Anastasia; Mi Dulce Desafío

Capítulo 46

POV ELENA

Me dirijo a Bellevue, y al llegar me encuentro un vehículo de la policía y otro más de servicios infantiles, me estaciono y en ese instante veo que Anastasia sale del vehículo con una gran maleta y un portatrajes con las iniciales de Christian bordadas sobre él.

-Buenas tardes, señoritas- saludo con fingida educación

-Buenas tardes, señora Lincoln. Le tragimos a su protegida. Ella es Anastasia Steele.

La chica me mira y su expresión no revela nada.

Antes de responderle aparece el Audi de Christian. ¿Que demonios hace él aquí? Observo como el Audi se detiene y del él se baja Christian con su elegancia de siempre. Elegancia que me encanta. Inmediatamente me acerco a él.

- Christian Grey- a pesar de no esperarlo siempre es un gozo ver a este hombre tan guapo y sensual.

- Elena Lincoln- me tiende su mano

¿Por qué me tiende su mano, si yo siempre lo he saludado con un beso en la mejilla? A regañadientes tomo su mano.

- ¿Has venido a corroborar que tú pequeña delincuente no se escape?- Susurro mirando a la mocosa que me mira con mucha atención.

Domesticar a la pequeña delincuente será interesante.

- He venido a corroborar que se instale, y a decirte que ni se te ocurra hacerle algo malo- su tono de voz es amenazante, tanto así que me sorprende.

- No te entiendo querido. -

- ¿Que es lo que exactamente no entiende?- Honestamente antes no te referías a mi con tanta valentía, me asombra que por culpa de esa mocosa te estés dándote de héroe, pero por ahora te dejaré pasar esa falta de respeto, muy pronto volverás ser mío, y ahí me las cobraré. Ya verás la paliza que te daré para luego follarte hasta saciarme de ti.

- Te preocupas por ella, pero la has echado de tu casa... Debió sacarte de quicio.

- No la eché, un estúpido juez la obligó salir de mi casa- ya entiendo

- Señora Lincoln, ¿Podemos ingresar a su casa?- Me dice la mujer de servicios infantiles

- No, no pueden- obviamente esta gentuza no va ingresar a mi casa.

- Hay unas cosas que debemos mencionarles y supongo que usted no pretenderá que lo hagamos aquí.

- Si no hay otro modo, pues entremos.- Lo que tengo que soportar por culpa del mugroso que vendía comida para estúpidos y pobretones.

Entro a mi casa seguido por la pequeña delincuente, Christian, y la gente de servicios infantiles.

- Si no le molesta debemos ver las habitaciones.

- ¿Y eso por qué?- Le pregunto molesta, no me gusta que invadan mi privacidad.

- Debemos ver el dormitorio donde dormirá Anastasia.

Miro a la mocosa. No le daré una habitación decente a esta mugrosa que debe estar llena de piojos en la cabeza.

- Mi ama de llaves no ha arreglado los cuartos, pero no sé preocupen, ella tendrá una habitación que merezca- creo que tengo una habitación donde dejo las cosas que ya no sirven, aún así es demasiado para esta delincuente.

- Está bien, pero dentro de esta semana vendremos a verificar en las condiciones que usted tendrá a la menor- la mujercita saca un portafolio - la menor Anastasia Rose Steele, seguirá yendo al colegio pero eso es obra del señor Grey- seguramente es el colegio más caro. Demasiado para esta marginal.