Serendipia I [El Secreto De Julia]

39. Fé

Capítulo 39

39|Fé

CISCO

No podía creer lo que Iván decía.
¿Julia haciendo bromas de mal gusto sobre Dimitri?
Conocía a Julia, sabía que podía llegar a ser imprudente, pero jamás a tal grado, esa no era ella.

No tenía idea de cuanto tiempo había pasado, sabía que era tarde, pero se me había ido el sueño, pensando en todo lo que estaba pasando, analizando y perdiéndome en las incógnitas.

Después de un rato, sin explicación alguna me levanté de la cama y fui al ordenador, pero no al mío, si no, al de Nora, que guardabamos. Ya lo había desbloqueado pero tenía miedo de abrirlo solo.

Diego de pronto se levantó y me miró desde su cama.

—¿Que haces despierto? —me preguntó frotandose los ojos.

—Abriré el ordenador de Nora —Diego podía entender a quién me refería, ya que le habíamos hablado bastante de Nora. El se acercó aún adormilado y se sentó a un lado mío a observar.

Lo primero que abrí fue su correo, no sé por qué, pero algo me decía que allí encontraría la respuesta. Me fui a enviados y tenía uno muy reciente. Mi corazón dio un vuelco y me puse nervioso.

Al abrirlo, me di cuenta que era una serie de videos, enviados a un correo... Era el correo de Camila.

Puse play al primer video, era Nora, vloggeando su viaje. Todo parecía normal.

En el segundo era una continuación, pero se cortaba de repente, para luego reanudarse, pero ya no se grababa a ella, simplemente grababa el piso y escuchaba su voz, subí el volumen y me acerqué a la Bocina.

"Me están siguiendo, me están siguiendo, me estoy dirigiendo a los baños, tengo miedo Cam. No sé por qué"

Su voz temblaba y se escuchaba bastante barullo.

De nuevo se corta un poco y comencé a asustarme cada vez más.

¿Si algo malo le pasó? Quería seguir viendo los videos, pero Diego me cerró el computador y antes de que pudiera reclamar el señaló la ventana. Hacia un punto en especifico en el patio.

Me tuve que inclinar sobre el escritorio para alcanzar a ver. Era la silueta de una chica, caminando por el patio, parecía seguir algo o a alguien.

—Puede ser cualquier persona —le dije restándole importancia, intenté volver a abrir el ordenador.

—Es Julia, se dirige al bosque —dijo Diego aún observando. Salté de la silla y me coloqué los anteojos para ver bien y efectivamente Diego tenía razón.

—¿Pero que está haciendo? Ir al bosque, a esta hora y completamente solo, puede ser la última decisión que hagas en tu vida. Tenemos que hacer algo —dije, desesperado por salir y detenerla.

—Vamos, antes de que sea demasiado tarde —dijo Diego, calzandose las botas, yo me puse mis pantuflas y comenzamos a andar rápidamente por los pasillos iluminados por la luz de la luna temiendo que nos pillaran.

Recorrimos los pasillos y bajamos rápido, nos dirigimos a la cocina y salimos por la puerta trasera.

Empezamos a correr, pero ya era demasiado tarde, Julia ya había salido del recinto. Comencé a impacientarme.