VI

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El tiempo pasó volando entre confidencias y risas, en los dos grupos. Natalia, María, Sabela y África se habían tomado un par de rondas y decidieron cambiar de sitio, y pasear un poco mientras callejeaban por la ciudad, hacia una noche espectacula.

- Tías, ahora mismo me tumbaría en el parque y me fumaría un porrito-,  dijo mirando al cielo. -Pues mala idea no sería- apuntaló África, - Ey, ¿qué os parece si vamos al Harley, a los reservados? Allí tienen cachimbas, y esos sofás redondos son espectaculares, dijo mientras Sabela ponía los ojos en blanco. - Venga, Sor Citroen-, soltó María que un día es un día.

Natalia asistía a la escena divertida, mientras buscaba su paquete de tabaco en el interior de la chaqueta, está imbuida en sus pensamientos, pero muy feliz de compartir esa noche con sus amigas. - Pues no se hable más, vamonos a tomar una copa, no?- Sí, y además voy a escribir a Alba y la envio la ubicación para que se vengan cuando quieran, mientras más mejor- dijo María guiñandose un ojo a si misma.

'Albi, vamos a ir a tomar unas copas a los reservados del Harley, si os apetece ( a nosotras mucho) pasaros cuando querais, ahí estaremos'.

Alba leyó el mensaje en voz alta.

-Pues la verdad que parecen una chicas super majas, sobre todo María- dijo Marta mientras apuraba los últimos frutos secos que quedaban en la mesa. - Pues sí, la tal María también me cae bien a mi, parece que está un poco tarada, así que ya tenemos una cosa en común-. Todas rieron.

Cuando llegaron, el bar estaba lleno de gente en la parte de arriba, tanto que agobiaba intentar hacerse hueco. Famous pasó delante abriendose paso con su cuerpo. - Eh, Famous, tío,Famous- a medio metro un chico trataba de llamar su atención. Finalmente resultaron ser unos amigos de su antiguo equipo de baloncesto, con los que hacia muchisimo tiempo que no coincidia, así que con el beneplacito de sus amigos, decidió quedarse un rato con ellos con la promesa de que más tarde se verían.

 Abajo, en los reservados Natalia y las demás se habian acomodado en el más alejado acompañadas de una cachimba y unas copas

Natalia aspiraba lentamente el humo de la cachimba mientras revolvia su gin tonic hipnoticamente, moviéndose mentalmente entre todos sus pensamientos. Aquella noche su cabeza parecía una locomotora que no dejaba de dar vueltas a los últimos acontecimientos de su vida. Pensamientos que se pronto se vieron interrumpidos.

- Me ha parecido oir la voz de María al fondo- dijo Alba moviéndose hacia los reservados del fondo. Corrío la cortina granate que ocultaba el reservado, y asomó timidamente la cabeza. - Hola chicas-.

- Nena-, dijo María entusiasmada, -habéis venido, acercádose y dándole un nuevo abrazo a su amiga.

-Pero pasad, cariños, que aquí hay hueco para un regimiento-, dijo África.

El hueco más cercano era el que estaba al lado de la chica morena y septum en la nariz, que además habia deslizado su chupa hacia atras para que pudiera sentarse. - Hola- dijo Natalia mientras Alba se acomodaba, mirandola directamente con una amplia sonrisa. - Eh, hola de nuevo- contestó Alba que sin saber por qué se sintió algo nerviosa, apresurándose a sentarse rapidamente.

- Bueno, a ver, lo primero y más importante, ¿qué tomais? Kevin! María asomó la cabeza llamando a un chico que en aquel momento estaba preparando habilidosamente un coctel en una barra pequeña al fondo.- Ven cuando puedas a tomar nota a estas bellezas, por favor- Esté respondió asintiendo con la cabeza, guiñandola un ojo.

- Bueno, y Alba hace cuánto que os conoceis esta cabra loca y tú- dandole un codazo cariñoso a María. - Pues si no miento, hace más o menos 3 años, eramos unas adolescentes un poco moñas- riendo. - Ya te digo, menudas pintas épicas que llevabamos maja-.

- Pero bueno, fue amor a primera vista eh- dijo riendo. Natalia se giró momentaneamente hacia Alba mientras daba un sorbo a su copa. Observó con detalle a aquella chica de facciones dulces y mirada limpia. Se le antojó misteriosa e incluso, tal vez ¿atractiva?. Alba aguantó la mriada unos segundos para retirarla inquieta al momento.

- pues Albi- dijo María, - aquí mis amigas también son del mundo de la farandula-.

-¿de la farándula? hay que joderse-, dijo áfrica, riéndose. -Ni que fueramos del Salvame-.

- La traducción simultanea es que parece que todas aquí dedicamos algo de tiempo a la música-, dijo Sabela con su acento característico.

Natalia se rió con ganas. - Pero que tontas sois-. - Pues que sepais, dijo dirigiéndose a Alba y a sus amigas, que aquí a las mendas dijo señalando a Sabela y Afri, las han seleccionado para participar en un musical, y en lo que respecta a Natalia, lo está petando en redes, acaba de sacar un par de canciones y un videoclip que es la reostia-.

- Bueno, que exagerada por favor, ni caso,-, dijo Natalia mirando primero a Marta y luego fugazmente a Alba.

-¿Compones?, dijo tocando sin darse el cuenta el brazo de Natalia. - Bueno, en realidad lo intento- contestó mirándola nuevamente. - Escribir es una de las cosas que más me relaja en este mundo-.

- A mi me relajan otras cosas también- dijo María apurando la cachimba y provocando las risas del resto.

- Gracias María, dijo Natalia, - sin duda es un dato muy encesario-, exclamço divertida.

- A mi aparte de la música, lo que más me relaja en este mundo es dibujar- dijo Alba mirando a Natalia. ¿Por qué había soltado eso? Aquella chica era un completa desconocida, pero sentía que le apetecía hablar con ella algo más distendidas.

-¿Eres pintora?- dijo Natalia mirandola con los ojos muy abiertos. - Bueno, Alba rió nerviosa, en ralidad estudio Bellas Artes, y bueno dibujo desde que era chiquitita.

- Seguro que tienes mucho talento entonces- dijo haciendo que Alba se ruborizara. Menos mal que está lo suficientemente oscuro, pensó para si, para automáticamente pensar en la chorrada que acababa de pensar, ¿qué le importaba a ella ruborizarse por un piropo ante una extraña?. Ambas se miraron unas milisegundos en los que ambas concentraron su atención en los ojos de la otra, hasta que África rompió el hilo.

- Pues vaya, que buena conexión chicas- Natalia la fulminó momentaneamente con la mirada. ¿Qué tonteria había sido esa?,En fin, sacudió la cabeza, parecía mentira que se extrañará con las bromas de sus amigas, eso era lo menos que podían soltar en cualquier circunstancia. Alba por su parte miró a sus amigas que asistian a la escena la mar de divertidas.

-Bueno chicas, yo en mi línea pícara y con  mucho afán de animar más el cotarro, propongo que juguemos a algo-.

- Pues al yo nunca, que es un clásico- Soltó Noelia de lo más emocionada.

- Y de paso, nos embolingamos en tiempo record-, soltó Marta secundando la moción.

- Estas chicas me caen bien, definitivamente las amigas de la Mari, son nuestras amigas-, soltó áfrica provocando la carcajada general.

En esas estaban cuando apareció por fin el camarero para tomar nota a las rezagadas...





No sé si estoy escribiendo para la nada o hay alguien por ahí a quién le guste. En fin, si es así me gustaría que me lo hagais saber. Un besazo!!



La ausencia de la luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora