Hoy era Navidad.
El día más feliz para casi todo el mundo, se celebraba desde la noche anterior todos reunidos en familia en vísperas del nacimiento del niño Dios y se seguía durante el resto del día siguiente.
Era un momento especial y familiar.
Lastima que yo no lo viví así, ayer por la noche ni me vestí elegante, ni tuve una cena de lujo y tampoco la pasé con la familia.
Tenía puesto mi pijama, comi pizza hecha por mi y estuve sola viendo películas en la televisión.
Linda víspera de Navidad ¿No creen?
Esta mañana me levanté temprano, abrí el regalo de Jack. Era un suéter verde esmeralda con dibujos de árboles de Navidad en rojo. Estaba precioso y obviamente me lo puse.
Yo: Feliz Navidad⛄❤ y gracias por el suéter😘 me encantó😍 justo ahora
Jacky Lindy💗: Feliz Navidad y gracias por tu regalo que aún no abrí😁😘 justo ahora.
Era de esperarse, son las once de la mañana y de seguro estuvieron de fiesta anoche. Le había regalado el reloj que tanto quería, ustedes no saben como es Hefferman cuando se obsesiona con algo, torturó a todos hablando del bendito reloj.
No desayuné absolutamente nada, salí de la casa y camine por las heladas calles de Londres. Era una hermosa mañana, la nieve caía con delicadeza y el viento soplaba no tan desesperado como solía hacerlo. Mis guantes protegían mis manos de los copos y mi gorro a mis orejas que casi siempre se me ponían rojas y heladas.
—Disculpa— recibí el impacto de alguien y de no ser porque me tomo de la mano hubiera caído.
—Descuida estoy distraída— levanté la mirada y... —¿Patrick?— pregunté sorprendida.
—¿Madison?— me miraba como si fuera un espejismo —¿Eres tu?
—No, el fantasma de las navidades futuras— rodé los ojos —Obvio que soy yo.
—Muy graciosa, Cooper— entrecerró los ojos —¿Que haces aquí?
—Esa pregunta te la iba a hacer yo, pensé que estarías con los chicos.
—Nunca pasó estas fechas con ellos, siempre vengo a ver a mi madre que vive sola— eso no lo sabía —¿Y tú?
—No quería estar con ellos así que me vine a mi antigua casa— me encogí de hombros.
—¿Y quien más está aquí?— lo mire nerviosa —¿Dylan?— no respondí —¿Megan?— esquive la mirada —¿Tú padre?— suspiré profundo —¿Madison estas sola?
Tomo mi cara y me obligó a verlo. Mierda, nadie debía saber esto. Será un gran problema luego.
—Solo será por las vacaciones, luego volveré— trate de sonar tranquila.
—¿Estas queriendo decir que pasaste Navidad sola?— asentí con la cabeza —¿Por que?— me miro confundido.
—No es mi mejor época del año— sonreí triste.
—Ya somos dos— lo mire curiosa.
—¿A que te refieres?
—Así como tú, yo también perdí a alguien importante en mi vida— sonreía con amargura.
—¿Como puedes saber que es así?
—Porque lo veo en tu mirada, es la misma que veo en el espejo durante estas fechas— se encogió de hombros —¿Fue tu mamá?
—Si— contuve las lágrimas —¿Y tú?
—Mi padre— respondió despacio.
Quien diría que la persona que me molestaba y que jamás pensé en tener de amigo compartiría el mismo dolor conmigo.
—Oye— llamó mi atención —¿Ibas al cementerio?— asentí con mi cabeza —Vamos juntos.
[...]
—Lizabel que lindo nombre aunque un poco raro— comento.
—Lo se, me gusta mucho— respondí sonriendo —Siempre decía que si tenía una hija mujer se llamaría así, mi mamá se ponía feliz con eso.
—¿Y tu no tienes ninguno de sus nombres?— negué.
—No, solo mi hermana Megan Caroline.
—Interesante— se puso a pensar —Bien, iré a ver a mi padre, dejaré que te despidas y luego me sigues— asentí con la cabeza y él se fue.
Dejé las rosas que traía, no había conseguido margaritas esta vez.
—Feliz Navidad mami— una lágrima se deslizó por mi mejilla —Ya lo sabes pero te extraño mucho, estoy con un amigo— sonreí un poco —Bueno, nuestra amistad es complicada— del ramo saque una rosa —Tomaré prestada esta ma y se la regalaré al papá de Patrick, si no te molesta. Te veré luego, te quiero— empecé a caminar limpiando mis lágrimas. Es duro hablarle y no recibir su respuesta por eso trato de hacerlo rápido.
Camine buscando a Patrick hasta que lo encontré, estaba parado frente a una placa y la miraba con mucha atención, me acerqué despacio y leí lo que decía.
William Patrick Michell
16/11/1968 - 05/03/2000
Tú esposa y tu hijo te recordarán por siempre campeón.—Llevas su nombre.
—Así es— sonrió.
—¿Por que "campeón"?— pregunté curiosa.
—Era corredor de motos, uno de los mejores, ganó cientos de carreras— comento con ilusión —Lo admiraba mucho.
—¿Él murió...
—No— me interrumpió —Fue el cáncer, papá no perdería una carrera jamás.
—Lo siento mucho— puse mi mano en su hombro.
—Descuida— me agaché y dejé la rosa al lado de la placa.
—Feliz Navidad, señor Mitchell.
Patrick me sonrió —Gracias Mad, eres muy buena conmigo y yo siempre fui malo contigo. Deberías odiarme y tratarme mal.
—Cada uno da lo que tiene en su interior— lo mire fijamente —Mi madre me lo enseñó, yo no puedo odiarte porque no tengo odio en mi.
—Perdón por todo— me miro arrepentido.
—Patrick, yo te perdone hace mucho— le sonreí.
—Gracias de verdad— me abrazó y yo le correspondí —Oye Madison— me llamó cuando nos separamos.
—¿Si?— pregunté.
—No puedes pasar Navidad sola.
—Si puedo, lo estoy haciendo— me encogí de hombros.
—Pero ya no más, ahora mismo iremos a mi casa.
—Oh no— me negué —No quiero ser una molestia.
—No lo serás, a mi mamá le vas a encantar, ella es la persona más carismática que conocerás— sonrió feliz —Además hace ricas comidas y demasiada para nosotros dos solos.
—Esta bien...
ESTÁS LEYENDO
Nadie Se Mete Con La Nerd
Teen FictionMadison Cooper es una chica muy inteligente de 17 años. Ingresa a Stanford y por una decisión de su padre termina por inscribirse en Zeta Phi Beta. Donde están los chicos más guapos, divertidos y mujeriegos. Sin mencionar que son los mas populares d...