08. Punto 7

622 68 27
                                    


Capítulo 8

8| Punto 7


VÍCTOR

- Nos hacen falta dos botellas de vino blanco.

Bárbara estaba apurada y entendía exactamente por qué. Me puse de pie rápidamente, aventando la silla y reuniendome con los demás profesores en la mesa.

- Saldremos a buscar a Iván al bosque, puede estar en cualquier parte- hablé en un susurro para no alertar a los demás estudiantes. La mitad de profesores se dirigió rápidamente a la puerta.

-Iván espero que no hayas hecho una tontería- pensé en voz alta al dirigirme a la salida.

Los profesores, Martha, Gaby, Pedro y Eliza se montaron en sus autos.

-Deberíamos avisar a la guardia civil, por si lo ven. - sugirió Pedro bajando el vidrio de su auto. Asentí y tomé el móvil observando como se alejaban en diferentes direcciones.

- Seguro está vez si lo expulsas- comentó Helena.

- Tu sabes su situación, Helena. No podemos hacerle eso, le daré una semana de cuadras si es lo que quieres. -Helena me dirigió una mirada desaprobatoria frunciendo los labios.

- Que pasa con nuestro lema principal de disciplina? Además que dirían los padres de familia si saben que hay preferencias, si todos los chicos de aquí tienen problemas...

-Helena-corté. -Nos puedes ayudar a buscarlo o a cuidar a los demás niños, no te pido que me des lecciones de disciplina-solté. Helena me miró con frialdad y volvió adentro. Finalmente llamé a la guardia.

-Tío- llamó Diego, poniéndose un buzo sobre el uniforme, para salir al frío mañanero del bosque. -Te ayudaré a buscarlo-dijo. Antes de que negara el volvió a hablar; -Es que... Creo que se fue por algo que le he dicho...

-pelearon o algo así? - le pregunté, Diego asintió.

-Fue más como una discusión-aclaró. - Es que tiene un húmor de perros, apenas llegué comenzó con su sarcasmo... Que le pude haber hecho para que me tratara así?

- Disculpalo, esta pasando por una situación muy difícil. No hagas caso de lo que diga. - le dije poniendo mis manos en sus hombros. Diego rodó los ojos.

- Como si los demás no. -comentó.

-Bueno, vienes o te quedas?

Diego y yo subimos en mi auto y saqué la guía del bosque y se lo pasé a Diego.

- Los puntos clave 1, 2, 3 y 4 ya están ocupados por otros profesores.
¿Por cual punto crees que deberíamos iniciar? - Diego se quedó pensativo.

- Si salió por la puerta trasera, debió cruzar esta cerca y dudo que se haya ido hacia algún claro- dedujo.-Entonces deberíamos empezar por el punto 7 en la zona "a".

-Vamos allá.

Hubo un corto silencio cuando Diego volvió a hablar.

- Por qué me has puesto de compañero a un gruñón, habiendo tantas habitaciones?-cuestionó.

- Creo que la educación va más allá del conocimiento matemático, gramatical, geográfico etc... Evaluando ambos perfiles decidí ponerlos en la misma habitación para que ambos aprendan un poco de cada uno. Es un nuevo experimento social- dije, antes de que Diego reprochara me adelanté a decir; -Lo siento, pero no hay cambios.

- Aquí es- señalé. Apagué el motor y Diego y yo bajamos. -Tu eres un boy scout no?

- Si... ¡Cuando tenía 8!

- Vale, es no importa, debes saber como seguir un rastro. - Diego se encogió de hombros y comenzó a observar la tierra y los alrededores.

- Estuvo aquí-aseguré al ver una de las botellas de vino tirada junto a un árbol. Mi móvil timbró.

-Algún rastro de Iván? - preguntó Pedro.

-De hecho si, estamos bastante cerca, hemos encontrado una botella de vino vacía, que tan lejos pudo haber llegado con tanto alcohol?

- Bien, igual seguiremos alerta. Creo que deberíamos avisar a su padre...

-No creo que sea buena idea, si en una hora no lo encontramos yo mismo lo llamo. - finalicé la llamada y me di cuenta de que Diego no estaba. -Diego! -le llamé.

Dios sabe que tan peligroso es este lugar.

-Por aquí! - exclamó. Miré a todas partes. -Detrás de las rocas... Creo que cayó aquí dentro- dijo.

Me acerqué y vi a Diego agachado sobre una cueva intentando mirar.

Miré a un lado y estaba la otra botella.

- Creo que tu cabes, te iluminaré con el móvil- hablé yo. Diego se quitó la chamarra y se arrodilló. Gateó dentro.

-Aquí está!- exclamó. -Parece inconsciente- el corto alivio que había sentido, se esfumó.

-Vamos, hay que sacarlo de aquí.

[***]

- Tuvo una congestión alcohólica no muy grave- el doctor habló saliendo de la habitación. - Aquí está la receta médica y le recomiendo cuidar mejor a sus alumnos... Más en esta edad.

-Si, gracias por su consejo. -le contesté tragandome mi orgullo y dándonos un apretón de manos.

-Vamos, fuera todos- habló Lucy echando a todos de la habitación. -Iván tiene que descansar.- en sus manos llevaba una bandeja con hielos, suero y las pastillas.

- Eh... Lucy...

-Eh nada, Victor, yo lo cuidaré. Ahora largo, que le hacen ruido. - muy atenta le acomodó las sábanas y dejó la bandeja en la mesita de noche.

Suspiré aliviado de que no haya pasado a mayores.

-Mamá -le escuché murmurar a Iván con los ojos cerrados, Lucy se puso un poco extraña, sonriendo exageradamente.

Regresé a mi despacho, al abrir la puerta vi a Helena colgando el teléfono.

- Que haces aquí? Y con quien hablabas? -le pregunté molesto. Helena era tan entrometida en mi vida después del rollito que tuvimos.

-Estoy haciendo lo correcto.

-¿Como que "lo correcto"? - me acerqué más a ella mirándola intensamente, sé exactamente su debilidad... Yo.

Sus piernas temblaron un poco y su labio vaciló, recuperó su compostura fría.

-Avisé al padre de Iván, el señor Belikov, sobre lo ocurrido con su hijo...

N/a:

Nueva portadaaa! Les gusta?

Soy la única que odia a Helena? Puaj.

Gracias por leer! Voten y comenten.

Quién es su personaje favorito hasta el momento? Jeje.

Las amito (lectoras fantasma les jalaré las patas en la noche)

❤️❤️❤️

Serendipia I [El Secreto De Julia] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora