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- Joder macho - dice Rafa enfadado al oír el portazo que da Marc yéndose de la casa - ¿soy muy imbécil no? - me pregunta.

- Los dos lo sois un poco, deberíais hablar del tema - le recomiendo.

- Tienes razón - me dice acelerado - eres una genia - me da un beso en la frente antes de irse corriendo por donde se había ido anteriormente el alemán.

Teniendo en cuenta que los dos se habían ido decido salir de su habitación porque poco pinto ya.

La casa parece vacía, no encuentro por ningún lado a Marco y los niños y Sergi se que no están porque se han ido pronto a jugar fuera, debería haber ido con ellos.

Pensándolo mejor aún estoy a tiempo, así que voy a la habitación de invitados a cambiarme.

Me pongo una blusa rosa amplia y unas mayas negras, para ir cómoda sin que se vea mucho mi enorme panza.

- ¿Vas a salir? - me preguntan desde atrás mientras me intentaba hacer una trenza de espiga.

- ¿Donde estabas? - pregunto preocupada

- En la terraza hablando por teléfono - me contesta sentándose en la cama - ¿Vas a salir? - me vuelve a preguntar.

- Si - contesto - ¿y se puede saber con quien hablabas? - pregunto arqueado una ceja.

- Con el presi - me contesta y ahora entiendo un poco por donde ha ido la conversación, seguro que le llamaba para echarle en cara que se pusiera la camiseta del barça en público - ¿y a donde vas? - me vuelve a preguntar.

- Como creía que me había quedado sola iba a ir a buscar a los niños y a Sergi - le explico. 

- Bueno pero ya ves que sola no estas - me dice sonriente señalando el espacio vacío a su lado en la cama.

- ¿Te ha regañado mucho? - le pregunto sentándome a su lado.

- Pues... lo normal teniendo en cuenta que me he puesto la camiseta del eterno rival - me contesta simple - quiere que de un comunicado o una entrevista diciendo que me arrepiento de habermela puesto o aclarando que del Madrid no me voy.

- Es comprensible - contesto sincera.

- Ya... pero paso, los verdaderos madridistas habrán entendido porque me la puse, así que no creo que les deba ninguna explicación - me contesta.

- Si lo prefieres puedo ir contigo a esa entrevista y si es necesario me pongo la camiseta del Madrid - contesto sincera, no me apetecía mucho la verdad, pero era lo mínimo que podía hacer.

- Van a pensar que estamos locos - me dice divertido.

- Y lo estamos - contesto y aclaro - estamos locos de amor.

- Tienes razón - me dice sonriendo ampliamente.

Estoy agotada así que termino por desistir de mi idea de salir y me tumbo a su lado en la cama. 

- ¿Cómo les ha sentado la noticia a los chicos? - me pregunta curioso.

- Fatal, se han peleado y todo... bueno más bien han tenido un intercambio de opiniones que ha hecho que se enfadaran - le explico.

- ¿Su primera pelea como pareja? - me pregunto y asiento - que monos ¿recuerdas nuestra primera pelea? - me pregunta curioso.

- Pues no la verdad, hemos tenido millones de discusiones, incluso las teníamos antes de ser pareja - contesto sincera.

- Al principio era excitante - me dice divertido.

- Para ti todo es excitante, para mi era muy irritante - añado divertida.

- ¿Sabes que es lo que más me excita?  - me pregunta acercándose a mi boca.

- ¿El que? - pregunto curiosa.

- Tenerte en la misma cama con ese pedazo de escote - me contesta mordiendose el labio y pasando su mano por mis caderas.

- ¿Y sabes que es más excitante todavía? - le pregunto imitando lo que había hecho anteriormente.

- ¿El que? - me pregunta curioso.

- Tenerte en la misma cama y en bóxers - contesto sonriendo pícara tirando del borde del bóxer.

- Aprovechemos que por fin nos hemos quedado solos - me propone Marco lo que ambos estábamos deseando.

En cuestión de segundos estamos el uno sobre el otro besándonos apasionadamente.

Lamentablemente nuestro momento se ve interrumpido por el móvil de Marco, pero este lo ignora.

- ¿No lo vas a coger? - pregunto.

- Estoy ocupado - dice mientras me deja besos por todo el pecho.

- ¿Y ni siquiera vas a ver quien es? - pregunto curiosa - Igual es importante.

- Es Florentino - me contesta enseñándome la pantalla - será por lo mismo que antes y no me apetece hablar de lo mismo.

- Vale - contesto intentando no darle importancia.

- ¿Por donde íbamos? - me pregunta sonriendo.

- Por aquí - digo besando su torso desnudo.

Cuando conseguimos retomar por donde íbamos, vuelve a sonar su móvil.

- Pff voy a ver que quiere - dice y aunque parece que le está llamando Florentino de nuevo, se que no es así porque el número que le está llamando ahora ni siquiera esta agendado.

¿Por qué me estas mintiendo de nuevo? Me pregunto mientras le veo marcharse de la habitación para que no oiga la conversación.

Enamorada del 20 (Marco Asensio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora