Anastasia; Mi Dulce Desafío

Capítulo 57

    POV ANASTASIA

Vuelvo de ver a Christian y estoy exhausta, y no por lo que yo quisiera... Si hicimos el amor, en realidad follamos pero sólo una vez, incluso me ató con su corbata, después comimos pizza, por qué yo le supliqué. Christian, no es de comer pizza, pero hizo una excepción por mi. Después Christian me tuvo estudiando, de verdad... Me explicó cálculo y algo de contabilidad. Después me ayudó con un resumen de legislación laboral y me hizo correcciones en un ensayo de literatura.

No entiendo porqué me presiona tanto con los estudios si todo eso lo debo entregar hasta la próxima semana, pero lo veo necesario por qué así cuando vuelva a una de sus “tutorías” podremos estar juntos.

Afortunadamente la pedófila no estaba cuando llegué.

Me doy una ducha, me cambio de ropa y me tumbo sobre la cama con la Mac que Christian me obsequió para hacer los deberes y recuerdo lo que escuché sobre el salón de belleza de Elena. Como no escuché el nombre del local, busco a través de la página de la empresa de Christian. Entro y me encuentro con la agradable sorpresa de que en la página principal aparecen los nombres de cada filial de su gran conglomerado.

Editoriales...

Astilleros...

Empresas automotrices...

Procesadores de alimentos...

Transporte de alimentos...

Continuo buscando y ¡bingo! La encontré.

Belleza y cosmética natural.

Doy click y me envía a otra página.

ESCLAVA
“For The Beauty That Is You”

Vaya nombre que le puso a su local... Cómo si la mataperros fuese tan bella.

Doy click en donde indica “catálogo de productos y servicios”; espero que cargue la página y me encanta lo que veo, todo esto es una línea de cosméticos muy moderna, pero sobre todo, ecológica. Apegado a los principios de Christian.

Continuo mirando hasta que toca la puerta la empleada de Elena y me avisa que la comida está lista. Bloqueo la Mac y voy tras ella pidiendole a Dios que hoy pueda comer algo más decente.

Me acomodo en el mismo sitio de ayer y espero a que Elena venga a sentarse.

¿Cuánto tiempo tendré que esperar a la reinita de Narnia?

— ¿A qué hora regresaste?— Me sobresalto. Está bruja quiere matarme de un infarto.

— Alrededor de las cinco ¿Por qué?— Exactamente regresé cerca de las siete de la tarde.

— Ya veo— su majestad se sienta y al hacerlo; sale la empleada con dos servicios. Hoy comeremos polenta con salmón asado. Se ve mucho mejor que el puré o sopa, o vaya a saber la porquería de entrada de ayer.

Le doy un bocado y admito que está muy bueno.

—¿Qué tal fue la tutoría?— Pregunta fingiendo interés.

—Excelente.

— Christian me informó que tienes expediente con el psiquiatra John Flynn, que también tomarás clases de música y me entregó tus horarios de clases, calendario de actividades y los números de contacto de tus tutores.

— Lo sé.

—Descuida, solo trato de ser una buena tutora. — ¿Buena tutora? Si para lo único que sirve es para chupar...

¡Anastasia! Me riño a mi misma por pensar mal.

Siento asco al imaginar a Elena y sus cochinadas. Seguramente es experta.