I Think About You (Yugyeom y tú)

Capítulo 8

-¿Cuánto lleva abandonado este sitio?- pregunto admirando todas las cosas desgastadas que había.

-Dos años, aunque parece que ha sido abandonado hace diez- me siento mal por sus palabras, porque ojalá hubiera sabido de este sitio cuando estuvo abierto, seguro que me hubiera encantado venir aquí.

-Ojalá siguiera abierto, ¿es un teatro?

-En parte si, ¿ves las cuatro puertas?- asiento lentamente- las dos primeras dan a una sala de cine y su control, las otras dos son una biblioteca pequeña y un gran teatro

-Wow, quiero ver todas

-Vamos, empezaremos por el teatro- dice sonriendo y tirando de nuevo de mi mano para llegar a la sala.

Esta tenía muchos asientos y un amplio escenario con cortinas verdes a los lados atados por un lazo rosa roto y desgastado, ambos fuimos directamente al escenario.

-Pon algo de música, quiero bailar- le digo con energía.

-A tus órdenes- dice riendo, se sentó en uno de los asientos en primera fila, sacó su móvil y puso una canción al azar, de estas movidas que no tienen baile.

Me puse a bailar cualquier cosa, en una parte que te subía la adrenalina salté del escenario y cogí la mano de Yugyeom para subirle al escenario. Él accedió sin rechistar y ambos nos pusimos a bailar eufóricamente.

Cuando la canción terminó los dos nos reímos, me encantaba estar así con Yugyeom y no sabía por qué.

-Venga, vamos a la sala de cine

-¿Por qué no vamos a la biblioteca primero?- pregunto, tenía un gran interés por los libros y quería saber cuales había aquí o si directamente quedaba alguno.

-Ve allí mientras veo si queda algo de comida por ahí, iré a avisarte- dice saliendo de la sala antes que yo, hice lo que dijo y era la sala más pequeña pero acogedora de todo el lugar. Con dos mesas grandes en el medio, todas las paredes llenas de estanterías con libros en su interior y un par de mesas con dos ordenadores que tenían pinta de que no funcionaban por su aspecto.

Estuve mirando las portadas y las descripciones de los libros, eran todos preciosos y por alguna razón extraña eran todos o de amor o de misterio.

Uno de amor que se llamaba "mi vida es horrorosa" (Título inventado) es el que más me llamó la atención, la parte de atrás decía: "Vanessa es una chica que lo quiere todo pero que no tiene nada. Tres hermanos que no ve desde hace tres años por culpa de sus padres, los cuales no quieren que ambos se relacionen por vergüenza agena a Vanessa. Ella intenta seguir con su vida a pesar de que la cuesta al estar sola, ¿pero y si llega alguien llamado Cameron y le cambia la vida?"

Decidí guardarlo en mi bolso,  lo bueno es que nadie se daría cuenta de que había desaparecido.

Un sonido hizo sobresaltarme, sin embargo solo fue Yugyeom que abrió la puerta rápidamente.

-Que susto me has dado- exclamo.

-No grites, los vecinos nos van a oír- dice riendo, me uní a su risa.

-¿Has encontrado algo?

-Un paquete de palomitas que parece estar en buen estado, pero tendremos que comerlos de la bolsa

-Guayy, tengo hambre- depués del café que me tomé por el camino hacia aquí me había entrado hambre.

En cambio Yugyeom no se había tomado el café aún porque quería "tomar algo con las palomitas", totalmente asqueroso.

Me senté por el medio, Yugyeom había ido a la sala de al lado para ver si había alguna película y le podía ver desde el lugar donde estaba sentada.

-Está El Diario de Noa en inglés con subtítulos, Peter Pan en versión antigua, Cars 1 con lo que parece ser mala calidad y Destino Final 2, decide

-El Diario de Noa, si tu quieres claro

-Yo quería Destino Final 2- dice como un niño pequeño

-Pues veamos esa entonces- me arrepentí de esas palabras justo cuando iba casi por la mitad, muertes, sangre y miedo por todas partes. Para mi colmo Yugyeom se había quedado dormido en mi hombro apenas comenzó al película porque no se tomó el café.

-Yugyeom, tengo miedo por favor despierta- digo dándole golpecitos en el hombro, que no hicieron resultado alguno sobre él.

Los ruidos provocados por la película eran muy estruendosos y daban sustos, por lo que me estaba asustando fácilmente.

-¡Yugyeom!- grité cuando me asusté de nuevo, me senté en el suelo y me tapé los oídos. Sentí unas manos en mis hombros y grité más, no me había dado cuenta de que estaba llorando.

-¡Soy yo Miyeon!- grita Yugyeom sacudiéndome para que saliera del miedo.

Me levanta de la nada y me abraza, no me gustaban las películas que tuvieran que ver con la sangre porque mis abuelos murieron en un accidente de coche y yo estaba presente en todo momento, por lo que ví sangre por todos los lados.

-Dios que mal lo he pasado- digo recibiendo su abrazo.

-¿Por qué te has asustado tanto?- pregunta con preocupación.

-Te lo explicaré pero apaga esto y enciende las luces- él, más que corrió voló para hacer lo que le dije.

-Ya está

-Gracias

Nos sentamos de nuevo y suspiré para después contarle lo del accidente, él me comprendió y me abrazó al instante, tantos abrazos entre nosotros me ponían nerviosa y me trasmitían descargas eléctricas por todo el cuerpo.

-Es normal que sientas eso, yo lo haría también. ¿Prefieres irte o nos quedamos un poco más?

Su pregunta me hizo dudar un poco.

-Vamos a la biblioteca, tómate el café y cuando lo hagas nos vamos, ¿te parece bien?- pregunto quitando las lágrimas restantes.

-Vale

Ya en la biblioteca, me llamó la atención otro libro que se llamaba "A causa de dos" (Título inventado) que iba sobre una chica y un chico normales que se casan por obligación y se acaban enamorando por ello.

Cuando Yugyeom bebe el último sorbo del café, se levanta y me mira. Yo le devuelvo la mirada y dejo el libro para salir por la puerta junto a él, con todo este tiempo aquí dentro no me había dado cuenta de ya eran las ocho de la tarde pasadas.