Capítulo 109.

4.8K 304 68
                                    

NARRA JORGE.

Él ordena que me metan en una furgoneta negra, hago mil preguntas pero ninguna obtiene respuesta, él es capaz de todo.. pero no entiendo este juego. Me atan e incluso intentan amordazarme pero no lo permito, padre me escuchará todo el camino quiera o no, me da igual si al final termina matándome, moriré repitiéndole mil veces lo desgraciado y miserable que es, pero sobre todo el profundo asco que me da.

De repente en la misma furgoneta meten a mi madre atada de pies y manos.

YO: ¿Dónde está papá?
MAMÁ: No lo sé, pensaba que lo traerían también.
YO: ¿¡Dónde esta mi padre!?
PADRE: Él es el menos importante.

Doy una patada al asiento y él me agarra del cuello.

PADRE: Arranca. -Le dice al conductor-
YO: ¡No!
PADRE: ¡Ya! -Exclama-

No importan mis intentos, ni siquiera importan mis súplicas, el conductor arranca por órdenes de padre y nos marchamos.

NARRA KAMMIE.

No hacemos ningún caso a la película, nos besamos y hablamos de futuro mientras yo como palomitas.

JESÚS: Entonces quieres vivir en una casa grande con jardín.
YO: Me gustaría, pero lo que más me gustaría es vivir contigo donde sea, lo importante es estar contigo y con nuestros hijos.
JESÚS: A mi me gustaría darte una bonita casa, con su jardín.. -Besa mi frente- con las suficientes habitaciones para nuestros hijos y nuestros futuros hijos.
YO: ¿Más hijos? -Pregunto riendo- ¡Loco!
JESÚS: Seis más.
YO: ¡No! -Exclamo- Idiota.
JESÚS: Me muero de ganas por tener a nuestra pequeña Jade.
YO: ¿Cómo te la imaginas?
JESÚS: Pelirroja como tú, pero esta pequeña debe tener los ojos marrones como yo.
YO: Eres un envidioso porque Aitor tiene los ojos claros.
JESÚS: ¡Merecía mis ojos! -Bromea-

Me hace cosquillas, río a carcajadas, golpeó su pecho varias veces hasta que me libera al verme han agotada.

YO: Para -Digo sin aire por reír tanto-
JESÚS: Déjame escucharla.

Pone la cabeza sobre mi vientre para escuchar a nuestra Jade, emocionado, con los ojos brillantes y una sonrisa enorme, casi como un niño pequeño descubriendo algo nuevo.

JESÚS: Se mueve cada vez más rápido.
YO: Esta un poco nerviosa.
JESÚS: ¿Tiene hambre?
YO: No -Ríe-
JESÚS: ¿Y entonces?
YO: No quiere nada, solo se mueve.
JESÚS: Soy papá.
YO: ¿Por qué no le cantas mi canción favorita?

Él ríe, pone las dos manos sobre mi vientre y coge aire. Sin música, sin nada más que su voz, empieza a cantar: "A Thousand Years".

Me emociono de tan solo oírle, se ve tan hermoso cantándole a nuestra pequeña mientras aún está en mi vientre.. es maravilloso.

AITOR: ¡Mami, papi!

Él nos interrumpe, se detiene, alza la ceja, ríe y corre hacía nosotros.

AITOR: Sigue cantando papi.
JESÚS: ¿Te la sabes?
AITOR: Un poquito. -Sonríe-
JESÚS: Ayúdame a cantar.

Los dos cantan un trozo de la canción, me encanta, amo estos momentos en los que somos una familia que no huye, una familia normal.

Ellos empiezan de un momento a otro una guerra de almohadas que acaban en cosquillas.

AITOR: ¡No papi, no! -Exclama-
JESÚS: Di que me quieres más que a mamá.
YO: ¡Envidioso!
AITOR: Os quiero mucho, mucho a los dos.
YO: Nosotros a ti más.
JESÚS: Mucho más.
AITOR: ¿La tata también?
JESÚS: Si, la tata también.

Salta en la cama emocionado.

AITOR: Yo también te quiero tata.

NARRA DANIEL.

Coral y yo nos vamos a casa para ducharnos o más bien para tener un momento a solas para nosotros.

YO: Que ganas tenía de tenerte a solas.
CORAL: Yo también. -Echa la cabeza a un lado para que le bese el cuello-
YO: Delante de Aitor no podía besarte así.
CORAL: Ahora si.. -Sonríe-
YO: Primero tengo que contarte algo.

Llaman a la puerta, pongo los ojos en blanco, suspiro y abro la puerta.

ALANNA: ¡Dani! -Se abalanza sobre mi-
YO: ¿Qué haces? ¡Apártate!
ALANNA: Te he echado de menos.. te juro que he cambiado, que te quiero.
YO: Yo no siento nada por ti, absolutamente nada, tengo pareja y la amo, la amo con toda mi alma. Tú no significaste nada para mi, ni siquiera me enamoré de ti, solo sentía atracción física, ahora vete, no quiero verte, ni que te atravieses nunca más en mi camino.

Coral me abraza por la espalda y se asoma para que ella la vea.

ALANNA: ¿Es está? Es poca cosa para ti.
YO: Es perfecta para mi, todo lo que necesito.

CORAL: Vete, mi novio y yo queremos intimidad ¿Me entiendes?
ALANNA: Zorra..
CORAL: ¿Prefieres qué te saque yo?
YO: No pierdas el tiempo cariño.

Le cierro la puerta en la cara, me giro y Coral me detiene cuando voy a besarla.

CORAL: ¿Era lo qué ibas a contarme?
YO: Si.
CORAL: Vaya.. -Susurra desviando la mirada-
YO: Ella es un error de esos que te encantaría no haber cometido nunca, estoy arrepentido de salir con esa arpía.
CORAL: No se como he podido contenerme, quería romperle la boca en cuanto te ha dicho que te quiere.
YO: A mi no me importa que me quiera, me importa que tú me quieras, que nunca dejes de quererme.
CORAL: ¿De verdad? -Pregunto sonriendo lentamente-
YO: Te lo juro.
CORAL: ¿Se ha comunicado contigo?
YO: No ha dejado de llamarme ni un solo día, pero te juro que yo no.. -Me besa tras reír-
CORAL: Te he oído, confío en ti -Sonrío- te amo.
YO: ¿Me juras qué no piensas cosas qué no son?
CORAL: Te juro que se que me amas tanto como yo te amo a ti.
YO: Yo te amo más.. muchísimo más. -La rodeó con mis brazos- Eres la única.

NARRA JESÚS.

Después de un rato maravilloso bajamos a la sala.

AITOR: ¡Qué hambre!
KAMMIE: Ven, te haré un sándwich.

Ellos se marchan a la cocina. Edik se acerca a mi y nos sentamos en el sofá.

EDIK: ¿Está más tranquila?
YO: Si, he conseguido que deje de pensar en lo malo, ha pasado una buena tarde.
EDIK: Gracias por hacerla tan feliz, eres como un hijo para mi Oviedo.
YO: Yo le agradezco mucho que la cuide y la proteja, para ella es muy importante tener protección.
EDIK: Es mi pequeña, estoy intentando remendar el daño que hice cuando era un hombre horrible.
YO: Ella confía en ti, no sé si algún día te llamará papá, pero te comportas como tal y ella se da cuenta de eso.
EDIK: Quiero que recupere la felicidad que perdió por culpa de ese miserable y para eso tengo que encontrar a su familia.
YO: Te lo agradecerá infinitamente.

De repente lo llaman, se aparta un poco para hablar a solas y cuando termina se acerca a mi, por su cara puedo deducir que algo no va bien.

YO: ¿Pasa algo? No tienes buena cara.
EDIK: Han encontrado al hombre que crió a Kammie.
YO: ¿¡De verdad!? ¡Ka...-Me frena-
EDIK: No.
YO: ¿Qué pasa?

El secreto. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora