esquive la mirada, de todas las cosas que podía enterarse esta no era una las mejores.
—No le digas a nadie— empecé despacio —Por favor.
—No se lo diré— volví a mirarlo —Si dejas de hacer lo que haces.
—No puedo prometerte eso.
—Claro que puedes, yo me encargaré de que así sea.
—Logan yo...
—No me harás cambiar de opinión— habló decidido —Voy a cuidarte hasta que te pongas bien.
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Nadie Se Mete Con La Nerd
Teen FictionMadison Cooper es una chica muy inteligente de 17 años. Ingresa a Stanford y por una decisión de su padre termina por inscribirse en Zeta Phi Beta. Donde están los chicos más guapos, divertidos y mujeriegos. Sin mencionar que son los mas populares d...