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Agosto 15, 2017
16:59 Pm 

Evee se pone de pie en cuanto nos ve dirigirnos a la mesa. No despego la vista de ella en ningún momento, cautivado por su increíble belleza. Va con un vestido blanco que le llega a la mitad de las piernas, unas zapatillas a juego y una chaqueta de jeans por sobre ella. Hermosa con lo que sea que se vista. Me volteo a mirar a mi amiga a mi lado, y me veo tentada a ponerlas una junto a la otra para hacer un cara y sello. Esta última parece que hubiera sido obligada a salir de su casa en pijama. Lleva unas calzas deportivas, una sudadera de Kylan y un gran moño desordenado sobre la cabeza. La verdad tampoco la culpo, está haciendo su máximo esfuerzo por salir adelante con todo lo que sucedió. Enfrentar al mundo exterior después de perder a su hermano y a tantos amigos así como así no es nada fácil. Sumándole a eso, está el hecho de que sin importar que, sus hijos no dejan de crecer, no se detienen por nada, y cada dos días la vemos salir de la habitación gritando que su ropa no le queda. Por otro lado, tampoco es como que le haga falta, así como Evee, la belleza de Tyee es genuina, no depende de maquillaje, de joyas o de los que vistan. Podrían salir con un chal y verse igual o mejor.

La tensión comienza a ser palpable en el mismo momento en que Evee y Tyee se encuentran de frente. Se que mi mejor amiga está analizándola completamente, de pie a cabeza, así como hace cualquier familiar cuando le presentas a tu nueva pareja. Van en la misma universidad, probablemente la ha visto un par de veces, pero apostaría mi vida a que para Tyee, es primera vez que la ve. Lo que no se, es lo que está pensando Evee. ¿Se le estarán pasando por la cabeza todas las veces que me celó con ella? ¿Se seguirá sintiendo así?

En realidad no me preocupa lo que pueda pensar Evee, sé que puedo hablar con ella más tarde y arreglar todo. Tampoco me preocupa lo que tenga que decir; sin importar que, Tyee puede lidiar con ello y salir de aquí sin ninguna preocupación. ¿Pero lo que mi mejor amiga diga? Joder, eso sí que me tiene sudando.

No importa cuán ruda y fuerte Evee represente ser, no es ni tanto como lo es mi mejor amiga, y si por alguna razón ella decide que no le cae bien, estamos todos jodidos. Literal. Me preocupa que pueda soltar algo que no tenga vuelta atrás.

—¡Hey!— saluda a Ev con una sonrisa. —¿Así que eres tú la chica que logró atrapar a este pelmazo?— Tyee me da un golpecito en el hombro y toma asiento en la silla frente a ella.

—Asumo los cargos— confiesa Evee, sonando más tensa de lo que intenta disimular.

—¿Arduo trabajo, no?

—¿Eh?— ella la mira totalmente perdida, como si no entendiera la pregunta. Muevo la silla para invitarla a sentarse nuevamente, y hago lo mismo a su lado.

—Hacer que un mujeriego detenga sus actividades no es tarea fácil.

—Vaya amiga— me quejo.

—Ya— lo capta y sonríe — Pues no, la verdad. Pero apuesto que tampoco lo fue para ti cambiando otro Titán.

Por ahí no, Evee. No le toques a Kylan, joder.

La mirada de Tyee es congelante. No sé si ella se dará cuenta de que la advertencia es casi palpable, y sé que da miedo. Evee tan solo ha intentado seguir la conversación por el camino de lo seguro, metiendo a Kylan en nuestro saco y encaminándose por lo que pensaba que eran las similitudes entre ambas. Lo que no tenía idea, es que Kylan está lejos de parecerse a nosotros, que había estado en una tregua con el sexo después de matar a su novia, y que después de Tyee, la única vez que estuvo con alguien más, fue cuando precisamente la engañó; algo de lo que estoy seguro de que ella no quiere hablar. Es por ello que no me sorprende cuando la única respuesta de Tyee, es una mirada asesina.

Perfecto Engaño | Titanes III |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora