El secreto. ®

Capítulo 85.

NARRA KAMMIE.

Intento levantarme pero él me agarra volviendo a sentarme a la fuerza.

PADRE: ¿Asustada?
YO: ¿Qué grabación vas a poner?

Él ríe, pasa la mano por mi cabeza y se acerca a mi oído.

PADRE: La que más te gusta.
YO: No lo hagas.
PADRE: ¿Tienes miedo de qué tu hermano te odie para siempre?
YO: ¡Cállate!

Jorge nos mira intentando entender algo de lo que estamos hablando. Padre le da al play y yo agacho la cabeza.

PADRE: La que estás buscando esta bien guardada bonita, nunca la encontrarás -Susurra- ¿No querías una grabación? Pues aquí la tienes.

Me levanta la cabeza para que mire directamente a la pantalla.

Me hace revivir uno de los peores momentos de mi vida.

—FLASHBACK—

PAPÁ: Hija, dime que está ocurriendo.
YO: ¡No puedo!
PAPÁ: No podré ayudarte si no me explicas.

Mi padre entra rápidamente en casa.

PAPÁ: Tenemos que salir de aquí ¿Dónde está Jorge?
YO: En clase.
PAPÁ: Iremos a recogerlo.
YO: Papá acabo de dar a luz, no puedo moverme.
PAPÁ: No voy a permitir perderos a vosotros también.
YO: ¡Déjame a mi! Todo esto es culpa mía.
PAPÁ: ¡No me iré sin ti!

Agarra mi brazo con fuerza y estira de mi.

De repente aparece él, el hombre que está apunto de destrozar nuestras vida para siempre.

PADRE: ¿Pensabais huir de mi?
YO: Déjanos en paz.
PADRE: Nunca.
YO: Él no tiene culpa, déjalo ir.
PADRE: Cierra la bocaza y ven conmigo, escapar de mi no será una solución, solo apretarás más la soga de tu cuello.
PAPÁ: No. -Se interpone-

Padre suelta una carcajada, ordena a dos de sus hombres agarrarlo y yo le suplico de rodillas.

PADRE: Mira bien lo qué has conseguido Kammie, mira bien todo porque es tu culpa, solo tu culpa.
YO: ¡Déjalo en paz!
PADRE: Sabes que no lo haré.
YO: Me iré contigo.
PADRE: Necesito algo que te obligue a permanecer a mi lado para siempre.
YO: Tienes la grabación.

Suelta una carcajada. Golpean a mi padre varias veces en el rostro y abdomen.

PADRE: Necesito a alguien que ames.
YO: Por favor. -Suplico-
PADRE: Él o tu hijo, decídete.

Me pongo en pie, pongo la mano en mi pecho, lloro y me aparto.

PAPÁ: ¿Hija?

Lo amordazan y duermen con cloroformo, seguido lo meten en una furgoneta negra y padre me alarga su mano.

PADRE: Vamos.

—FIN DEL FLASHBACK—

Ese día las cámaras de seguridad de mi antigua casa grabaron todo y por esa razón padre tiene esa grabación.

Lógicamente Jorge la ve sin sonido, sin saber porqué razón me aparté permitiendo lo que hasta el día de hoy no he podido cambiar.

PADRE: ¿Qué te parece hijo mío?
YO: Eres detestable.
JORGE: Permitiste que se llevarán a papá.
YO: ¿Qué podía hacer para impedirlo?
JORGE: ¡Lo qué fuera! -Me grita- Pero te apartaste, le enseñaste a papá tu verdadera cara, ahora entiendo porqué tanta culpabilidad, porque insistías en que tenías la culpa ¡Ahora lo entiendo todo!
YO: No entiendes nada.
JORGE: ¿Qué más debo entender? ¿¡Eh!?

Padre ha conseguido lo que quería, poner a mi único apoyo en mi contra. Jorge se marcha tras lanzar el jarrón de nuestra izquierda contra la pared.

YO: ¡Jorge!
JORGE: ¡No me dirijas la puta palabra!

Él disfruta de lo que está viendo, se acerca a mi oído, me aparta el pelo y deja un beso sobre mi cabeza.

PADRE: Es tan fácil conseguir que Jorge te desprecie.
YO: Sabes tan bien como yo porqué me aparté.
PADRE: Si, pero él nunca lo sabrá.
YO: Me pusiste entre la espada y la pared, me amenazaste con mi hijo.
PADRE: Y tú no dudaste un segundo.

Me deja sola, lloro con las manos sobre mi rostro, llena de rabia, de tristeza.. y sobre todo de culpa.

NARRA JESÚS.

Al llegar a casa me encierro en mi habitación, camino de un lado a otro desesperado y aún sorprendido.

DANIEL: ¿Podemos hablar?
YO: No tengo cabeza para hablar.
DANIEL: Me asusta lo que tienes en la cabeza hermano.
YO: ¿Esperas qué me quede de brazos cruzados?
DANIEL: Se que no lo harás, la vida de tu segundo hijo está en juego.
YO: La vida de mi segundo hijo y la vida de la mujer que amo, no lo olvides.
DANIEL: Jesús..
YO: No, no voy a rendirme, no voy a dejarla a su suerte ¿Entiendes?

Odio que no sea capaz de apoyarme, tal vez quiere lo mejor para mi, pero lo mejor para mi no es permanecer sin hacer nada cuando Kammie está en semejante peligro.

YO: Esta embarazada, no fue planeado, quizás es el peor momento para tenerlo ¡Pero ya no hay vuelta atrás!
DANIEL: Lo sé.
YO: Voy a encontrarla con tu ayuda o sin ella.
DANIEL: Tendrás mi ayuda, no vas a hacerlo solo.
YO: ¿Por qué lo haces?
DANIEL: Porque quieres a Kammie y por mucho que yo no quiera que te pongas en peligro por ella lo harás, te enfrentarás a quien sea para conseguir lo que quieres.

Pongo la mano en su hombro, encojo los hombros y me tumbo en la cama.

YO: Cuando quieres con la intensidad que yo la quiero a ella, no te importa nada hermano. Es el amor de mi vida, he intentado hacerme creer lo contrario, he intentado buscar su piel en muchas mujeres pero no puedo ni podré olvidarla y ahora que sé que esta embarazada.. no voy a parar hasta encontrarla.

NARRA KAMMIE.

Subo a mi habitación, padre me persigue y entra cerrando la puerta.

YO: ¿No has tenido bastante con lo qué has hecho?
PADRE: Ahora sabes que no estoy jugando.
YO: ¿Por qué me haces esto? Soy sumisa, ni siquiera te alzo la voz ¡Por qué!
PADRE: Para recordarte que te tengo en mis manos.
YO: Lo único que has hecho es poner a mi hermano en mi contra.
PADRE: Le he resuelto unas cuantas dudas que tenía ¿Pensabas qué le mostraría tu grabación? Ilusa.
YO: Esa grabación es demasiado importante como para tenerla aquí cerca de mi alcance.
PADRE: Nunca serás libre Kammie, hazte a la idea y deja esas ilusiones de adolescente, nunca estarás con Jesús y mucho menos con ese mocoso.
YO: Cállate.
PADRE: No me callaré.

Lo miro con odio mientras él sigue burlándose de mi desgracia.

YO: ¡Miserable! Has logrado que Jorge piense que yo tuve la culpa, pero seamos sinceros, sabías que cuando me amenazaste con mi hijo iba a preferir su vida antes que cualquier otra ¡Solo lo usaste cómo excusa para atrapar al hombre qué te robó a tu amante!
PADRE: Eso no es cierto, no me hagas reír.
YO: ¡Si lo es!
PADRE: Tu misma acabas de decir que tu madre era mi amante.
YO: Te molestó tanto que ella se enamorase del hombre que me acogió y me quiso como su hija que no dudaste ni un instante en hacerle daño.
PADRE: Tu madre jamás lo amó.
YO: Pero fue más feliz que contigo.

Me golpea con fuerza.

PADRE: ¡Eres igual de zorra qué ella!

Levanto la cabeza, agarra mi cuello asfixiándome y cierra el puño.