Prólogo II

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Tras cerrar los ojos pensaste que ese era el fin de todo esto, pero en cambió, un dolor en tu antebrazo hizo que miraras esa parte de tu cuerpo para observar que una aguja estaba clavada ahí, pero al parecer forzaron mucho la zona ya que tenías un gran hematoma ahí. Parpadeaste un poco rápido para poder despertar bien, el sonido de la máquina de pulsos hizo que dedujieras en dónde estabas, un hospital, llevaste tus manos a la cara, sintiendo un pequeño tubo en tus mejillas. Soltaste un fuerte suspiro, intentando cambiar de posición para poder estar más cómoda en esa dura cama.

-¿____?

Miraste hacia frente, donde estaban tus hermanos, antes de que pudieras decir algo ya los tenías abrazandote.

-¡Nos habías asustado tanto! ¿Qué pensabas al ponerte entre ellos, ____?- preguntó Jun preocupado.

-Yo...

-¡No sabíamos si ibas a despertar!... Tonta- esta vez habló Matthew, ambos abrazandote.

Sonreiste nerviosa, pero nuevamente aquella noche vino a tu mente, haciéndote recordar el por qué habías heco lo que hiciste.

-¿Y JungKook?

Tus hermanos se miraron entre sí, pensaste lo peor.

-____, has estado incosiente dos semanas- habló Jun -JungKook... No se ha despegado de ti, es un maldito obstinado.

Soltaste el aire que estabas reteniendo lista para recibir lo peor, llevaste tu mano a tu rostro, intentando evitar que vieran las lagrimas salir de los ojos.

-Desde que te ingresaron no se ha apartado de ti. Tuve que amenazarlo con golpearle.

-Y aún así le valió- terminó Jun.

Matthew suspiró.

-Ambos son unos idiotas cuando se trata del otro... La pareja perfecta.

-Voy a ir por él- dijo Jun saliendo con Matthew detrás de él. Intentaste pararte, pero sentiste una fuerte punzada en el área de tu estómago, suspiraste.

-Debo dejar de llevarme por mis instintos...- susurraste para ti misma -¿Dos semanas...?...

Mirabas la pequeña ventana que había en tu habitación, la luz entraba levemente debido a unas gruesas cortinas, un sollozo corto con aquél silencio en la habitación, miraste a la puerta y ahí estaba, tu amado prometido, la persona por la que eras capaz de recibir una bala, cosa que ya habían comprobado que no bromeabas, Jeon JungKook.

Del mismo modo que tus hermanos no dejó que hablaras, pues sus labios ya habían atrapado los tuyos, correspondiste con deseo, con tantas ganas de recordar cada centímetro de sus labios rosados. Cortó el beso para juntar sus frentes con las lágrimas en sus ojos amenazando en salir.

-... Eres una tonta... ¿Acaso querías matarme?...- dijo con los ojos cerrados, acción que imitaste llevando tus manos para cubrir las suyas las cuales acunaban tu rostro.

-Lo siento...- susurraste sin abrir los ojos, podías imaginar como una sonrisa se dibujaba en su rostro, conocías sus reacciones aún sin verlas.

-... No lo vuelvas a hacer, ¿Quieres?... Ah, Han ____, si no me matas de amor me matas con tus tonterías...

Abriste los ojos, dándote cuenta de que éste ya los tenía abiertos, ambos sonrieron volviendo a juntar sus labios. JungKook en sus adentros no dejaba de agradecer a cualquier dios que le haya permitido estar un tiempo más a tu lado, para poder demostrarte lo mucho que te amaba.

Me salió de la mier...coles
;-;

Los quiero ❤

JungKook reactions   [ Pedidos Cerrados ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora