Capítulo 34

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POV MIA

Mi padre solo me observa, no puedo descifrar si está furioso o triste. Su rostro no demuestra nada.

Yo por mi parte siento que el corazón va a salir corriendo por mi boca. Tengo miedo.

- Di algo por favor- mi tono es de súplica.

- ¿Que quieres que te diga? ¿Que te felicite? - Responde mirándome con sus ojos azules acusatorio.

Está furioso.

- No. Por supuesto que no. - Digo tibuteando.

Estoy sentada en el sofá mientras mi padre está parado.

- Papá sé que estás odiandome-mis ojos se llenan de lágrimas.- Te juro que hubiese dado lo que fuera para no provocarte está decepción qué estás sintiendo- me lamento.

¿Cómo fuí tan estúpida en involucrarme con Paul? Siempre fue un idiota.

- Sólo eres una niña ¡Maldición Mía! Eres una niña!!!- Grita poniendo énfasis en «niña»

Yo estoy llorando. No quería que mis padres se enteren. Me asusta lo que me obliguen hacer. Maldito el día en que conocí a Paúl.

- No te preocupes...yo...Yo voy abortar- suelto.

Ya decidí que no tendré éste bebé.

-¡¿Qué?!- Abre los ojos como platos.

Se sienta en el sofá y empieza tirarse el cabello.

- Por Dios!! ¿Que hice mal?,- Se lamenta, haciéndome sentir como una mierda.- Grace querrá morirse.

- No me digas eso por favor- le suplico llorando.

No quería causarle dolor o decepciones a mis padres, pero mis decisiones equivocadas lo harán sufrir y lamentablemente no puedo evitarlo.

Bajo la mirada y lloro en silencio.

- ¿Quien es el padre de ese bebé?- Me pregunta mi padre con tono duro.

- No vale la pena.

- ¡¿Y si no valía la pena, por qué te acostaste con él?!- Me grita furioso mientras se pone de pie.

- Yo me enamoré de él... pero cuando se enteró que estaba embarazada, me insultó diciendo que el bebé no era de él- sigo llorando.

- Que bien los escoges...Ay dios- sus lamentos son como punzadas de cuchillos para mí corazón.

- Papá...lo siento. Perdóname por favor- no quiero hacerlo sufrir. No sé lo merece.

He decepcionado a mi padre. Puedo sentir lo decepcionado que está por mi culpa.

- De verdad intento pensar y preguntarme ¿Que hice mal?- Dice

- No me digas eso. Tu no hiciste nada mal. Siempre fuiste comprensivo, cariñoso. El mejor papá del mundo. Todo es mi culpa. - Quiero hacerlo entender que todo lo que me está sucediendo es mi culpa.

- En estos momentos no puedo encontrar las palabras adecuadas, pero si de algo estoy seguro y es tu no vas abotar esa criatura que crece en tu vientre.

- Papá...yo no quiero...No estoy preparada para ser madre- por favor papito entiéndeme.

- Pero si estabas preparada para tener relaciones sexuales y no cuidarte ¿Verdad? No Mía, si quisiste actuar como adulta, tendrás qué hacerle frente las consecuencias de tus actos.

Me quedo pasmada. Yo no puedo tener a éste bebé. No quiero.

- No me puedes obligar. Yo no quiero...

Anastasia; Mi Dulce DesafíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora