Bajo sospecha

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Vuelvo a descargar mi puño contra el rostro del tuerto propietario del sitio donde violaron a mi hijo y este jadea sin apenas fuerzas. Cuando Tetsu me trajo el video de la violación, no sabía si iba a ser capaz de verlo pero tras un par de días, me decidí y la verdad es que fue lo más duro que he tenido que ver en toda mi vida. Ver como esos hombres le iban haciendo todas esas cosas, como mi hijo intentaba luchar hasta que le robaban la razon y la voluntad, ver como disfrutaban vejandolo, haciendolo suplicar por mas... eso es algo que jamas podre borrar de mis retinas pero, estoy seguro de que mi hijo, jamas, por mas tiempo que pase, por mas feliz que llegue a ser, sé que jamás lo olvidará. Ahora comprendo más su sufrimiento y reticencia a querer ver los videos de Tetsu o a hablar del tema. Esto es demasiado para cualquiera.

Hace un par de días, decidimos comenzar a pillar a todos los cabrones que le hicieron eso a mi hijo pero creí conveniente comenzar por el menos implicado. Stark está llevando suficientemente bien lo de saber quienes le hicieron toda esta atrocidad. Segun me contó, el mismo día que atropellaron a Zangetsu, ellos habían hablado y mi primogenito le había aconsejado que no se dejara guiar solo por la ira y la sed de venganza. Tenia que mantener la mente fria y actuar solo cuando realmente se lo pidiera el cuerpo y por lo que me he podido percatar, solo hay dos a los que realmente les tiene ganas.

-Señor.- La voz de Tetsu me hace levantar la cabeza y mirarlo junto a la puerta de este almacen que he comprador recientemente. Una inversion para el placer de la venganza.

-¿Que ocurre?

-Tengo un problema con el otro individuo.- Dice limpiandose las manos de lo que sé con seguridad que es sangre.

-¿Que pasa?¿No quiere hablar?

-En realidad... el problema no es ese señor.- Dice desviando la mirada lo que comienza a molestarme.

-Termina tu con este. Ya le he sacado todo lo que quería. Que se largue de la ciudad, si lo ve alguno de tus hombres que le hagan desaparecer.

-¿No le va a hacer nada más?- Dice sorprendido.

-No. Es tal como dijiste. En realidad no sabía de que iba el tema pero participó incluso cuando comenzó a sospechar de que no era lo que le habían vendido y eso le ha costado perder lo que más le importa... su empresa y su vida aqui.

Salgo de la habitación y entramos en otra contigua. Tetsu me deja pasar y en cuanto entro y huelo el ambiente entiendo un poco lo que me quería dar a entender Tetsu.

-Este tipo... cada vez que lo golpeo para sonsacarle algo sobre sus hermanos, termina corriendose.

Abro los ojos asqueado mientras el tipo me mira con sus pequeños ojos oscuros. Tiene el pelo revuelto y sangre en la boca y nariz. Si darle una paliza solo le produce placer... no tiene sentido seguir haciendolo. Necesito algo que le haga hablar y creo tener justo lo que necesito. Me acerco intentando no pisar ningun rastro biologico de este despreciable ser que me mira estirando una siniestra sonrisa.

-Ah... tu tambien me vas a dar una paliza... joder... con esas manos tan enormes debes dar unas hostias de escandalo...

-Ni por todo el oro del mundo lo haría... a menos que a cambio de mis golpes, me digas como ideasteis la violacion de mi hijo.

En cuanto menciono ese asunto, veo como abre los ojos y me mira poniendose más serio.

-No sé de que me hablas. Yo no he violado a nadie.

-Eso es cierto. No lo violaste... tu solo lo drogaste y distes las pautas para que tus hermanos lo hicieran ¿no?- Veo como entrecierra los ojos. No es tan tonto como pensaba.- Está bien. No importa.- Le digo torciendo una sonrisa aun más siniestra que la suya. Dentro de poco, lo que tanto placer te proporciona, se convertirá en tu perdición.- Puedo notar su inquietud cuando me alejo de él mirando a Tetsu.- Llama al doctor Kurotsuchi.- Le digo viendo como Tetsu abre sus ojos.

Apartamento Compartido IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora