Casada con un Demonio (+18) [EDITANDO]

Capitulo 22

LUCE*

-He estado con otra.-

No iba enserio. Era guapo, tenía dinero, buen cuerpo. Raro que no tuviera a alguien.
Pero se iba a casar conmigo.

A pesar de su gran físico, odiaba a ese hombre. Entonces, ¿por qué me dolía lo que me había dicho?

-Perdona, ¿qué has dicho?.- Pregunté aún confusa.

-Luce... He estado con otra.-

-Bebiendo, hablando... todos lo hacemos.-

-No solo eso. Hemos hecho el amor.-

Hemos hecho el amor. Esa frase resonaba en mi cabeza.
Había estado con otra mujer.

Sin saber porque comenzaron a brotar de mis ojos lagrimas. Lagrimas amargas, estas no eran saladas.
Estaba dolida. Aunque le odiaba estaba comprometido conmigo y a pesar de los besos con Daniel para cabrearle. No me había tirado a nadie (literalmente).

-Luce... No llores.- Me dijo acercándose a mi.

-No me toques. Das asco.- Me salió del alma.

Ese hombre sin sentimientos, incapaz de derramar una lagrima por alguien. Estaba delante de mi.

-Te odio y no quiero casarme contigo. Pero estamos comprometidos. Se llama respeto.-

-Fue un fallo. No sentí nada.-
Noooooo, lo que faltaba que sintiera algo.

-Se lo diré a tu padre.- No quería alejarme de él por algún motivo que no sabía aún. Pero era el momento perfecto para poder ser libre.

-No por favor.-

-Solo lo haces por la empresa.-

-Luce. Te quiero.- Dijo arrodillándose.

¿Te quiero? No podía ser. ¿Marc llorando? Era todo por la empresa, tenía que ser eso.

Seguía llorando. Seguíamos llorando.
Yo de pie como una magdalena y el de rodillas llorando a moco tendido. Vaya estampa.

-¿Me... me quieres?- Pregunté aún confusa.

-Olvida lo que ocurrió.- Dijo levantándose y poniéndose más serio.

-¿Qué hacías en el desván?- Preguntó volviendo el demonio sin sentimientos.

-¿A qué viene eso ahora?- Estaba enfadada. Me salta eso y ahora sin más me va a regañar.

-Yo te he contestado a tu pregunta. Te toca.-

-Estaba abierta la puerta.- Dije apartando la vista de la suya. Si me miraba a los ojos iba a saber que mentía. No sé me daba nada bien mentir.

-Ajá...- Me miraba enarcando una ceja.

-Pues eso, estaba abierta y subí.- Seguía con mi mentira firme.