Dónde estoy es lo que menos me preocupa, solo quiero ver el precioso rostro de Yugyeom, saber que está bien, saber que el impacto del coche no le había hecho nada...Porque sí, había actuado como un héroe, pero las ganas que tenía de haberle apartado en ese momento para no verle sufrir, iban en aumento cada vez que pensaba en ello. No me podría perdonar si le perdía, o si yo ya no estaba en la Tierra para solucionar las cosas, porque todo era mi culpa, todo lo que había sucedido desde que nací era culpa mía y de nadie más.
Abrí los ojos cegándome con la blanca luz que había justo delante de mí, eran luces que venían del techo, cuando pude enfocar vi que ese techo era igual de blanco que las luces y las paredes que me rodeaban. Por la ventana se podía filtrar un poco de la luz de la noche, ya que las persianas estaban bajadas. Analicé mejor lo que tenía alrededor, máquinas conectadas a mí que pitaban una y otra vez, a mi lado una mesita blanca con unas rosas rojas en un jarrón de cristal transparente, justo enfrente de la camilla en la que estaba tumbada había un pequeño sofá marrón que estaba vacío, y por último había una televisión en lo alto de la pared justamente encima del sofá, la cual estaba apagada. Por fin comprendí donde estaba, en el hospital...
Me moví sin dificultad, pero mi rodilla y codo derecho dolía, más bien era escozor. Una mujer entró en la habitación, era una doctora.
-Hola Miyeon, las máquinas me han avisado de que has despertado, ¿cómo te encuentras?
-Bien, ¿qué me ha pasado?
-Os atropeyaron a ti y a otro chico, que está más grave que tú, tú solo te has hecho una herida en el codo y en la rodilla de la caída. También te torciste el tobillo pero no es nada grave
-¿Cómo está Yugyeom? ¿Qué le ha pasado? ¿Dónde está? ¿Está bien?
-Al intentar salvarte, el coche le golpeó en la espalda y en la pierna izquierda, y si a eso le sumas la caída al suelo segundos después...está grave, no se ha despertado aún y ya le han operado de la pierna, la cual tiene rota, y en la espalda tiene una contractura, pero no es grave
Las lágrimas surcaron mis ojos, no podía estar pasando, si perdía a Yugyeom no me lo iba a perdonar jamás, todo lo que había pasado era mi culpa, y juré que si Yugyeom no despertaba, iba a dejar de cantar y de bailar, de pertenecer al mundo de la música y al mundo de JYP Entertainment.
-¿Cuándo me puedo ir de aquí?
-Ya que ha despertado y es de noche, mañana por la mañana podrá irse
-¿Le...le podré ver?
-Si, pero no puedes tocarle por si acaso, por precaución
-Gracias
-No hay de qué, hay gente esperando fuera para verte, ¿les digo que entren?
-Claro, gracias doctora
-De nada, este es mi trabajo- dice sonriendo, le devolví la sonrisa y salió de la habitación, poco después entraron Yina y GD con mi padre.
-¿Cómo estás Miyeon?- pregunta mi padre preocupado.
-Bien, solo tengo heridas de la caída
-Voy a matar a Yugyeom- dice mi padre.
-¿Qué? ¿Por qué? Él me ha salvado
-¿Que te ha salvado?- pregunta GD.
-Si, estaba cruzando la calle y no vi por donde venían los coches, venía uno hacia mí y Yugyeom se puso delante para que le atropellaran a él en vez de a mí
-¿Cómo?- pregunta Yina confusa.
-En las noticias dicen que como te iban a atropellar, saliste corriendo y Yugyeom iba a salvarte pero tú ya te habías ido y le atropellaron a él, dicen que tú te desmayaste y que fue tu culpa, que por tu culpa estáis los dos aquí- explica mi padre.
-Sí es mi culpa, pero no por eso que cuentan, es todo falso
-Pues ten cuidado cuando salgas de aquí, hay miles de reporteros y paparazzi ahí abajo - dice mi hermano.
-¿Dónde está mamá? Sabía que no iba a venir a verme- pregunto por simple curiosidad.
-En el hotel- dice mi padre.
-Da igual, lo que importa ahora es que estás bien y nosotros estamos aquí para estar contigo- dice mi hermana, sonreí.
-Después de la luna de miel quiero que hagamos un plan los tres juntos, aunque bueno, creo que somos demasiado mayores ya para eso- me arrepiento al ver que no reaccionaban a lo que había dicho.
-No, no, no, nos encantará- dice mi hermano.
-Por supuesto- dice Yina.
Después de aquello se fueron, y yo descansé hasta el día siguiente pensando únicamente en Yugyeom.
El sol entraba por la ventana y parecía hacer calor, me senté en la camilla en la que había estado las últimas horas y el doctor entró por la puerta.
-Oh, estás despierta, justo venía a ver las máquinas y desconectarlas
-Pues ya puedes hacerlo si quieres, una pregunta, ¿Yugyeom...?
-Sigue sin despertar, su pulso es débil pero su cuerpo sigue luchando
Me pasé las manos por el pelo y suspiré deseando lo mejor para él, después de que me desconectaran de las máquinas a las que estaba conectada me cambié de ropa, la cual me había traído mi padre:
Salí de la habitación y pregunté a un doctor que salía de la habitación de Yugyeom si podía entrar a verle, él me dijo que sí pero que no podía tocarle.
Verle en ese estado solo hizo que estuviera más mal de lo que ya me encontraba, no sabría como describir lo que ven mis ojos.
-Yugyeom...dios mío, todo esto es culpa mía- me acerqué a él y cuando le acaricié la mano, las máquinas empezaron a volverse locas. Los doctores entraron en la habitación y me pidieron que me fuera, pero yo no quería irme. Me aferré a la camilla y los doctores tiraban de mí hacia la salida, yo me resistía pero eran demasiados.
-¡Soltarme! ¡Yugyeom! ¡Te amo!
ESTÁS LEYENDO
I Think About You (Yugyeom y tú)
FanfictionMiyeon y Yugyeom, dos idols de Corea del Sur, integrantes de grupos bastante importantes en el mundo, crean una bonita amistad que pronto...¿se convertirá en otra cosa? Con muchos problemas de por medio en su vida, ¿serán capaces de superarlo todo...