Apartamento Compartido II

Volviendo a su ser

Hago una ligera reverencia ante el director de la empresa en la que trabajaré a partir del jueves y salgo de su despacho encontrandome con su secretaria. Es una mujer de mediana edad que no duda en levantarse para sonreirme de manera coqueta.

-Abarai kun, ¿que tal te ha ido?

-Bien.- Le digo de manera cortés aunque marcando algo las distancias.- Al fin de cuentas, no era una entrevista de trabajo sino una presentacion para unas practicas.

-Seguro que lo haces tan bien que te contrata cuado termines las practicas.

-Sería un honor sin duda.- Le digo haciendo una ligera reverencia antes de despedirme y alejarme.

No es que no me gusten las mujeres, tengo amigas con las que me he llevado muy bien en Tokyo. Lo que no me gustan son las mujeres que intentan ligar conmigo. Se que no es su culpa, no llevo un letrero en la frente que diga "me van los tios" pero aun así, es molesto ver como lanzan miraditas o sonrisas a la espera de que uno reaccione como estan acostumbradas.

Camino por los pasillos que he recorrido hace poco con el director y me siento algo confuso.

-Creo que me he perdido.- susurro suspirando.

Tenía que haber prestado mas atencion a las indicaciones del director o al menos, hacia donde giraba en cada pasillo. Tras unos minutos veo el cartel de vestuarios en una puerta y suspiro esperanzado en poder encontrar a alguien que me indique la salida. Entro y escucho algunas duchas y algunas voces. Camino entre las taquillas y en cuanto veo a uno de los chicos que estan hablado abro los ojos sorprendido.

-¿Hyorinmaru?- En cuanto el novio de mi amigo Tensa se gira y me ve sonrie tras unos segundos.

-Nova... ¿que... que haces tu aqui?- Se acerca sonriendo y me abraza casi sin darme posibilidad a evitarlo.

Desde siempre he sido alguien poco dado a las muestras efusivas de afecto, tan solo con mi familia no podia evitarlo pero me ha cogido de sorpresa. Cuando se separa tras unos segundos veo como me mira incredulo.

-Vaya... ¿cuanto hacía que no nos veiamos?

-Creo que desde el verano.

-¿Tensa sabe que estas aqui?

-Si. Hablé ayer con él.

-Pues tuviste suerte.- Dice con cierto tono de reproche.

-¿Estais... bien?

-Si. No me hagas caso. Acabo de salir del turno de noche y ya sabes, necesito dormir.

Yo voy a contestar algo condescendiente antes de preguntarle lo que realmente me interesa cuando veo aparecer por su espalda al hombre que menos esperaba ver. Todo mi cuerpo se queda paralizado cuando sus ojos rojos se abren fijos en mi y no puedo evitar bajar mi mirada por su torso desnudo. Dios, solo lleva una toalla y puedo ver cada una de las gotas que bajan por su piel. En cuanto Hyo mira hacia atras y lo ve y vuelve a mirarme, desvío la mirada sintiendo como me arde la cara. Mierda... yo no esperaba verlo tan pronto y menos en estas circunstancias.

-Nova...- Su voz me hace volver a mirarlo y veo como su expresión es totalmente calmada, igual que las pocas veces que lo he visto en estos años.

-Hola... Mugetsu...

-¿Que haces aqui?

-Yo... estaba... había venido para presentarme al director pero... me he perdido...

-¿Vas a trabajar aqui?- Dice con algo más de asombro.

-Solo voy a dar las practicas.- Digo tragando e intentando que los ojos no se me vayan de nuevo a su cuerpo.