Lo primero que Christopher Vélez vio a la mañana siguiente cuando abrió los ojos fue una mata de cabello castaño sobre él. Se removió un poco percatándose de un dolor pulsante en la espalda. El olor a uva se coló por sus fosas nasales y una risita llenó el aire.
—Buenos días, Christopher—saludó Charlie lanzándole una pequeña sonrisa. Christopher la observó un momento antes de que la niña se sentara a su lado y dejara un beso sobre su mejilla. Rio y se cubrió más con el edredón provocando que la niña se echara a reír.
—Buenos días, amor...—murmuró él sonriéndole débilmente.
—¿Puedo faltar al colegio?—cuestionó rápidamente. Él la observó y luego negó.
—No hay razón aparente para que usted señorita...—comenzó y luego se quedó callado percatándose que no tenía idea del nombre completo de su propia hija—usted señorita Charlie falte al colegio...
—Pero eres mi papá y me puedes dar permiso de faltar...—anunció ella sonriéndole.
—Charlie...
—¿Si te doy un beso me dejas faltar al colegio?—cuestionó mirándolo a los ojos. Christopher entrecerró sus ojos y sonrió.
—Eres una manipuladora en miniatura. Vamos a ver...—susurró. La niña rio y luego se inclinó sobre él para de dejar otro beso sobre su mejilla. Christopher la abrazó y ella soltó una carcajada pareciendo completamente feliz. Dejó muchos besos en las mejillas de la pequeña y luego la miró a los ojos.
—¿Me vas a dejar faltar al colegio, Christopher?—preguntó.
—No—respondió él.—tienes que ir al colegio, además...tu mamá va a enfadarse conmigo si te doy permiso para que faltes...y uno no puede faltar sólo porque si...
—¿Mi abuelita Yenny te dejaba faltar al colegio?—cuestionó la pequeña sin salir de los brazos de su padre.
—No—respondió automáticamente.—sólo faltaba cuando estaba enfermo...
—Pero estoy muy enferma, Christopher—murmuró apoyando su cabeza en el pecho de Christopher. Él se echó a reír de inmediato.
—Eres una tramposa—se burló.—Uno no se enferme en una fracción de segundo...—la miró un momento—¿Por qué no quieres ir al colegio...?
—Porque me quiero quedar contigo y con mi mamá...
—Pero eso lo puedes hacer cuando vuelvas del colegio—le dijo él sonriéndole.—Ahora tienes que ir y ser la niña inteligente que eres, además... ¿vas a dejar a Mafe sola?—cuestionó sin dejar de observarla a los ojos.
—Christopher... ¿Por qué te fuiste de viaje tanto tiempo?—soltó de repente. El corazón de Christopher se aceleró y cerró sus ojos un momento.
—Charlie...
—¿Mi mamá y tú eran novios?—cuestionó.
—Si—respondió él.
—¿Entonces por qué no te la llevaste contigo? Mi papá Erick fue de viaje a Cuba con mi abuelita Daysi y se llevó a mi tía Alyssa—le explicó.—¿Por qué no te llevaste a mi mamá a tu viaje contigo?—Christopher apartó la mirada un momento.
—Porque fui muy tonto—susurró.—No pensé en ella...
—¿Y por qué no pensaste en ella?—preguntó de nueva cuenta.
—Es decir, pensé en ella pero no de la manera en la que tendría que haberlo hecho...—murmuró.—Por eso me tardé mucho en volver y conocerte...de verdad lo lamento, mi amor. Tú no tenías la culpa de nada de lo que pasó, Charlie y fuiste quién pagó las consecuencias de mis actos...
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ÉXTASIS(Éxtasis #3)|C.V.|Completa.
FanfictionLIBRO UNO: ADRENALINA. LIBRO DOS: OPIA. LIBRO TRES: ÉXTASIS. _ _ _ _ _ Sólo el latido al unísono del corazón puede crear el éxtasis.-Anaïs Nin.