Para ti solo fui una más (Aiteda)

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UNA SEMANA DESPUÉS
Narra Aitana
Ya ni sabía cuanto tiempo llevaba allí metida. No veía ni la luz del sol. Solo venía cada día para darme de comer y se volvía a ir. Estaba compinchado con una chica, que se quedaba cuando él se iba. Abrí los ojos y vi a la chica delante mía.
X: hola!
Ai: h-hola... -dije temblorosa.
X: tranquila, yo no te haré daño de acuerdo? Me llamo Graciela. Y tu??
Ai: Aitana
G: vale, Aitana.
Ai: déjame irme por favor.
G: ojala pudiera.
Ai: como es que trabajas con él?
G: mis padres eran amigos de los suyos y un día hicieron una apuesta y el ganador se quedaba con el hijo del otro.
Ai: que cruel!!!!
G: ya. Ellos perdieron y desde ese día estoy al mando de sus padres, pero como nunca están, pues estoy a sus ordenes.
Ai: tienes teléfono o algo??? Es para llamar a mis amigos para que sepan que estoy bien.
En ese momento escuchamos la puerta de donde estábamos. Graciela se fue corriendo y yo me hice la dormida.
V: hola cosita como estas?
Ai: como coño quieres que esté si estoy separada de mi familia, amigos y novio????
V: pues bien ya que estas a mi lado- dijo acariciándome la cara.
Ai: tu sueñas-escupí esas palabras con toda la rabia.
V: esto no se hace. -me tiró a la cama y me empezó a quitar la ropa.
Ai: déjame cabrón -dije forcejeando.
V: nono! Te has portado mal y te mereces un castigo.
Y si, me violó el cabrón. Mi mejor y único amigo, o eso había creído, de Barcelona, me había manoseado y violado. Me sentía la persona más sucia del mundo. Él, se fue y me dejó sola. Me puse a llorar. Diez minutos después se abrió la puerta. Yo me asusté y me hice un ovillo.
G: tranquila cariño, soy yo.
Ai: n-no puedo mas.
G: tranquila. Ten, te he comprado ropa.
Ai: g-gracias.
G: de nada. Intentaré conseguirte un teléfono de acuerdo??
Ai: g-gracias.
G: descansa y te recuperarás.
Allí me dormí.