Yui trató de no mirar a Asaki durante todo el camino. El modelo, pese a llevar unas gafas de sol y un gorro negro que, aunque disimulaba su aspecto, no impedía ser bastante llamativo, no borró la maldita sonrisa que para opinión de Yui podía haber significado cualquier cosa. Puede que fuera ese mismo hecho, el que no sabía a qué se debía exactamente la sonrisilla permanente en los labios de Masato lo que le hacía que se sintiera irritado. Aunque ni siquiera eso consiguió que la ansiedad se borrara mientras iban acercándose a casa de Asaki.
—¿Qué ocurre?
—¿Hm?
Yui se puso a la defensiva y miró a Asaki desconfiado. Se habían parado frente a una tienda de comida abierta las veinticuatro horas.
—Pareces tenso.
—¡No estoy tenso!
—¿Entonces nervioso?
¿Había ampliado la sonrisa? Yui entrecerró los ojos.
—¡Tampoco estoy nervioso?
Asaki lo miró un omento tras las gafas de sol, bajándolas un momento, lo justo para que sus ojos dorados se encontraran con los suyos y volvió a ajustárselas.
—Oh, bien.
Yui puso mala cara y siguió a Asaki al interior del establecimiento.
—¿A qué venía eso? —murmuró, mirando de reojo a unas chicas que iban a pagar y se detuvieron a mitad de camino para mirarlos, especialmente deteniéndose en Masato—. ¿Por qué debería estar nervioso?
Era un más bien, ¿por qué le seguía el juego? Era obvio que Asaki lo estaba haciendo para fastidiarle, y él, aún así, seguía detrás de él... Yui hizo una nueva mueca, aún más irritado que antes y giró la cabeza para mirar cualquier otra cosa que no fuera su espalda pero se encontró con las chicas que se habían puesto a mirar tras el disimulo que ojeaban unos mangas al modelo, cuchicheando entre ellas muy emocionadas. Yui no supo que cara debió poner en ese momento, ni siquiera le importó si realmente habían reconocido o no a Asaki, pero lo que las chicas vieron al mirarle no debió de ser muy agradable porque apartaron la mirada bruscamente y alarmadas dejaron bruscamente los tomos en las estanterías y se apresuraron a pasar por caja.
—¿Qué estás haciendo?
Yui se giró rápidamente para enfrentarse a Masato con una sonrisa, preocupado de que pudiera haber notado su reacción al ver el interés de las chicas hacia él.
—Nada.
Los ojos del modelo se entrecerraron lentamente y la sonrisa de Yui se congeló, sintiendo un sudor helado por la espalda.
—¿Nada...? —Asaki miró por encima de su hombro y luego volvió a mirarlo—. Vale, ¿qué ocurre? Ahora en serio.
—No sé a que te refieres.
Joder. Acababan de hacer las paces... no... acababa de descubrir que Asaki, de los propios labios del modelo, lo quería, que después de todo sus sentimientos no eran unilaterales y no había tardado ni media hora en volver a cometer el mismo error. ¡Eso iba muy mal!
—Nada dices, pero, ¿sabes cuántas veces te he visto sonreír?
¿Había reproche en su voz?
—¿Qué?
¿Sonreír? Yui parpadeó confuso y trató de pensar detenidamente los momentos en los que hubiera sonreído estando con el modelo y mientras repasaba su relación con Asaki desde que se habían conocido, la idea le hizo desviar la mirada hacia otro lado, borrando la sonrisa congelada muy lentamente, como si hacerlo estuviera completamente fuera de lugar.
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Eternidad (chico x chico)
Teen FictionMasato Asaki es un famoso modelo internacional que acaba de trasladarse al instituto de Yui. Al principio el modelo muestra una imagen y una forma de ser perfecta y encantadora, haciendo que Yui, al igual que todas sus fans tengas una idea muy equiv...