Capítulo 38

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Estaba atraída por esa bestia, me gustaba esa bestia que me hacía la vida imposible. Que al estar a corta distancia de mí me sentía completamente débil y pensar que siempre llegué a suponer que aquello era rencor hacia él pero no, no es más que una atracción, una atracción peligrosa. Tenía que sacarme esa idea de la cabeza, tenía que olvidar aquello pero la pregunta del día era ¿Cómo lo lograré si convivo con esa bestia?, en todas parte está y cuando se va a trabajar, es el único momento en el que no lo tengo cerca. El único momento en el que no tengo en mente su presencia.
Detuve mi paso frente a mi puerta y suspiré pesado, si Jenny supiera que realmente me gusta Zayn, seguramente me mataría o me daría una larga charla de porque no debería de pensar aquello o del porque estoy delirando, que solo estoy confundida o que todo lo que mi pasa por mi mente es falso.
Entré con toda la tranquilidad o al menos disimulando. Me senté en una esquina del colchón mientras Jenny se encontraba en una de ellas, mantenía su mirada fija en el suelo, callada y con los brazos cruzados, iba a preguntar el porqué su estado pero me ahorre las palabras —quiero que me respondas sólo una pregunta— rompió el silencio incómodo pero preferiría mil veces eso que a sus preguntas —dime, ¿sientes algo por Zayn?— preguntó mirándome fijamente y en ese momento sentí como la comida o la poca que tenía en mi estómago llegaban a mis pies en compañía del corazón —no, claro que no ¿Por qué dices eso? Claro que no— negué varias veces juntando mis manos y removiendo mi cuerpo incómodamente entre las sábanas —no mientas ___, tus ojos brillan cuando lo haces— confesó y me atrapó sorprendida, ¿tan fácil era saber que mentía? —ya hemos hablado de esto Jenny y muy bien sabes que es falso eso— intenté convencerme a mi más que a ella —deja de mentir, sé que te gusta— sonrió de lado pero una sonrisa cansada —es que Jenny, realmente no tengo respuesta a eso— me rendí y ella comenzó a dar vueltas por el lugar —pero tranquila, me quitaré esa idea de la cabeza— hice gestos con las manos alterandome un poco —aja y ¿Cómo carajos crees que vas a lograrlo? ¡No conoces a otro chico más que Zayn!— gritó y le hice una seña para que bajara la voz y justo en ese momento mi cabeza fue iluminada desde el cielo — ¡Debo de conocer a más personas y así lo olvidaré!— propuse emocionada y Jenny me miró irónica quitándome los ánimos —si claro, no conoces a nadie y dime ¿Cómo crees que lo harías? No sales para ningún lado y lo más lejos que has llegado es el jardín— se sentó a mi lado mientras suspiraba —y si, ¿asisto a la escuela?— le sonreí y ella abrió los ojos como platos para luego esbozar una sonrisa enorme.

[*...]

Caminé hasta la oficina de Zayn que no se encontraba muy lejos de mi habitación, mis manos sudaban de lo nerviosa que me encontraba. Tenía que mantenerme fuerte y hablar con claridad si quería lograr lo planeado, si quería olvidar a Zayn Malik.
Toqué tres veces y espero a que me avise que puedo pasar, escuché las palabras necesarias e hice el menor ruido posible, no quería que se enfadara y para cuando ya me había visto, mi mente vacilo diciendo que fuera esperando hasta mañana —¿Qué quieres?— dijo completamente arrogante y suspiré hondo acostumbrada a su típica manera de dirigirse hacia mí —quiero asistir a la escuela— solté rápidamente y él se quitó los lentes para luego mirarme fijamente con una de sus cejas levantadas.

Subastada  |Zayn Malik y tu| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora