Quien dijo Sangre [Draco Malfoy Y Tú] // [TERMINADA]

Capitulo 7: La decisión.

Al dia siguiente por la mañana, durante las clases estaba un poco nerviosa. No había visto a Draco desde la noche anterior y estaba un poco preocupada. Ni siquiera en el desayuno, al girarme para mirar a los de Slytherin, como de costumbre, faltaba ese pelo rubio que tanto me gustaba y que sobresaltaba de entre los demás. Creo que Hermione se dio cuenta porque en clase de Adivinacion, mientras la profesora Trelawney estaba en su mundo explicando cosas que no tenían sentido, Hermione me saco de mi mundo haciéndome una pregunta:

-¿Estas bien?- comenzó- Te noto muy rara-.

-¡Si!- dije, mas alto de lo normal porque la profesora Trelawley se me quedo mirando fijamente- Si, estoy bien. No pasa nada-.

Pero si que pasaba porque no quería contarle a mi hermana que tenia novio. Si, tengo novio. La noche anterior respondi a la pregunta de Draco con un timido pero muy sincero: ¡Sí! Despues de eso me abrazo tan fuerte que casi me ahoga, pero también lo agradeci. ¡Acababa de empezar a salir con el chico que me gustaba! ¡No podía ser mas feliz!

-Oye,- dijo mi hermana, sobresaltándome un poco- al final ayer, ¿no fuiste a ver a Draco, o si?-.

-Emm- comencé, no podía decirle a mi hermana que estaba saliendo con el enemigo de su mejor amigo- No, eso seria romper las normas.

Ella solo respondió a mi respuesta con una sonrisa y un –Bien hecho hermanita-, pero la verdad no soportaba tener que mentirla a mi hermana, pero era lo mejor que podía hacer. Sino me podría quedar sin amigos y yo no quería eso. Casi sin darme cuenta Hermione tuvo que zarandearme un poco para decirme que la clase se había acabado, ya era hora de comer. Las clases anteriores habían sido compartidas con Hufflelpuff y Ravenclaw respectivamente. Adivinacion había sido exclusiva para Griffindor, por lo tanto no había podido ver a Draco en toda la mañana. Esperaba que por la tarde fuera distinto.

A la hora de comer, me senté donde siempre y con los de siempre, pero esta vez era distinto, Harry, Ron y mi hermana estaban un poco raros, Ginny un poco también. De repente note que de vez en cuando levantaban la vista hacia la mesa de Slytherin, a la que yo estaba de espaldas, asi que me di la vuelta y le vi.

Ahí estaba, mi novio, con su pelo muy bien peinado, su hoyuelo en la mejilla izquierda y sus maravillosos ojos grises. Estaba perfecto, también vi que me miraba fijamente, con una mirada bastante enbobada, y ahí me di cuenta de porque estaban raros conmigo.