ÉXTASIS(Éxtasis #3)|C.V.|Completa.

C19: Familia feliz.

—¡Hola, Jaeleen!—saludó Charlie en cuanto la vio entrar en el departamento de Christopher. La chica le ofreció una pequeña sonrisa y luego avanzó hasta ella.

—Hola—respondió.—Lamento la tardanza pero tenía que hacer algo primero...—le dijo y Charlie soltó un pequeño suspiro.—¿Y Chris...?

—Mi papá y mi tío Alexander salieron; dijeron que tenían cosas que hacer en la empresa de mi papá...—anunció la niña encogiéndose de hombros.

—¿Lista para jugar?—cuestionó la rubia. Charlie asintió y se puso de pie con una muñeca en la mano.

—Mira; ella es Clark, la reina de las ninjas—anunció mostrándole una muñeca de cabello negro.—Y ella es Ritchie, la reina de las futbolistas...—agregó pasándole una muñeca de cabello rojo intenso y ojos azules.

Jaeleen frunció las cejas y negó un poco.—¿Ninja y futbolista?—cuestionó la muchacha.—Me gusta más una princesa...

—¡No!—le reprochó la niña.—¡Ella es Clark y es una ninja y ella es Ritchie; la futbolista!—repitió de nueva cuenta.

—Como sea—respondió Jaeleen en voz baja.—De todos modos no son tan lindas como para ser princesas...—anunció.

Los ojos de Charlie se abrieron con sorpresa y negó un poco.—¡Son lindas!—replicó cruzándose de brazos.

—Tengo una idea—le dijo la rubia y Charlie suspiró enfadada.—Vamos a maquillarnos...

—¡No! Mamá dice que las niñas pequeñas no se maquillan...—le dijo Charlie y automáticamente los ojos de Jaeleen la fulminaron.

—Mira Charlotte...

—¡Charlie!—le reclamó la pequeña.

—Como sea...no seas una niña insoportable y has lo que se te ordena...porque si no lo haces vas a ser una mocosa insolente e insoportable que nadie va a querer, incluido Christopher ¿si entiendes eso, verdad?—estalló la rubia.—¿De verdad quieres que Christopher te deje de querer...?

Charlie la miró un momento.

—Perdón, Jaeleen...—susurró.—Está bien, vamos a jugar a lo que tú quieras...—agregó lentamente.

—Eso es perfecto...—respondió.—Voy por el maquillaje a mi habitación, ya vuelvo...

Cinco minutos después Charlie se quedó completamente quieta observando fijamente el montón de maquillaje que tenía frente a ella encima de la mesa de la sala. Tomó un cilindro negro y lo examinó minuciosamente.—¿Qué es esto, Jaeleen?—preguntó y los ojos azules de la rubia se posaron en ella.

—Se llama delineador y es para hacer que tus ojos resalten...—le explicó.—Primero yo te voy a maquillar y espero que después de esto comprendas que las niñas son niñas y hacen cosas femeninas como bailar, cantar, jugar con muñecas y ese tipo de cosas pero no van por la vida actuando como un niño salvaje y jugando fútbol...—replicó.

—¿Y qué tengo que hacer?—cuestionó Charlie sin dejar de mirarla.

—Sólo sentarte ahí y no moverte para nada...

—¿Y después yo puedo maquillarte...?—inquirió la pequeña jugueteando con una brocha.

—Claro que si...

(...)

—Entonces... ¿qué es lo que pasa?—cuestionó Christopher tomando asiento junto a Zabdiel. Richard lo observó un momento y dejó escapar el aire de sus pulmones.