Capítulo 39

4.5K 522 39
                                    

      POV  ANASTASIA

Taylor estaciona enfrente de un enorme y lujoso colegio.

— Dime que estarás bien— me dice Christian y me da un beso en el dorso de la mano.

— No te prometo que estaré bien, pero lo intentaré— le respondo nerviosa.

Estoy nerviosa, mis manos están sudando y mi estómago pareciera tener un nudo.

Christian toma mi mano con fuerza y me hace mirarlo a los ojos.

— Pórtate bien— me dice.

— Trataré— finjo una sonrisa.

Ok Anastasia, te vas a comportar como toda una señorita. ¿Debería fingir ser una niña fresa? No, las odio. Sólo debo ser yo misma, pero controlar mi lengua viperina. Además, yo tengo una educación, y aunque estuve viviendo tres en las calles, no debo de olvidar que mi padre hizo todo lo posible por darme la mejor instrucción académica además de mi educación en casa.

Así que debo de mostrar eso que mi padre me inculcó de forma férrea y devota, lo mejor de mi.

Christian sale del auto y se acerca a mi puerta para ayudarme a bajar. Me da el brazo y se dirige conmigo al interior del instituto.

Es un edificio rústico de ladrillo visto. Entran y salen personas, y Christian con cuidado, pero sin dejar de ser cariñoso me toma de la cintura para llevarme al interior. De pronto encontrarnos a Mia y sus padres.

—Hola, mamá, papá. Hola hermana— los saluda. Con cierto recelo.

—Hola, cariño— le responde Grace, se gira a mi y me da un abrazo y un beso— hola Ana. Me da gusto saber que volverás a estudiar.

—Es algo que me corresponde darle mientras esté a mi lado... Digo, bajo mi custodia— dice Christian.

—¿Cómo has estado, Mia?— le pregunto al verla algo decaída.

—Bien, o eso creo...— Responde mi amiga mirando a Grace, pero ella la ignora.

Creo que las cosas no están nada bien.

—Cierto. ¿Qué hacen aquí?— pregunta Christian.

—Con o sin bebé, Mía debe continuar con su educación, y mientras su embarazo esté controlado y cuidado, así debe ser— sentencia Carrick serio.

—Vinimos a dejar su historial clínico al director y de paso a saber quién es el jovencito con el que Mia estuvo saliendo...

—Si. Queremos que se hagan responsables ambos—

Christian y yo nos ponemos nerviosos por que no creo que el imbécil de Paul Clayton tenga intención de responder, menos después del desastre que armamos Christian y yo en su casa.

—Pues...

—Christian y Taylor me van a acompañar a la dirección. Necesitamos mi horario de clases y de ser necesario voy a tomar tutorías para ponerme al corriente. ¡Vamos, Christian!— le digo y tiro de su brazo.

Unos metros más adelante llegamos a la puerta de la dirección, mira y sonríe.

—Gracias.

—¿Porqué?

—Porque casi me da una apoplejía... No soporto que mencionen al imbécil que le faltó el respeto a mi hermana.

Quisiera decirle que Mía, fue quien le dió su consentimiento al imbécil para que le falte el respeto. Pero decido morder mi lengua y guardar silencio.

Anastasia; Mi Dulce DesafíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora