ÉXTASIS(Éxtasis #3)|C.V.|Completa.

C35: Bebés.

Danna se echó a reír cuando Christopher dejó besos por su cuello. Él la observó un momento antes de buscar sus labios y dejar un largo beso sobre ellos. Ella pasó sus manos por su cabello despeinándolo un poco en el proceso pero a él eso era lo que menos le importaba en ese momento.

Todo lo que le importaba era la sensación que estaba recorriendo su cuerpo entero en ese momento. El cosquilleo que las manos de Danna le provocaban era la cosa más increíble que había sentido una vez en su vida.

Lo besó dulcemente por unos minutos hasta que un nuevo sentimiento que la hacía querer ir por más volvió a embargarla. Otra vez. Igual que la primera vez. Se aferró al cuello de Christopher sin dejar de besarlo un solo segundo y él soltó un leve jadeo de sorpresa.

—Te amo...—murmuró él apartándose un poco para respirar correctamente.—No tienes ni idea de cuantas veces soñé con esto, Dan...

—Te amo más...—musitó llevando su mano derecha a la mejilla de Christopher para proporcionarle pequeñas caricias que fueron directamente al corazón del castaño.

—¿Sabes que puedo parar en el momento en el que tú lo quieras, cierto...?—cuestionó él besándola fugazmente.

Danna cerró sus ojos un momento.—No quiero que pares...nunca...

—Quiero tener un bebé...—musitó Christopher y Danna automáticamente soltó un gemido de sorpresa. Se apartó un poco para poder mirarlo a los ojos.—Sé que ambos tenemos muchas metas individuales...lo sé, de verdad pero no me refiero a justo ahora...—murmuró.—Quiero que tengamos un bebé, Dan...quiero estar presente en todo momento, no separarme de ustedes un solo segundo ¿sabes...?—hizo una pausa.—Y sé que puede sonar demasiado apresurado pero si no estuviese seguro no te lo estaría diciendo...

Danna se quedó quieta observando la fina cadena de oro que pendía del cuello de Christopher. Llevó su mano hasta el dije entre ambos cuerpos y lo acarició lentamente.—Aun la llevas...—susurró lentamente.

Una extensa sonrisa se instaló en los labios del castaño y asintió de inmediato.—Nunca me la he quitado...—confesó.—Era una manera de sentirte cerca ¿sabes...?—murmuró.—Era una manera de tenerte a mi lado y de llevarte conmigo siempre...

—¿Recuerdas el dije que tú me regalaste en navidad...?—cuestionó en un hilo de voz.

—Perfectamente bien...

—Se lo regalé a Charlie...—anunció.—Era una manera de que ella estuviese cerca de su padre incluso aunque ella no fuese consciente de eso...—le explicó.—Y ver que sigues llevando la misma cadena con el dije que yo te regalé es...—cerró sus ojos un momento y negó esperando que las lágrimas comenzaran a correr libremente por sus mejillas.—Definitivamente eres el hombre con el que quiero pasar el resto de mis días y con el que quiero formar una familia...

Christopher le sonrió ampliamente volviendo a besarla castamente.—¿Una familia de cuantos niños...?—preguntó a modo de broma.

Danna volvió a acariciar su mejilla con lentitud provocándole sensaciones únicas.—Diez...—él rio.—Pero creo que por el momento me puedo conformar con dos...

—¿Dos...?—repitió Christopher con un poco de incredulidad hasta que su cerebro nublado por tantas sensaciones fue capaz de comprender el mensaje de Danna.—¿Eso quiere decir que...?

—Que quiero tener un bebé contigo...ahora mismo...

—¿Qué...?—susurró él.—Dan...

—Creo que es momento, señor Vélez...de convertir a Charlie en hermana mayor...—musitó uniendo sus labios con los de su prometido.