Subastada |Zayn Malik y tu| TERMINADA

Capítulo 88

Me encontraba en el fondo de la piscina, no me preocupaba por subir a la superficie y para mantenerme bajo del agua, botaba poco a poco el oxígeno acumulado. Poco a poco mis pulmones exigieron respirar y obvio que Zayn no se molestaría en ayudarme, no me interesaba, estaba borracha, en el fondo de una piscina sin saber nadar. Me encantaría saber que tendrá el remordimiento de que habría muerto en su patio.
No me importaba, cuando mis ojos se iban cerrando y mis pulmones muriendo, fui rodeaba por muchas pequeñas burbujas causadas gracias a que Zayn se había sumergido pero mi gran pregunta era, ¿Me ayudaría?
Sus grandes brazos se liaron a mi cuerpo y me ascendieron hasta lanzarme sobre el pasto verde, mi cuerpo inmediatamente comenzó a expulsar el agua que había tragado, me sentía tan enojada y tan mareada que decidí levantarme y mis piernas temblaron en el intento —¡¿POR QUE ME SACASTE?!— grite exaltada y él solo se dignó a virarme los ojos —mejor agradece que lo hice— refunfuño —bueno, si tanto te molesta, me hubieses dejado ahogarme— respondí ya alterada, no entendía la razón por la que estaba enojada, solo lo estaba —no dejaría alguien morir en mi patio, se llenaría todo de policías y las noticias caerían sobre mí, no puedo perjudicar mi imagen— respondió con arrogancia —idiota— rebote entre dientes —no soy yo quien se lanza a una piscina estando ebria, deberías avergonzarte— y sin más que decir se adentró nuevamente a la casa, seguí sus pasos —eres un arrogante de mierda— dije al llegar a las escaleras que ya Zayn comenzaba subir —y tu niña estúpida— contraatacó —bueno, esta niña estúpida vaya que te importa mucho— intente defender mi dignidad —sí, me importas porque eres mi empleada y mi servidumbre me importa porque pague mucho dinero por ti— volteo su cuerpo hacia mi mientras apretaba sus puños con fuerza —bueno, bien dicho, soy tu empleada y así deberá ser ahora en adelante, de empleada y empleador, solo negocios— dichas palabras salieron de un fondo de mi mente y comenzaron a aturdirme al decirlas, ¿le dejaría de hablar? ¿Me importaba? —Ok, como lo desees, ____ Iglesias— y sin más que decir, subió hasta su habitación, y al llegar cerró con fuerza la puerta.

[*...]

Al día siguiente...

Como se le podía llamar, "la resaca" me atormentaba cada vez más, me dolía el cuerpo, la cabeza, tenía migraña y los gritos causados por Malik me atormentaban más aun, este no dejaba de decirme que apresurara mi paso ya que, teníamos que partir a la empresa, era lunes y no tenía nada de ganas de despertarme a las cinco de la mañana, a preparar papeles y ordenarlos por orden alfabético, tamaño o relación empresaria. No, sin duda no las tenía.
Me di una ducha con agua caliente, rápida y necesaria. Luego, me vestí con uno de los trajes, me era necesario volver a lavar ropa sucia, pero no lo haría entre lunes y viernes a menos que me encuentre aburrida, sin nada que hacer y completamente sola... aunque lo de estar sola, siempre sucedía.